jueves, 23 de noviembre de 2017

La EPA

El otro día vino a casa un encuestador del Instituto Nacional de Estadística. Habíamos sido seleccionados (fíjate tú que suerte la nuestra) junto a otras 70.000 familias para colaborar en la Encuesta de Población Activa, la EPA. Colaborar es un decir porque estás obligado por ley. Accedí gustosamente. El hombre comenzó a largar preguntas una tras otra mientras apuntaba mis respuestas en una tablet del siglo XX. Hasta que llegó la pregunta del millón. “¿Estaría dispuesto a trabajar menos horas cobrando menos dinero?”, me preguntó. “Sí, claro, me gustaría trabajar siete horas diarias, como los funcionarios”, dije. Por aquello de que se sintió interpelado, me contestó con una puntualización: “Siete horas y quince minutos”. Me acordé de la encuesta de marras y de los horarios laborales la semana pasada, cuando acompañé a un familiar a renovar el DNI a una de esas oficinas en las que se respira simpatía por los cuatro costados. De entre la media docena de funcionarios que trabajaban a esa hora, reparé en uno. Estaba sentado en una mesa con el listado de los nombres y apellidos de las personas que habían solicitado cita previa para renovar el DNI o el pasaporte. Según entraba el personal por la puerta, les preguntaba su nombre y lo tachaba de la lista. Benditas siete horas y 15 minutos.

viernes, 10 de noviembre de 2017

De Behobia a la Casa Consistorial

XABIER ALBISTUR ES EL ÚNICO ALCALDE 

DE DONOSTIA QUE HA CORRIDO LA CARRERA


Si se bucea en las clasificaciones históricas de la época moderna de la Behobia-San Sebastián (1979-2016) y se teclea el nombre y los apellidos de Xabier Albistur Marín, se obtienen cuatro resultados. Pero tirando de memoria, Albistur (Doneztebe, 1944), alcalde de Donostia de 1987 a 1991, recuerda que ha participado en la carrera seis o siete veces. La primera con 42 años, y la última con 60. Ahora tiene 73. Puede presumir de ser el único alcalde de la capital guipuzcoana que ha corrido la Behobia. Las fotos que acompañan este reportaje lo atestiguan.
Albistur debutó en la carrera a mediados de los años 80, cuando ocupaba cargos en la Diputación de Gipuzkoa. Lo hizo junto al recientemente fallecido Miguel Puertas y todavía tiene memorizada la marca porque fue la mejor que hizo de todas las Behobias que disputó: una hora y 37 minutos. Ya como alcalde, disputó un par de Behobias, una de ellas en compañía del Paul Badiola, por entonces primer edil de Donibane Lohizune, con el que le une una gran amistad.
Aficionado de siempre a correr y a andar en bici, la Behobia no era la única prueba en la que solía participar. Era habitual que disputase pruebas populares y también marchas cicloturistas. “Era una manera de estar en forma. Con tanta actividad política y burocrática, era la única forma de practicar un deporte de manera regular. Me gustaba mucho el fútbol pero no había forma de jugar porque no me coincidían los horarios. Así que combinaba correr con andar en bici”, explica Albistur. “En bici he participado en muchas pruebas cicloturistas, en casi todas las de Gipuzkoa, en los Lagos (de Covadonga), en Pirineos...”, abunda.
Albistur acostumbraba a entrenar dos o tres veces por semana al acabar las jornadas interminables de trabajo. Llegaba a casa, se cambiaba de ropa y salía a correr, a veces junto a algún guardia municipal, a veces solo, a pesar de las recomendaciones de que se entrenara acompañado. Una semana antes de la Behobia, solía completar el recorrido entero, los 20 kilómetros desde el barrio irundarra a la capital, para calibrar la forma con la que afrontaba el reto. “Nos gustaba correr a 5 minutos el kilómetro para hacer 1h40, más o menos”, recuerda. Los tiempos así lo atestiguan: 1h41 en 1991, 1:40 en 1992, 1h47 en 1993… El asunto se torció la última vez que participó en la Behobia. Sufrió una lesión en plena carrera y entró en la meta andando.
Lejos de los avatares de la política municipal, la Behobia no fue, sin embargo, el mayor desafío al que se enfrentó en los 90. En 1993 participó por primera y última vez en un maratón. Fue en Donostia, que ese año acogió la Copa del Mundo. Albistur ya no era alcalde (Odón Elorza ocupaba entonces el cargo), pero fue una de las personas que contribuyó a que la capital acogiera la cita mundial y fue también uno de los 3.000 y pico corredores que cruzaron la meta del estadio de Anoeta (la prueba estaba abierta a profesionales y populares). A la cabeza de todos los atletas estuvo el británico Richard Nerurkar, en una mañana en la que Diego García logró una notable décima posición y Rodrigo Gavela batió el récord de España. Albistur recuerda su marca (3h50m) pero sobre todo el sufrimiento en los míticos 42 kilómetros y 195 metros. “En la segunda vuelta al circuito ya iba fundido. No me retiré en el primer paso por Anoeta a pesar de que estaba mi familia y el sufrimiento fue terrible, terrible”, rememora.
El maratón no fue la experiencia más gratificante. Al contrario de la Behobia, que siempre le dejaba buenas sensaciones. Ya entonces la carrera gozaba de un ambiente en las aceras espectacular: “Pasabas por un pasillo humano en Irun. La parte más dura era de Gaintxurizketa a Miracruz, pero después volvías a correr en medio de un pasillo humano”. La salida (no existían el chip ni las salidas escalonadas) era un caos de corredores tratando de enfilar hacia Donostia lo más pronto posible y la llegada era junto al Ayuntamiento, prácticamente a las puertas de la Casa Consistorial en la calle Ijentea.
Un principio de artrosis en una rodilla impide a Albistur correr como hace años, aunque mata el gusanillo de practicar deporte con la bici y con paseos por el monte. Ya no corre la Behobia pero acostumbra a ver la prueba como espectador, más si cabe ahora para animar a su hijo Xabier, que este año participará por segunda vez. Albistur destaca la buena salud que tiene la carrera (“Si no existiera habría que inventarla”, dice), y le augura un buen futuro: “La Behobia es todo un éxito. Es interesante para Donostia y beneficiosa para la ciudad porque le coloca en el mapa, genera una actividad turística interesante y también porque mucha gente hace deporte durante muchos meses del año por ese motivo. Es un reto importante para el Fortuna, que lo hace muy bien. Un reto que hay que cuidar y esmerar. Es un negocio para el Fortuna, lo cual me alegra porque es una forma de obtener recursos para otras actividades”.

jueves, 9 de noviembre de 2017

No sé si me explico

hay dos preguntas que con cierta frecuencia nos hacen a los periodistas. Una es si tenemos mucho trabajo, y la otra es a qué hora empezamos nuestra jornada laboral. A mí me han preguntado por ambas cuestiones decenas de veces, ya sean amigos, familiares, vecinos, en la carnicería, en la peluquería, de poteo y hasta haciendo deporte. Sale en la conversación. Y he comprobado en esta misma redacción que no soy el único al que se lo preguntan. Por aclarar, y sin acritud, en la prensa escrita sucede como antiguamente en los trenes de larga distancia de Renfe, que sabías cuándo salías pero no a qué hora llegabas. O sea, que más o menos sabemos a qué hora entramos en la redacción, pero nunca cuándo salimos. Que nos pueden ver que a las once de la mañana estamos comprando una pescadilla en la pescadería, pero a las doce menos cinco de la noche andamos cerrando una página antes de que la engulla la rotativa. Tenemos unos horarios rarunos y unas libranzas también rarunas. Normalmente llegamos tarde o a todo correr a las cenas con la familia y los amigos. ¿Y de trabajo qué tal? Pues siempre (o casi siempre) hasta arriba. Sobre todo desde que se inventó el correo electrónico y nos bombardean con un buen número de convocatorias y notas de presa sin interés informativo. No sé si me explico.

domingo, 5 de noviembre de 2017

Behobia VIP's


DE GURUCETA muro A IBARRETXE, REPASO DE 
LOS ROSTROS POPULARES QUE HAN CORRIDO LA BEHOBIA
Son populares entre los populares. Rostros conocidos para el público que a veces pasan desapercibidos para las miles de personas que se apostan a ambos lados de la carretera para ver y aplaudir el paso del pelotón de corredores de la Behobia-San Sebastián. Políticos, exdeportistas profesionales, actores, actrices, científicos, periodistas o cantantes. La Behobia, que se celebra el próximo domingo, hace tiempo que se ha convertido en un acontecimiento social y desde siempre ha atraído a caras conocidas que afrontan el reto de unir el barrio irundarra y el Boulevard en un tobogán de 20 kilómetros de cuestas y emociones.
No están todos los que son, pero sí son todos los que están. Juan José Ibarretxe, por ejemplo. Al exlehendakari se le recuerda por su afición a la bicicleta (en sus vacaciones de 2007 llegó a completar la durísima París-Brest, de 1.200 kilómetros, una de las pruebas cicloturistas más duras del mundo), pero no desentonaba corriendo. En los años 90, cuando era vicelehendakari y consejero de Hacienda, participó cuatro veces (95, 96, 97 y 98) con registros que oscilaron entre 1h32 y 1h35. No es el único jeltzale que ha disputado la carrera. Aitor Aldasoro, alcalde de Beasain, suma doce participaciones, la última en 2015; Olatz Peon, primera edil de Tolosa, suma media docena; Xabier Barandiaran, jefe de gabinete del diputado general de Gipuzkoa, lleva cuatro aunque hizo la primera en 1996; Idoia Elorza, responsable de Organización del GBB, también probó con éxito cuatro años seguidos (de 2008 a 2011) y Juanje Alberdi, exalcalde de Bergara, lleva tres desde 2014, siempre por debajo de la hora y media. Otro exalcalde, Xabier Albistur, participó media docena de veces en los años 90, dos de ellas cuando era primer edil de Donostia (el único alcalde de la capital que ha completado la carrera).
En las filas de la izquierda aber-tzale destaca el exconcejal de DonostiaJoseba Ibazeta, que ha participado diez veces y marcó un espectacular 1h14 en su debut en 1986. No le va a la zaga el expresidente de Sortu,Hasier Arraiz, con ocho Behobias y 1h21, mientras que Joseba Permach ha corrido otras tantas veces pero con tiempos más modestos,Miren Larrion lo hizo en 2012, y el portavoz en las JJGG de Gipuzkoa,Iban Asenjo, en 2013, 2014 y 2015. Este año vuelve. Rafaela Romero, expresidenta de la Cámara territorial, no participará este año pero lo ha hecho en cuatro ocasiones, una más que el diputado de Cultura y Deportes, Denis Itxaso, que duda si salir el próximo domingo y mejorar su 1h43 de 2014. La consejera de Educación, Cristina Uriarte, compitió en 2007 y 2008, y su compañero en el Gobierno Vasco Jon Redondo, director de Deportes y exremero de Orio, suele predicar con el ejemplo (ha corrido seis veces).
EXDEPORTISTAS PROFESIONALES Si amplia es la lista de políticos, no se queda corta la de exdeportistas profesionales. La nónima de futbolistas, por ejemplo, incluye a los exrealistas Bixio Gorriz; que acumula ocho BehobiasAitor López Rekarte, que hizo un marcón de 1h12 en 2012, Joseba Llorente (en 2014 y 2015), exsecretario técnico del Real Unión Iñaki Berruet, Javi Guruzeta, el expresidente de la RealIñaki Badiola (1h16 en su debut en 2001), o el exjugador y también expresidente Miguel Fuentes, que corrió en 2002 en 2h15. No superó a su mujer, la periodista Elena Azpeitia, que ha disputado la prueba en siete ocasiones. El exentrenador del Barça Luis Enrique corrió en 2007 y realizó un notable registro de 1h19. Aficionado al triatlón y a la bici de carretera, no fue su única incursión en Donostia ya que también participó en la media maratón de primavera. El exfutbolista y hoy representanteIñaki Ibáñez también ha participado en la Behobia, al igual que otras gentes del fútbol que quedan lejanas en el tiempo como el fallecido árbitro Emilio Guruceta Muro (1h42 en 1986) o el también trencilla tolosarra Joaquín Urío Velázquez, que participó ocho veces en los años 90.
La Behobia ha atraído a deportistas de disciplinas variadas, pero destacan sobremanera por sus tiempos los ciclistas. Tras colgar la bici,Abraham Olano participó cinco veces y llegó hacer 1h12 en 2007 (acreditó 2h39 en maratón), algo mejor que Joseba Beloki, que tiene una marca de 1h17. No superan a Neil Stephens, que en 2007 hizo 1h11, e Iñigo Chaurreau tampoco desentona con sus 1h14. Más modestos aunque meritorios son los tiempos del exportero de balonmano del Bidasoa Xabier Barreto (1h40 en 2010) y de su excompañero Juan Domínguez, de la exjugador de la Real de hockey sobre hierba Anabel Fuentes (lleva tres Behobias desde 2014), o del harrijaso-tzaile Iñaki Perurena, que completó la carrera con sus ciento y pico kilos en una hora y 54 minutos en 2010. Los montañeros de relumbrón también han probado alguna vez la Behobia. Edurne Pasaban lo hizo en 1996, 1997, 2000 y 2001. Este último año (en mayo había ascendido al Everest, su primer ochomil) marcó su mejor registro con 1h30. Los navarros Pitxi Egillor y el desaparecido Iñaki Ochoa de Olza corrieron en 1986 y 1996, respectivamente. El malogrado Julen Madina también lo hizo en 1986. Más reciente es la participación del expelotari Ekaitz Saralegi. En 2015 se retiró en el kilómetro 8 por problemas musculares pero se desquitó hace un año, horas antes de ejercer de botillero de Altuna en las semifinales del Cuatro y Medio. Juantxo Koka es otro de los expelotaris que acabó la Behobia, en su caso en 2010, y este año espera debutar Jon Apezetxea, intendente de Aspe. Y no es pelotari, pero sabe la biblia de este deporte Xabier Euzkitze, que ha participado diez veces y puede presumir de haber bajado de la hora media (1h28 en 2009). EITB ha sido y es una prolífica cantera para la Behobia. A la cabeza de todos está Andoni Aizpuru, con la friolera de 22 participaciones, aunque también han corrido más de una vez Estitxu Fernández, que debutó junto a Euzkitze en 2001 (salieron y llegaron juntos), Asier Aranguren,Jon ArtanoFermín AramendiMikel Elizegi, Juanan Legoburu, que puede contar que en 1986 fue decimosegundo (1h07), y Julen Telleria.
PERIODISTAS El abanico de rostros populares del periodismo es abierto a no más poder. Por la ruta entre Behobia y Donostia se ha podido ver aAnne Igartiburu (que en 1992 fue séptima en su categoría y repitió en 2009), Jon Sistiaga, el pasaitarra Joseba Larrañaga, la repostera y presentadora de televisión Alma Obregón (grabó su participación en 2014 y la colgó en la redes sociales), y Raúl Gómez, el presentador deMaraton Man que debutó el año pasado y prometió volver. Hablando de regresos, en la edición de este año vuelve Mikel Erentxun tras el paréntesis del año pasado. Será su sexta Behobia, que se suma a maratones en Berlín, Nueva York y Donostia, e incluso a la Zegama-Aizkorri. Otro cantante habitual en la salida de la Behobia es Serafín Zubiri, que ha corrido a pie y también con patines. Haritz Garde Pablo Benegas, de La Oreja de Van Gogh, cumplieron el reto con éxito en 2012. Empezaron y acabaron juntos. Álex Ubago no ha debutado aunque suele acompañar a su hijo Pablo en la Behobia Txiki y anima a su mujer,María Alcorta, que sí ha corrido la carrera. Del mundo del espectáculo también suele ser habitual la presencia de actores como Martxelo Rubio(seis participaciones) o Joseba Usabiaga (1h14), que también es un especialista en carreras de montaña, y más esporádicas fueron las participaciones de Sandra Fernández Ferrus (2013), Mariam Hernández (2014) y Miguel Ángel Muñoz (2015). El año pasado se estrenó Kira Miró, habitual del papel couché, como María Cristina Gandía Troconis, a la sazón mujer de El Cordobés. El sacrificado oficio de cocinero también deja tiempo libre para correr, que aprovecha al máximo Eneko Atxa. Fino como su cocina, debutó en 2015 con 1h32, y el año pasado le pegó un bocado de 12 minutos a ese registro. Zigor Iturrieta, habitual en ultras de montaña, también ha pisado en cuatro ocasiones el asfalto de la Behobia. El chef irundarra Iñigo Lavado, que también le pega a la bicicleta, firmó tres participaciones entre 2012 y 2014, siempre por debajo de 1h30, y el del Alameda de Hondarribia,Gorka Txapartegi, también ha participado. Otro amante a los pedales que también corrió hace años es el físico Pedro Miguel Etxenike, y más reciente es la afición a la Behobia de Xabier Iraola, coordinador general de Enba y colaborador de este periódico, que completó con éxito la Behobia en 2013, 2014 y 2015, o de José Miguel Ayerza, secretario general de Adegi, que ha participado en las tres últimas ediciones. Y es que no hay año sin estreno de ilustre. Entre los más de 30.000 participantes que se esperan el próximo domingo, acierten a encontrar a otros dos exfutbolistas que ya se entrenan estos días para afrontar el reto: Xabi Alonso y Álvaro Arbeloa.

viernes, 3 de noviembre de 2017

Grupos de WhatsApp

Desde que los grupos de WhatsApp han sustituido a las tertulias de sobremesa y a las interminables discusiones de barra de bar, vivo sin vivir en mí. Ahí ando, explicando a los íntimos menos puestos en los vericuetos políticos y judiciales, qué es estar aforado, por qué unos van a la Audiencia Nacional y otros al Tribunal Supremo, valorando si el PDeCAT y ERC concurrirán juntos o por separado, si Podemos y En Comú Podem son lo mismo, por qué hace años en la Diada eran mayoría las senyeras y minoría las esteladas y ahora ocurre a la inversa, qué fue de Unió y de Josep Antoni Duran i Lleida (y de sus desayunos en la suite del Hotel Palace), cuál es la última bravuconería de García Albiol, por qué da la impresión de que el 21-D igual volveremos a la casilla de salida y se repetirá el reparto de escaños de 2015, si se mantendrá el 155 en el caso de que a Rajoy no le convenzan los resultados del 21-D, qué paralelismos hay entre el independentismo catalán y el vasco, cuál es la posición del PNV, a quién recomiendo leer en la prensa catalana (porque sus artículos son interesantes o porque suelen estar bien informados), o por qué dimiten alcaldes del PSC si sus dirigentes se manifestaban el domingo mezclados con el PP, Ciudadanos y falangistas. Pues eso. Que vivo sin vivir en mí.