Hace unos años, Juan Mari Ansa, un montañero que se ha pateado todo el país, publicó un gran libro (no sólo por su tamaño) sobre las Malloas de Aralar. La publicación reúne itinerarios, historias y leyendas del valle navarro de Araitz, y mil detalles sobre sus gentes. El libro incluye también un desplegable con todas las cimas de las Malloas. Cuando uno lo abre, llaman la atención las líneas rectas que cruzan algunos de los senderos, muy similares a las líneas que se dibujan en los planos de las pistas de las estaciones de esquí. En este caso las líneas son cada uno de los cables que se usaban en el valle para bajar la hierba o la madera desde las zonas de monte más escarpadas hasta prados más accesibles. Este ancestral sistema de transporte permitía salvar los fuertes desniveles de las Malloas y funcionó hasta los primeros años 70 del siglo pasado. Desde hace seis años el valle recrea este sistema de cables en una jornada que sirve para transmitir a las nuevas generaciones este patrimonio cultural. En el monte Larun, hasta hace unos años cada una de las tres bentas que hay en la cima usaban un sistema muy similar, con cables, para transportar los productos (sobre todo tabaco y Ricard) que venden a los turistas franceses. El cable desapareció y hoy es el día que la mayoría de quienes suben a Larun desconocen que hasta hace nada la mercancía llegaba vía cable. Si se asoman a la vertiente sur, todavía se aprecian algunos restos.
viernes, 28 de julio de 2023
viernes, 21 de julio de 2023
Garrapatas
Un día estás sentado en la hierba comiendo un bocata de txistorra con tu cuadrilla en esos comedores que se improvisan en los fiestas, y al día siguiente estás en urgencias con una picadura de garrapata. La profesional sanitaria, con mucho cuidado, te saca el diente de la garrapata que se te ha quedado clavado en las lumbares, te receta antibióticos y ya si eso te abonas a la cerveza sin alcohol hasta el Pobre de mí. Los bichos nos atacan por tierra, mar y aire. Por el aire, las mordeduras de garrapatas, cada vez más comunes, son cosa seria. Por mar llegan las carabelas portuguesas, que ya solo con su nombre acojonan. Por tierra, insectos varios. A las garrapatas y las carabelas no las ves venir, aunque toda precaución es poca. Las garrapatas pueden llegar a transmitir la enfermedad de Lyme, una patología difícil de detectar y diagnosticar, contra la que lucha y previene Alyme, la Asociación Enfermedad de Lyme País Vasco. Durante los últimos meses, Alyme y otras asociaciones han llevado a cabo la campaña de concienciación LYMEtro para dar a conocer la enfermedad de Lyme crónico, reconocer que es una patología emergente en toda Europa y pedir que sea incluida por la Seguridad Social. La iniciativa ha servido también para recordar a Ander y Jessica, que perdieron la vida en su lucha contra esta enfermedad.