lunes, 28 de diciembre de 2009

Nosotros, los periodistas

Afortunadamente, los periodistas todavía no nos hemos convertido en un problema, que no enemigo, público. En eso nos ganan de calle los políticos que, según la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), representan ya la tercera preocupación de los ciudadanos, por detrás del paro y la economía y por delante, entre otros asuntos, de la inmigración, el terrorismo y la seguridad ciudadana. Ahí es nada. Quienes tienen como principal misión solucionar los problemas de la plebe se convierten en un problema en sí mismo. En fin. Lo nuestro, lo de los periodistas, todavía no es preocupante aunque tenemos la autoestima más baja que el jefe de Publicidad de TVE. Según otro estudio (el Informe Anual de la Profesión Periodística), cerca del 60% de los ciudadanos tienen una imagen regular, mala o muy mala de los informadores (en 2008 era un 52,5%). No es por echar balones fuera pero, según el mismo estudio, ese deterioro de nuestra imagen viene dado, sobre todo, por la vulneración de la intimidad que practican los (y eso lo digo yo) autodenominados periodistas del corazón. Si atendemos a las frías cifras de ese informe, corren malos tiempos para esta bendita profesión. La precariedad laboral y el desempleo son ya nuestra primera preocupación, por delante del intrusismo, y un 57% reconoce sufrir presiones en su trabajo diario. Para que no falte de nada, un 76,5% de los encuestados opina que los periodistas contribuimos a incrementar el clima de crispación política, así que no tardaremos en convertirnos en un problema ciudadano. Al tiempo.

sábado, 26 de diciembre de 2009

Fenómeno lotería

Cual Andreu Buenafuente y Berto Romero en la sección Cuarto y mitad, un fenómeno paranormal me tiene traspuesto durante estos días: las colas para comprar lotería. No es que abunden, pero haberlas haylas. La fila de gente que se monta a las puertas de la administración de la tal Doña Manolita es para escribir una tesina. La buena de Manolita supongo que ha hecho más que ricos a sus descendientes porque lo suyo es dispensar números mañanas enteras sin parar. Hace unos días presencié el fenómeno en vivo y en directo y se trata de un acontecimiento sobrenatural. En estos tiempos en los que puedes comprar lotería de cualquier parte del mundo por Internet, hay quien se mete cientos de kilómetros para plantarse en la Gran Vía madrileña, chupar un frío del carajo y guardar cola durante dos horas ante la taquilla de la Manolita. Verídico. Sucede lo mismo en la otra punta del mapa, en Sort, donde te puedes plantar el 15 de agosto, con una canícula que te hace sudar a chorros, y para tu incredulidad compruebas que toda esa fila de gente espera paciente para adquirir lotería de Navidad. Hace unos días, en uno de esos programas de televisión en los que las cámaras entran hasta al cocina (literal) para ver si ese día hay paella o fabada, entrevistaron a un tipo que había cubierto el trayecto Madrid-Sort-Madrid (1.156 kilómetros) para comprar un décimo en la Administración de La Bruja de Oro, ésa que ha hecho de ídem a Xavier Gabriel, un tipo con un ego que no le cabe en el cuerpo. Ya lo dice Mari Carmen: "La lotería de Navidad es la más ladrona; mucha pedrea y poca ganancia".

lunes, 14 de diciembre de 2009

Iparralde existe

Sí. Y se extiende por tres territorios. Como a veces nos creemos el ombligo del mundo, se diría que hace unos días Sébastien Gonzalez, y ayer Sustrai Colina y Amets Arzallus, pusieron a Iparralde en el particular mapamundi vasco. Pese a que no existen los obstáculos físicos de antaño, la muga mental se levanta aún para muchas personas, como una de esas barreras que nos impedían la libre circulación por los pasos de Ibardin, Lizuniaga, Izpegi, Dantxarinea o Lizaieta. Será cuestión de romper los estereotipos que tenemos unos y otros, los de aquel lado del Bidasoa y los de esta orilla. Estereotipos que se rompen en mil pedazos si se vive a caballo entre Iparralde y Hegoalde. Es más, mucho más, lo que nos une que lo que nos separa, aunque en los últimos tiempos el trasiego de un lado al otro sea desigual. Son más las gentes de Iparralde que visitan Hegoalde, que a la inversa. Antes cruzábamos la muga para comprar Levi"s, productos lácteos y aceite y, en los últimos años, ropa para los infantes. Con la cacareada globalización, esa tendencia ha cambiado. Cruzamos menos la muga pero cada vez son más las gentes de Iparralde que nos visitan, ya sea para gastarse sus euros en las tiendas del tío Amancio, para ver jugar a la Real o para asistir a la final del BEC. Seguramente saben más los de Iparralde de nosotros que nosotros de ellos. Hoy es el día en que hay quien descubre que Donibane Garazi existe, que Sara y Ainhoa son algo más que sendos bonitos nombres de mujer, y que hay vida más allá de Pausu.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Antipáticos futbolistas

Hace unas semanas, una amiga decidió acercarse hasta el hotel en el que iba a alojarse el Barça pocas horas antes de jugar contra Osasuna en Pamplona. Pep Guardiola acostumbra a desplazar a su equipo a la ciudad en la que se disputa el partido el mismo día de la cita. Así que en Pamplona le esperaban los tres habituales recibimientos: en el aeropuerto, en el hotel y en el acceso al campo. A mi amiga su hijo le dio tal tabarra con el asunto que no tuvo más remedio que acudir al hotel y esperar con paciencia la llegada de los jugadores, técnicos y dirigentes culés. La ilusión que tenía el chaval fue proporcional a la decepción que le causó a ella, poco amiga del fútbol y sus circunstancias, el paseíllo de las megaestrellas desde el autobús al hall. "Ni un triste saludo se dignaron a hacer", me contó entonces. Hace tiempo que servidor no acude al recibimiento de un equipo (cuando vengan Dieguito y su Argentina para, pongamos, jugar contra Euskadi-Euskal Herria-Euskal Selekzioa-la selección vasca, Vascongadas, o lo que sea, me colocaré en primera fila). Pero basta con ver las imágenes que ofrecen las televisiones cada vez que viaja un equipo para comprobar que algunos jugadores (en éste y otros asuntos no conviene generalizar) son lo que toda la vida se ha llamado antipáticos. Hinchas y curiosos les jalean, pero ellos desfilan con una oreja pegada a un móvil o, mayormente, con las dos orejas dedicadas única y exclusivamente a escuchar la música en unos enormes auriculares (recúerdese a Ronaldinho). Más que concentración, se diría que es mala educación.

sábado, 5 de diciembre de 2009

Príncipes de Asturias

Me llama mi primo Borja, repijo como él solo. El chaval es un torrente de imaginación. En las últimas semanas está siguiendo atentamente el debate sobre los símbolos que tiene entretenidos a los políticos. Está feliz y contento porque por fin se cumplirá uno de sus históricos anhelos: que las selecciones españolas de fútbol y baloncesto jueguen en las Vascongadas y que un final de etapa de la Vuelta acabe de Pancorbo para aquí. El chaval está entusiasmado. Tanto, que pide más. "Mira Juanma", me dice. "Me he enterado de que en Eibar se va a construir un hospital. Qué menos que bautizarlo como Hospital Infanta Elena. Ya es hora de que la Casa Real dé nombre a algún edificio, calle o similar en las Vascongadas. Así, de paso, le alegramos la cara a la Elena, que desde que lo ha dejado con el del patinete está muy mustia. Y ya puestos, qué menos que bautizar el nuevo polideportivo de Aretxabaleta con el nombre de Príncipes de Asturias". (Total, y eso lo digo yo, si Felipe sólo da nombre a los polideportivos de Majadahonda, Arganda, Zaragoza, Chipiona, Ciudad Real, el campo de fútbol del Cacereño y 200 más). El chaval sigue desatado al teléfono y redondea la faena con otra propuesta. "Hay otro símbolo del que nadie habla", me dice. "El toro de Osborne. En las Vascongadas sólo hay uno, en el kilómetro 323 de Rivabellosa, en la A-1", me precisa. "Qué menos que Vizcaya y Guipúzcoa tengan un par de toros. Te diré más, uno lo pondría en Cestona, al ladito del balneario, y el otro en Placencia de las Armas, junto a la
AP-1". Y olé.

domingo, 29 de noviembre de 2009

"Google Street View"

Si el señor o la señora Google tienen a bien dentro de unos días o meses volcar en Internet toda la información que han recopilado por estos lares para su servicio de Street View, albergo la sana aspiración de verme reflejado en alguna de esas imágenes en tres dimensiones. E intuyo, incluso, en qué lugar del mapa apareceré reflejado. Hace un par de semanas me crucé en plena carretera con un coche que llevaba en la puerta del copiloto un distintivo del buscador más famoso del mundo, y sobre el techo tenía colocado una especie de antenón con todo un aparataje de cámaras. Como andábamos en la redacción con la mosca detrás de la oreja con el asunto Google Street View, me di la vuelta en el primer cruce que me encontré en el camino e inicié mi propia búsqueda del dichoso utilitario. Le di caza y, cual fan que saluda a su ídolo, desde el coche le hice señas con las luces de cruce para que se detuviera. Dado que nos estaba resultando más que complicado contactar con las huestes de Google (ahora ya podemos decir que lo hicimos y para muestra vayan a la página 13 ), en aquel tipo que conducía el coche vi una oportunidad llamada entrevista. Insistí con mis señas (a las luces, añadí varios gestos con la mano para que se detuviera), pero nones. El tipo me dejó claro que no paraba el motor ni aunque le enseñara un manojo de billetes de 500. Pero como yo estaba colocado a tiro de cámara, deduzco que seré una de tantas personas pixeladas que uno encuentra con esta herramienta. Hace tiempo que Google entró en nuestra vidas, y ahora entra casi hasta la cocina, o hasta tu propio coche.

viernes, 27 de noviembre de 2009

De portadas y editoriales

Si es usted un fan de las portadas de los periódicos, de esos que llegan a un quiosco o una librería y se dedican a observar con detalle todas las primeras páginas, tiene un sitio en el que puede ampliar la información casi hasta el infinito. La web www.kiosko.net ofrece la posibilidad de leer (gratis) las portadas de un montonazo de periódicos del mundo mundial. Por no citar los obvios, diremos que puede leer (o simplemente ojear) desde el Het Nieuwsbland de Bélgica hasta el Manila Standard de Filipinas, pasando por el Golf News de los Emiratos Árabes. Ayer era un día propicio para visitar las portadas de los periódicos catalanes, por aquello de que doce diarios llevaban un editorial conjunto sobre el (se supone) inminente fallo del Tribunal Constitucional acerca del Estatut. Más allá del trasfondo político que tenga el asunto, en un mundo tan cainita como éste del periodismo resulta casi hasta milagroso que doce cabeceras decidan publicar un mismo editorial sobre un tema de tal trascendencia. No es cuestión de valorar que se trate de un asunto inédito (que no lo es, el 29 de enero de 1977, ABC, El Alcázar, Arriba, Diario 16, Informaciones, Ya, El País y Pueblo publicaron un editorial conjunto-Por la unidad de todos- cinco días después de la matanza de abogados laboralistas en Atocha), sino, por ejemplo, de lanzar una pregunta al aire. En ese GPS que buscamos y no encontramos para lograr la paz, ¿seríamos capaces todos los periódicos editados en esta tierra de publicar en portada un mismo editorial sobre el manido y dichoso conflicto? La respuesta es obvia.

lunes, 23 de noviembre de 2009

"Qué será, será"

Lo que más jode (con perdón) de la mano de Thierry Henry (por lo que se ve, su mano no es la de Dios, sino la del diablo vestido de bleu) no es que Irlanda no vaya a disputar el Mundial de Sudáfrica. Para qué nos vamos a engañar. Ni usted ni yo sabríamos citar siquiera media docena de internacionales irlandeses, Roy (sonría por favor) Keane y Robbie Keane aparte. Vamos, que salvo que vea pasear por La Concha a John Aldridge, cualquier otro jugador le parecerá que es uno de tantos estudiantes de Erasmus. Y, qué quieren, el fútbol de The boys in green (Los chicos de verde) ni es preciosista ni maravilla. Lo que jode (con perdón, bis), repito, no es que Irlanda no compita en Sudáfrica (que también). Lo que jode es que la hinchada irlandesa, una afición modélica, bullanguera, que canta como un orfeón, no pueda desplegar todo su repertorio de cánticos. El miércoles se arrancaron varias veces con el Qué será será que popularizó Doris Day en El hombre que sabía demasiado, de Alfred Hitchcock, e hicieron enmudecer el Stade de France. Dicen quienes han presenciado en directo un partido en Anfield (familia, ya va siendo hora de que caigan esas entraditas) que cuando la afición entona el You"ll never walk alone se te ponen los pelos de punta. Algo parecido sucede cuando escuchas a los irlandeses. En la Eurocopa de Alemania del 88 (los verdes no se han prodigado en los grandes torneos), cuando jugaba Irlanda el realizador de televisión se recreaba en los descansos con una afición que convierte el fútbol en una fiesta. Sudáfrica (y sus bares) se lo pierden. Nos tendremos que conformar con el rugby.

lunes, 16 de noviembre de 2009

Entre condones y anillos

Una joven universitaria (conviene aclarar lo de joven cuando se habla de universitarios, porque hay estudiantes que se pasan media vida en el campus hasta llegar casi a la jubilación), aseguraba el otro día en un reportaje publicado por este periódico que en sus conversaciones de cuadrilla, "la masturbación es un tema que está presente cada dos por tres, incluso a veces somos un poco burras". Se señalaba en la misma información que hoy los adolescentes hablan con total naturalidad de preservativos, anillos vaginales y demás materias y materiales relacionados con el sexo. Algo hemos avanzado, aunque siempre estarán los de siempre para excomulgarnos o señalarnos como herejes si apoyamos que se organicen talleres para, por ejemplo, descubrir la autoexploración sexual. Uno no es ningún carcamal (término utilizado hace unos días por María José Usandizaga en una de sus refriegas dialécticas con Odón Elorza), y recuerda que en sus años mozos de EGB ya recibió clases de educación sexual impulsadas por uno de esos profes que se adelantaban varios cursos al resto. Patxi San Juan se llamaba el profe que nos enseñó todo (o casi todo) lo que había que saber sobre el sexo. Sin risitas (si te reías en plena lección, te abrían la puerta de la clase) y con todo tipo de libros, apuntes y diapositivas. En lugar de recurrir a las chicas del Interviú y Lib (que también), nos adoctrinaba sobre anticonceptivos y órganos reproductores. Y no nos salían granos.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Emulando a Juantxo

sucedió el 8 de febrero de 1986 en el viejo frontón Uranzu. Elgorriaga Bidasoa jugaba el último partido de una rocambolesca Liga que finalizaba con una especie de playoff entre los cuatro mejores equipos. Los irundarras, cuartos en ese momento, recibían al hoy desaparecido Teka de Santander con la necesidad de mantener su posición. A cuatro minutos del final, con empate a 17 goles, el gran Juantxo Villarreal cortó desde el banquillo un contrataque de Silos, que iba directo a intentar batir al portero Munduate. El Teka anotó el gol en un golpe franco, pero el Bidasoa acabó ganando 19-18 y se metió en la fase decisiva de la competición, un hito que coronó al año siguiente con la conquista del primer título. Villarreal fue castigado con doce partidos de sanción. Que me perdone el bueno de Juantxo por no detallar su admirable trayectoria en el club (hoy aún se le añora) y traer a colación esta anécdota, pero es que hace unos días se vivió una escena similar en el Hypo Niederösterreich (Austria)-Metz (Francia) de la segunda jornada de la Liga de Campeones femenina. A siete segundos del final, con empate en el marcador, el técnico del equipo local se abalanzó sobre una jugadora gala que se preparaba para anotar el gol del triunfo. Gunnar Prokop, que así se llama el técnico, cortó la jugaba, fue expulsado y abandonó el banquillo con una media sonrisa en la boca. La jugada, que se puede ver en Internet, le ha costado la suspensión por tres años y una sanción de 45.000 euros. Su equipo deberá pagar otros 30.000 euros y pierde el punto. Lo que le diferencia de Villarreal es que no se trataba de un partido decisivo.

viernes, 6 de noviembre de 2009

Bla, bla, bla

Hoy me he levantado con el cuerpo jotero, con ganas de vestirme el traje de líder, de líder político, por supuesto. Mientras desayunaba, he cogido papel y boli, y un mapa de este nuestro territorio, Gipuzkoa. Me he puesto a pensar para mis adentros y he planeado varios proyectos para contribuir al progreso y el bienestar guipuzcoano. Así que he apuntado que vamos (los políticos siempre hablamos en plural) a alumbrar (palabra bonita donde las haya) varios planes que detallo a continuación, distribuidos por comarcas. En Bidasoa-Txingudi vamos a construir una telecabina ecológica que teletransporte a los ciudadanos desde el Paseo de Colón a la playa de Hondarribia. En Errenteria vamos a quitar del paisaje la humeante Papelera y en su lugar vamos a crear el parque infantil más grande del mundo mundial. En Donostia no vamos a crear una ola artificial en La Zurriola sino tres, una por playa. En Bergara vamos a levantar un frontón de 5.000 plazas con las paredes de verde fosforito que lo van a flipar los pelotazales. En Eibar hemos pensado que construiremos un velódromo. No sabemos aún dónde lo encajonaremos, pero será de mil pares. En Debagoeina nuestra apuesta (otra palabra que nos encanta usar a los políticos) será un tranvía que unirá todos los pueblos y barrios, y hasta llegará a Arantzazu en un tren de cremallera. ¿Que no me creen? Anteayer Pepiño Blanco anunció la construcción de un tren de alta velocidad que unirá el Mediterráneo y el Cantábrico sin aportar ni una sola cifra (al margen del ahorro de tiempo), ni una sola previsión, y se quedó tan ancho. Humo, vendo humo.

viernes, 30 de octubre de 2009

Deshinchados

Como tantas y tantas veces, ha tenido que llegar la tecnología para desmontar y, sobre todo, deshinchar las desorbitantes cifras que durante años se han ofrecido de todo tipo de concentraciones, manifestaciones y cualquier acto que congregara a miles de personas. Como la historia es de sobra conocida, no me extenderé en detalles. La empresa Lynce, contratada por la agencia Efe, llevó a la práctica, en la multitudinaria manifestación contra la Ley del Aborto de hace diez días, un sofisticado sistema que cuenta el número de asistentes mediante fotografías aéreas de alta resolución. Conclusión: donde los organizadores vieron dos millones de personas, la tecnología captó 55.316. El sistema ha venido a demostrar algo que era vox populi, al menos en el mundo del periodismo: que la mayoría de los organizadores de cualquier concentración o marcha tienden siempre a incrementar las cifras de asistencia sin ton ni son. Durante años ha habido tantas manifestaciones del siglo como partidos del siglo en el fútbol. Se han inflado los números sin una razón justificada porque tan cargado de argumentos puedes estar si asistes a una manifestación de 2.000 personas que a una de 25.000. No por ser más, tienes más razones. Quienes han reiterado el error de hinchar las manifestaciones quizás nunca se han parado a pensar que reunir a 10.000, 20.000 o 30.000 personas para protestar por una causa es ya un hito en estos tiempos en los que la insolidaridad y el individualismo campan a sus anchas. Una pena que el recordado Javier Ortiz no viva para comprobar que la teoría que plasmaba en sus apuntes era real como la vida misma.

lunes, 26 de octubre de 2009

Bronca en palacio

Andan enfrascados al otro lado de la A-8 a cuenta de la construcción del nuevo campo de San Mamés. Es una bronca de palacio (Ajuria Enea) contra palacios (Ibaigane y el Foral de Bizkaia), con la BBK de por medio y el Ayuntamiento de Bilbao en plan hincha. De entre las variadas polémicas que suscita el proyecto, hay una que llama la atención de manera especial. Andan unos y otros discutiendo sobre qué es el uso público de un espacio. Ya saben, el Gobierno Vasco apuesta por destinar parte de los miles de metros cuadrados a uso público y la Diputación y el Ayuntamiento quieren a toda costa money, money para el Athletic. Hace unos años, a esto último se le llamaba pelotazo, expresión ya en desuso por lo que se ve. En fin, que si nos centramos en qué es uso público, es muy sencillo de explicar. Basta darse una vuelta por los aledaños de Anoeta para ver varios ejemplos. La modélica sede de las federaciones deportivas (Kirol Etxea), el dinámico centro cultural Ernest Lluch y la Federación Guipuzcoana de Fútbol (entidad privada que paga un alquiler mensual) tienen su casa bajo el estadio. También la Real, lógicamente, que acaba de estrenar su museo y cuenta también con las oficinas del club. El Gobierno Vasco viene a reclamar que el nuevo San Mamés disponga de alguna infraestructura similar, que para eso le piden 55 kilos. Y ya ha hablado con varias federaciones que podrían instalarse en el flamante campo. No parece mucho pedir, salvo por un pequeño problema: en 2007 la Diputación, la BBK y el Athletic firmaron ante notario que la gestión del estadio sería exclusivamente del club.

sábado, 24 de octubre de 2009

Viaje a un pasado de descubrimientos


En la inolvidable Forrest Gump, Tom Hanks (Forrest) suelta una tras otra una colección de frases que hilan una historia preciosa. De entre todas, hay una que se lleva la palma: "Mi mamá dice que la vida es como una caja de bombones, nunca sabes qué te va a tocar". Parafraseando al bueno de Forrest, un libro de fotografías antiguas es como una caja de bombones, nunca sabes con qué te vas a sorprender. Bera, instantes de una villa es un viaje a un pasado de descubrimientos, sobre todo para quienes conocemos a nuestros antepasados por lo que nos han transmitido de generación en generación. Abres el libro y descubres postales casi rasgadas de paisajes que te cuesta reconocer porque poco o nada se parecen a los actuales; imágenes de tipos serios embutidos en trajes oscuros y chavales que sonríen ante la novedad; fotos de bares y cines de los que hoy no queda ni rastro; de fiestas tan bulliciosas como las de ahora; de partidos de pelota y competiciones de segalaris que atraían a multitudes; de ritos que se perdieron y tradiciones que felizmente se han recuperado. Las fotos antiguas tienen también la virtud de que te paras a observar cada detalle, cada rostro, lo que te da pie a encontrarte con más descubrimientos. Para tu sorpresa, ves a esa madre que de joven fumaba (y tú no lo sabías), a ese bisabuelo que era calvo como el del atún (ahora comprendes porqué tú ya no peinas la pelambrera de hace años); a esos cuatro gigantes de fiestas que siguen siendo los mismos (el año que viene los cambiamos), a ese vecino que ahora luce barriga pero que en sus tiempos era el mejor jugador del Gure: a ese primo vestido de monaguillo que hace bueno aquello de ver para creer, a ese amigo que cuando iba de juerga era tan zakarro antes como ahora, o esos Carnavales que ya no son lo que eran. Bera, instantes de una villa ofrece estas estampas y muchas más del pueblo, de sus gentes, del Olentzero, de los Sanestebanes con las Makildantzas y el Aurresku de cada 3 de agosto, de la afición por la cultura, el deporte, la caza y la pesca, del Corpus y de tantas y tantas fotografías que configuran su pasado y su presente. Ese viaje a la nostalgia que representa esta obra está lógicamente inacabado. Es tan abundante el material fotográfico que han aportado de manera altruista los vecinos de Bera que se pueden hacer unos cuantos libros. Si, como ha sucedido en este caso, tienes a mano a dos entusiastas de Bera como Rosa y Totono Errandonea, que se preocupan con mimo de reunir, clasificar, identificar y datar cada foto, la labor resulta más sencilla. Así que, como decía aquel, continuará...


* Texto publicado en la sección de Vecinos DIARIO DE NOTICIAS a raíz de la presentación del libro Bera, instantes de una villa

lunes, 12 de octubre de 2009

Las tres "P"

Un colega periodista asegura que en la vida hay bares de tres tipos, que él denomina como las tres P: de putas, de policías y de periodistas. Añade el plumilla que en los últimos tiempos esta clasificación de tascas ha degenerado en otras tres P: de posmodernos, de publicistas y de peluqueros. Como lo más que frecuento es el bar de la esquina de la redacción, será cuestión de hacer una labor de campo y comprobar sobre el terreno si la teoría casa con la realidad. Por lo que se ve, prostitutas, policías y periodistas son tres palabras indisolubles. Tarde o temprano, unos y otros se cruzan en el camino y, a veces, no precisamente para tomar copas. El pasado jueves, por ejemplo. Un fotógrafo fue detenido por la Ertzaintza por tomar imágenes del descarrilamiento de una unidad de EuskoTren en Lezama desde una zona no acordonada. El bueno de Rafa Rivas, corresponsal de la agencia AFP en Euskadi, fue insultado y esposado por un agente que confundió la autoridad con los malos modos y modales. Dice un compañero de Rafa que las relaciones de la poli (sean ertzainas, nacionales, guardiaciviles, forales, miñones o municipales) y la prensa gráfica no pasan por el mejor momento. No es cuestión de hacer corporativismo barato ni tampoco de generalizar, pero no está de más recordar que cuando un periodista, un fotógrafo o un cámara de televisión acuden a cubrir una información, tratan, simplemente, de hacer su trabajo lo mejor posible. Intentan recabar los datos más precisos, la mejor foto y la mejor imagen. Ni más, ni menos.

martes, 29 de septiembre de 2009

San Sebastián Arena

2016. El Ayuntamiento de esta nuestra ciudad ha rebautizado la ¿plaza de toros? ¿pabellón? ¿cancha? ¿multiusos? de Illumbe con un nombre tan largo que, ya ven, no cabe ni en los titulares. San Sebastián Arena 2016/Donostia Arena 2016 se va a llamar a partir de ahora. Digo yo que a la hora de aprobar este bautismo no se piensa en la prensa escrita. Porque a ver cómo van a encajar en la sección de Deportes un titular tipo Lagun Aro Gipuzkoa Basket Club busca hoy una nueva victoria en el San Sebastián Arena 2016 ante el Kalise Gran Canaria 2014 (el equipo insular promociona la candidatura de España al Mundobasket de ese año). Oiga, que nos hacen falta las seis columnas del antiguo Deia para semejantes titulares. La denominación San Sebastián Arena tiene un segundo y futuro problema, que esperemos que se esquive. Dado que el primer corte de las candidaturas a la Capitalidad Cultural Europa se realizará a finales de 2010 (se hará una preselección de cuatro capitales que pasarán a la fase final), si Donostia cae (esperemos que no), se nos cae también la cifra que acompaña al nombre. Digo yo que le seguiremos llamando San Sebastián Arena, siguiendo una moda discutible de renombrar a todos los recintos deportivos con ese apellido playero. Y si no, pues buscamos otra excusa cultural y le llamamos San Sebastián Manifesta Arena, o les pedimos a los de Arteleku una denominación guay del Paraguay. Yo, de momento, le voy a decir al alcalde de mi pueblo que el campo de fútbol pase a llamarse Matzada Arena. Para que se vayan acojonando los rivales.

viernes, 25 de septiembre de 2009

TeleTDT

Contaba ayer Ramón Sánchez en este mismo espacio que la programación de madrugada de la TDT está plagada de larguísimos anuncios de teletienda. Como Ramón, servidor también es consumidor de tele a horas intempestivas. Cuando la mayoría del personal duerme, hay otros que metemos horas en la caja tonta, mayormente para ver a Buenafuente y compañía, de lo poco saludable que se emite a esas horas, o para volver a ver la repetición 1.236 de Callejeros o Verano Mix. Ramón se limitó a comentar la sucesión de anuncios de la TDT y el que suscribe, sin saber por qué, hace unos días hizo una de esas encuestas que no sirven para nada, pero que dan una idea de qué ofrece esta televisión del presente futuro. Hace unos días, a eso de la una de la madrugada, doce de los 26 canales de la TDT estaban dedicados a promocionar todo tipo de chismes, desde la almohada aeropedic pillow hasta ese pedazo de vibrador azul que te lo meten (con perdón) en anuncios que se repiten una y otra vez. No faltaban tampoco los concursos telefónicos ni las consultas con los más variopintos videntes, entre ellos una tipa con una cara de más mala hostia que la de Carlos Marcos en la contraportada de la revista On. Y no se trata de canales de la TDT que se dedican casi en exclusiva a vendernos de todo (Cincoshop, Canal Club, Tienda en Veo), sino que la mayoría eran cadenas que de día son serias y de noche se transforman. Dice nuestro gurú televisivo que este fenómeno sólo se da en España y no le falta razón. De los 17 canales franceses de TDT que podía ver en ese momento, ninguno vendía cachivaches.

lunes, 31 de agosto de 2009

Mire el calendario

Si usted vuelve hoy al currete después de dos semanas, un mes o qué sé yo 200 días de vacaciones, relájese y tire de calendario. Si lo usa, pase del correo electrónico (tendrá 5.000 mensajes más la basurilla de los spam), no mire los tropecientos papeles que dejó pendientes al irse maleta en mano o mochila en la espalda, y vuelva a relajarse. Piense en la vidorra que se ha pegado en las últimas semanas, cervecita y tapita por aquí, farrilla por allí, siesta, comilonas con los amiguetes, libros a tutiplén y chapuzones por doquier. Piense en que se lo ha pasado de cine sin pegar un palo al agua y vuelva a relajarse. Pase del inminente inicio del curso escolar y las 200 compras que tiene que hacer; pase de la gripe A, B y C; de la dichosa crisis; de la hipoteca, del precio de la gasolina; pase de Zapatero el bertsolari nacido para improvisar, pase de la TDT hay que hacer un cursillo para entender cómo se puede ver el fútbol esta temporada, y pase de todo. Vuelva a relajarse. Hay un método infalible para superar el síndrome posvacacional, esta patología no reconocida como enfermedad de la que nada sabían nuestros padres hace un par de décadas. Coja un calendario, póngase a mirar en qué fechas caen los próximos puentes festivos, vacaciones y demás... y deje volar su imaginación. Piense un lugar al que nunca ha viajado y desea conocer (no tiene por qué estar a miles de kilómetros, aquí al lado hay sitios fantásticos). Piense, viaje con la imaginación y relájese. Las próximas vacaciones están al caer. Mientras tanto, póngase a currar.

lunes, 17 de agosto de 2009

Tomamos nota

Supongo que en estos tiempos políticamente correctos, Mike Hammer no duraría en una cadena de televisión ni un Telediario. Programar en horario infantil a un detective que resolvía crímenes y robos a golpe de pistola del calibre 45 cariñosamente, el tipo llamaba a su pipa Betsy y que era más promiscuo que don Silvio con sus velinas, sería calificado hoy como un atentado contra la moral y esas cosas. Salvo que me falle la memoria, en los 80 esta serie se emitía a horas que hoy serían catalogadas con dos rombos. En nuestro descargo habría que decir que entonces estábamos en pleno apogeo de la pubertad y el bueno de Mike nos daba una envidia terrible, siempre paseándose con unas pechugonas made in Playboy que ni Yola Berrocal. A ellas se les salían las carnes por todos los costados y nosotros, que no nos comíamos una rosca, no perdíamos ojo aunque al final no viéramos más que piernas que se colaban entre las sábanas. Entre crimen y crimen, Mike, el prototipo de macho Camacho, se paseaba en su flamante Ford Mustang por las calles de Nueva York, con su inconfundible bigotillo y sombrero, a la caza del criminal de turno. Nos acordamos también de Velda, otra mujer de pechos prominentes, y del policía Pat Chambers, siempre tratando de frenar los desmanes de Hammer. Pero, sobre todo, recordamos aquella frase que Mike repetía cada vez que se cruzaba con una belleza. "Tomaré nota", decía.

* Texto publicado en la contraportada de NOTICIAS DE GIPUZKOA en una serie sobre programas de televisión 

domingo, 26 de julio de 2009

Zorionak, tocayo

Sorpresas te da la vida. Se prepara uno para escribir sobre las fabulosas imágenes que ofrece cada día el Tour desde el helicóptero, sobre la maravillosa etapa del pasado miércoles, en la que nos mostraron glaciares, cascadas, aguas bravas, la impresionante Aiguille du Midi, al pie de Chamonix, el valle de Aosta, el corazón de los Alpes... puro gozo para la vista. Digo que se preparaba uno para hablar de todo esto y de las detalladas descripciones sobre el paisaje Tour que realiza en France 2 el veterano periodista Jean-Paul Ollivier (35 años siguiendo la carrera), cuando llega otro ciclista guipuzcoano y nos alegra una vez más la tarde. Y no se impone en una meta cualquiera. Gana en ese paisaje lunar que es el Mont Ventoux, purita historia del Tour, en plena Provenza francesa, en una cima desde la que dicen que se otea el lejano Mediterráneo. Y vence contra pronóstico, con toda la manada de lobos acechando por detrás, y sin que apenas tengamos referencias visuales una pena que su compañero de escapada no fuera francés porque el realizador de la televisión gala apenas prestó atención a la pareja de fugados, lo que acentúa nuestro nerviosismo y alimenta las dudas. Pero, como en el caso de Mikel Astarloza, tira de inteligencia y garra, y nos vuelve a emocionar. Gana un tipo que vive aquí al ladito. Un ciclista al que ves un día sí y otro también, con sol o con lluvia, sea verano o invierno. Tú en tu coche y él en su bici. Un deportista que ayer escribió una página para la historia: el primer vasco que gana etapas en el Tour, la Vuelta y el Giro. Zorionak, tocayo.

miércoles, 22 de julio de 2009

Bourg-Saint-Maurice

Cannes, Cauterets, Verviers, Pau, Disneyland, Hautacam, Millau, Alpe d'Huez, Biarritz, Bergerac; San Pellegrino, Pistoia, Selva Gardena, Stelvio, Padula, Forte Marmi, Sestriere, Génova, Milán, Scanno... Y podríamos seguir añadiendo nombres hasta llenar unas cuantas páginas. Todos los nombres citados fueron finales de etapa del Tour y el Giro. Y en todos ellos el ganador fue un ciclista vasco. Un total de 58 victorias (35 en Francia y 23 en Italia) suma el ciclismo euskaldun, y otro buen porrón en la Vuelta, en lo que viene a ser el Grand Slam del pedal. Desde ayer hay que añadir la muesca de Bourg-Saint-Maurice y a su lado colocar el nombre de Mikel Astarloza. Hace unas semanas, en vísperas del Tour, el pasaitarra aseguraba a este periódico que en la ronda francesa se le hacía insoportable el tramo de la meta al autobús, el trajín de la llegada a la ducha. Ayer fue el trayecto más feliz de su vida, una exultante biribilketa del podio al hotel, de entrevista en entrevista. Pocas veces un deportista merece tanto su día de gloria. Éste es su séptimo Tour, había conseguido muy buenos puestos en años anteriores (noveno en 2007), pero en una grande sólo cuenta la victoria, nadie se acuerda del segundo. Le faltaba rematar, y ayer metió un gol por toda la escuadra, a pase de Txurruka, Antón y los otros cinco compañeros del Euskaltel. Astarloza llevaba toda la vida soñando con un hito como el de ayer. Se emocionó y nos emocionó a todos. Ya tiene su pueblo fetiche. Bourg-Saint-Maurice, se llama. Zorionak.

lunes, 20 de julio de 2009

Los toros tienen cuernos

Mientras los toros tengan cuernos (afilados cuernos) y el encierro se corra entre calles estrechas y repletas de mozos, habrá muertos. Mientras en Pamplona existan murallas y la peña se tumbe en sus repisas para dormir la mona o para echar un quiqui (¿se escribe así?, ¿o kiki?, ¿o quiki?, ¿o kiqui?), habrá muertos. Podríamos seguir con esta relación causa-efecto hasta llenar toda esta mesa, pero no merece la pena. Viene a cuento la reflexión después de leer y escuchar en los últimos días una sarta de sandeces sobre el encierro que ni Paco Porras en sus mejores tiempos. Desde prohibirlos hasta pedir un carné especial para correr tras la previa asistencia a cursillos, las propuestas han sido de un ingenio que pasma. Correr el encierro es una actividad de riesgo y, como tal, te puede llevar a la muerte. Así de sencillo y así de trágico. Lo milagroso (y toquemos madera) es que no se registren más cornadas mortales, dada la masificación que se registra entre los corrales de Santo Domingo y la Monumental. En un reto cara-espalda entre un animal de 600 kilos y un ser humano, te expones a algo más que un buen tropezón en la Estafeta. Puestos a hacer comparaciones odiosas, si en el próximo Gran Premio de Fórmula 1 un piloto se estampa contra un muro y fallece, ¿prohibiremos las carreras? La respuesta es obvia. Además, no demos ideas, que luego se entera la Comisión Europea, nuestra particular Santa Inquisición, y te prohíbe de un plumazo los encierros, el Chupinazo y hasta la salida de las peñas.

lunes, 13 de julio de 2009

Cómo mola ser Tribulete

Supongo que durante las nueve temporadas que duró esta serie, las facultades de Periodismo se hincharon a matricular nuevos alumnos. Si uno veía cualquiera de los capítulos, llegaba a la conclusión de que ser un Tribulete mola mogollón. Ligas un huevo (el cruce de romances entre los protas te llegaba a marear), vives experiencias con la mafia que ni Indiana Jones, tienes exclusivas cada dos por tres, llegas a casa a las siete de la tarde después de echarte unas cañitas con los compañeros de curro, y hasta te lías con la secretaria y lo hacéis en la mismísima redacción (semileyenda urbana). Todo esto y mucho más reflejaba una serie de factura notable, tan cerca o lejos de la realidad del periodismo como lo puede estar Hospital central del quehacer diario de médicos, enfermeras, celadores y demás personal sanitario. En el caso de un servidor, al día siguiente de cada capítulo, unos cuantos familiares y amigos enganchados al Crónica Universal te bombardeaban a preguntas sobre la profesión, que respondías mal que bien. La ficción resultaba un tanto idílica (todos los temas que trataban en los reportajes eran cojonudos), salvo en el caso del becario, que las pasaba canutas para conseguir un contrato (verdad como la vida misma en este bendito trabajo). Y frente al mundo de yuppi en el que vivía la sección de Local estaba el entrañable Blas Castellote (Álex Angulo), el Pepito Grillo, el protagonista que mejor representaba al periodista de toda la vida.

lunes, 6 de julio de 2009

Javier Solano

Dicen que los periodistas de prensa escrita tenemos ganada una mala fama de poco madrugadores. Que holgazaneamos cuando medio país ya está en marcha (será también que llegamos a casa bien entrada la noche, digo yo). Hay ocho días al año en los que, al menos un servidor, se levanta a eso de las ocho de la mañana, puntual a la cita con el televisor. Ocho días de madrugón para presenciar los 846,9 metros más plásticos y emocionantes del mundo. Los encierros forman parte de un ritual ligado inseparablemente con Javier Solano. Dice un compañero que este hombre nació para narrar encierros. Durante esas ocho mañanas es casi como de la familia. Hemos adaptado a nuestro vocabulario sus palabras y expresiones ("pata", "mozo", "lomo", "experimentado corredor", "astado", "inconsciente", "eso es lo que nunca se debe hacer") y hasta hacemos tertulia de cada carrera. Por repetida que sea la liturgia, el bueno de Solano siempre encuentra la palabra precisa. 
Este año, por cierto, el encierro será bilingüe. Por primera vez el cántico al santo moreno se hará en castellano y euskera: 

A San Fermín pedimos, por ser nuestro patrón, nos guíe en el encierro dándonos su bendición. 

Entzun arren San Fermin, zu zaitugu patroi, zuzendu gure oinak entzierro hontan otoi. ¡Viva San Fermín! Gora San Fermin!

lunes, 22 de junio de 2009

La Familia Irreal

Leo en El Mundo que la Familia Real (Irreal, habría que decir, porque poco o nada se parece a la común de las familias) se va a apretar este verano el cinturón que les pagamos todos a escote. Como la Leti se apriete más el cinto, se nos esfuma, aunque ése es otro cantar. El apretón real consistirá en navegar menos por el Mediterráneo, navegar más por Internet (van a dejar de imprimir el resumen de prensa), aprovechar la luz del sol para no gastar tanta electricidad y reciclar el agua de lluvia para regar los jardines de palacio, aunque para eso es necesario que llueva en agosto en Mallorca, que no es precisamente Asturias. Acostumbrados a vivir a cuerpo de reyes, leyendo a los pelotas oficiales de la prensa rosa parece que van a vivir a cuerpo de mortales. Y tampoco es eso. Y es que cuando los ricos deciden parecerse al populacho y dar ejemplo ponen al descubierto ciertos gastos (hábitos) que rozan el escándalo. Así, te enteras de que llenar el depósito del Fortuna cuesta 26.000 euros, que viene a ser la suma de dinero que tardaría en ganar un mileurista en dos años de curro. O que Patrimonio Nacional invierte 1,3 millones al año en mantener la residencia de verano de los Borbones (el Presupuesto anual de la Casa Real ronda los 25 millones, gastos aparte). Digo yo que si tan apretaillos andan de dinero, igual se pueden ir de vacaciones a la nueva casa de la tita Cristina y el Urdanga en Washington. Por falta de sitio no será. La casa, a 8.000 euros mensuales el alquiler, tiene más de siete habitaciones. Hombre, estarán muy arrejuntados y no les llenará de orgullo y satisfacción, pero unas buenas literas lo solucionan todo.

lunes, 15 de junio de 2009

Frente Judaico Vasco

El laberinto político vasco se parece cada vez más a la impagable escena de La vida de Brian en la que el protagonista y sus secuaces no saben si pertenecen al Frente Judaico Popular, el Frente Popular de Judea, el Frente del Pueblo Judaico o la Unión Popular de Judea. Al paso que marchan los partidos, en las próximas elecciones en 2011 tocan las forales y municipales vamos a tener que recurrir a los dedos de los pies para contar tanta candidatura. Ya no vale con los diez de ambas manos. A saber. Si no surge alguna formación más, que no es descartable dado que aquí nacen partidos como setas, tendremos al PNV, PSE-EE, PP, EA, Alkarbide (escindido de EA), EB, Alternatiba (escindido de EB), Aralar (escindido de Herri Batasuna y sus mil y una denominaciones), Unión Progreso y Democracia (UPyD) e Iniciativa Internacionalista-Solidaridad entre los Pueblos, si es que antes no es ilegalizada. Y no lo digo por dar ideas, sino porque es la acción-reacción que se viene sucediendo en los últimos años. A esta relación añadan una candidatura de la izquierda abertzale y, yo qué sé, una lista liderada por María San Gil, Mayor Oreja y compañía, situada a la derecha del PP y a la izquierda de UPyD. Si es que se hace difícil hasta retener tanta sigla. Que vuelvan los Monty Python y pongan orden en este desenfreno. Si no, al paso que vamos acabaremos tan confundidos como hace 30 años los protagonistas de una de las mejores comedias de la historia.


lunes, 1 de junio de 2009

Lillo, quédate

Escribo antes de que se inicie el Real-Córdoba, con el equipo engordando para morir, después de sumar doce de los quince últimos puntos en juego y a las puertas de despedirse de las mínimas opciones de ascender a Primera. La Real cerrará en tres semanas su segunda temporada en Segunda, un tormento del que le va a costar salir. Resultaría prolijo describir la catarata de problemas de todo tipo que ha sufrido desde que dejó de pertenecer a la elite del fútbol. En estos tiempos de sombras y dudas, lo más coherente que ha pasado por el club ha sido Juanma Lillo. Hace un año colocó al equipo a un paso del éxito y esta temporada, con una plantilla más devaluada y en peores circunstancias, se quedará sin opciones por el mediocre rendimiento en Anoeta y los méritos propios del Xerez, Tenerife y Zaragoza y los ajenos (algún día habrá que hablar del escándalo de las primas por perder de Segunda). Salvo cambio insospechado, la directiva de la Real no renovará a Lillo. Nada extraño. En los diez últimos años, la Real ha contratado a trece técnicos y sólo uno (Raynald Denoueix) ha completado dos temporadas enteras (curiosamente, en una de ellas la Real rozó el título). Quiero pensar que la no continuidad de Lillo no está vinculada a que vino de la mano del anterior presidente. Pero si este club despacha a un tipo que trabaja 25 horas al día, que ha hecho de la plantilla una piña, que conoce la categoría al dedillo, que no ha recibido un solo reproche de la grada y que es capaz de fichar a jugadores con un caché hoy inalcanzable para la Real, apaga y vámonos. Lillo, quédate.

lunes, 25 de mayo de 2009

No más elecciones, please

Traigo buenas y frescas nuevas: el año que viene no hay elecciones. Aleluya. Después de comernos casi dos tandas de urnas seguidas y toda la campaña de los USA como si fuera la de nuestra comunidad de vecinos, se abre un páramo (paréntesis, habría que decir) de más de año y medio. Cuando el 7 de junio finiquitemos los comicios europeos, ya todo volverá a su ser. Bueno, todo todo no, porque a la vuelta de la esquina se celebrarán las elecciones al Madrí, que tienen rango mundial y parece ser que ganará ese ser sobrenatural. He rescatado un artículo escrito hace unas semanas por José Ignacio Armentia (saludos a los cíceros) en El País para cerciorarme de que no me he vuelto majareta. Explica el profe universitario que el asunto va por ciclos y que sólo uno de cada cuatro años no hay elecciones (ya es suplicio). La ronda es siempre la misma: municipales, generales, autonómicas y europeas (estas dos últimas el mismo año), descanso y vuelta a empezar. Ahora tocan las europeas, que se palpa en la calle que despiertan un extraordinario interés (según el CIS, sólo uno de cada cuatro encuestados sabe la fecha en la que se celebran). Bruselas está a un par de horas de avión de Loiu, pero sus representantes políticos como que nos quedan lejos. Durante la campaña electoral mayormente aburren con ese retórica de palabras entre las que no pueden faltar bienestar, progreso, justicia, desarrollo, diálogo y ciudadanía. Escuchen un minuto de un mitin (no más) y seguro que de la boca del candidato de turno sale una de ellas.

viernes, 15 de mayo de 2009

La cara de gilipollas

Lo peor de perder una final es la cara de gilipollas (con perdón) que se te queda. Odiosas son las comparaciones, pero a los seguidores del Athletic se les quedó el cuerpo como a los aficionados de la Real que el 30 de marzo de 1988 vieron caer a uno de los mejores onces de su historia ante el Barça de Luis Aragonés, en vísperas del motín del Hesperia, en la final de Copa del Bernabéu. O la misma cara de tontos (con perdón, otra vez) que se les quedaba a los hinchas del Tau cuando disputaban una y dos finales europeas y no había manera de ganarlas; o la cara de gilipollas (también de sentirse robados) que se les quedó al puñado de irundarras que vieron esfumarse la Recopa de Europa ante el Milbertshoffen en Alemania después de que se la arrebataran dos inefables árbitros. La final de Mestalla también tuvo otro paralelismo con aquella del Bernabéu. En Chamartín la mayoría de aficionados de la Real y el Barça también silbaron el himno ante "el primero de los españoles". No se montó el pollo de estos días, seguramente porque no había los altavoces de comunicación que existen hoy. Simplemente, la pitada se silenció en los medios, que es un método de censura mucho más sutil. Y se silenció también (en medios matritenses, quiero decir) la brutal carga que realizó la Policía Nacional al término del partido en el fondo que ocupaba la hinchada txuri-urdin, mientras los culés daban la vuelta de honor. A los seguidores de la Real se nos quedó la cara de gilipollas, la misma que tendrá el currela de TVE al que se acusa del supuesto error de cortar la emisión cuando sonaba el himno. Salta a la vista que era un hecho previsible (el abucheo, digo) porque si no, no se explica que el técnico de sonido contratado por la Federación pusiera el tiroriro a un volumen seis veces más alto que el sonido ambiente, o que cuatro altavoces se orientaran al palco. Y luego dicen que los símbolos no importan.

* Texto publicado en la sección de Deportes de NOTICIAS DE GIPUZKOA tras ganar el Barça la Copa al Athletic en Valencia


lunes, 11 de mayo de 2009

Un once para la nostalgia

Desde hace unos días la web de la Real (www.realsociedad.com) ofrece la posibilidad de confeccionar el mejor once de la historia del club. Como cada aficionado al fútbol llevamos un entrenador dentro, resulta difícil no caer en la tentación de elegir al equipo ideal. Confesaré que no vi jugar a aquellos jugadores que militaban en la Real antes de los 70, por lo que mi alineación peca de ochentera y es un ejercicio de nostalgia. Emulando al speaker que cada quince días grita la alineación en Anoeta, y del uno al once, como en los viejos tiempos, vamos a por ellos. ¡Bata, Arconada! No hay discusión posible sobre el mejor portero, pese a que algunos sólo le recuerden por un error. ¡Bia, Zelaieta! No era el más rápido, ni el que mejor balones metía al área, pero era nuestro ídolo y con eso ya basta. ¡Hirua, Luis López Rekarte! Sin ser un dechado de técnica, con él empezamos a reconocer a los carrileros. ¡Laua, Xabi Alonso! Lo mejor que se ha visto en Anoeta desde su inauguración. ¡Bosta, Larrañaga! Un cierre seguro y un líder sobre el campo. ¡Seia, Kortabarria! La contundencia en la zaga. ¡Zazpia, Idigoras! La cabra más cuerda que ha pisado Atocha. ¡Zortzia, De Pedro! Con detractores o sin ellos, desde que se fue la banda izquierda está huérfana. ¡Bederatzia, Satrus! Goles y un remate de cabeza perfecto. ¡Hamarra, Zamora! Técnica y pundonor en un pedazo de jugador. ¡Hamaika, López Ufarte! Poco que decir. Servidor cree que aún está para jugar, aunque sea para tirar faltas. Y en el banquillo, aplicaremos la táctica de Toshack (5-3-2), pero se sentará Denoueix, el último técnico que nos hizo soñar con un título.

viernes, 8 de mayo de 2009

50 céntimos de euro


La anécdota quizás no es ilustrativa de nada, pero nuestro personaje me pide que la cuente por si acaso han cambiado los tiempos y él todavía no se ha enterado. Sucedió hace unos días en la avenida de Sancho El Sabio de Donostia. Nuestro personaje caminaba distraído en dirección al estadio de Anoeta, donde a esa hora se jugaba el Real-Celta. Dejó a un lado el parque de Araba y enfiló hacia la avenida de Madrid. Paró en un paso de cebra. Cuando cruzaba el mismo, escuchó cómo caía al suelo una moneda. Miró a su alrededor y vio que un joven que cruzaba la calle en sentido contrario miraba al suelo buscando algo. Nuestro personaje hizo lo mismo y vio en el suelo una monedilla de 50 céntimos de euro. Llamó al chaval como supuesto dueño de la moneda, y se cruzaron el siguiente diálogo: "Eh, chaval, que se te ha caído esto", le dijo nuestro personaje mostrándole la dichosa moneda. "Quédesela usted, señor", le respondió el muchacho con un gesto de viejo, a mí me salen los billetes de 500 por las orejas. Así que nuestro personaje jodido porque a él, que no llega a los 40, le habían tratado de "señor y de usted" se guardó la moneda en el bolsillo y empezó a filosofar para sus adentros sobre el valor que las nuevas generaciones dan al dinero. Ensimismado en sus pensamientos, acudió a un bar cercano a Anoeta para presenciar por la tele los últimos minutos del partido, y comprobó con estupor que la tasca no ofrecía la Real sino el Madrid-Barça que acababa de empezar. Definitivamente, los tiempos han cambiado.


domingo, 3 de mayo de 2009

Estudios y oficios

No pocas veces, las agencias de noticias escupen informaciones acerca de sesudos estudios, mayormente elaborados por universidades, sobre asuntos sumamente trascendentes. Los estudios suelen llegar a conclusiones rotundas, del tipo, "las mujeres estresadas son más propensas a tener hijas", "masturbarse a menudo aumenta el riesgo de padecer cáncer de próstata", "las mujeres serán más rápidas que los hombres en los 100 metros lisos en el año 2156" y "los adolescentes con nombres raros son más proclives a delinquir". No me he inventado las conclusiones. Están extraidas de variopintos estudios. Puestos a plantear encuestas, no estaría mal preguntar, a los guipuzcoanos, por ejemplo, si trabajan en lo que han estudiado. Si el tiempo que invirtieron en formarse en clase les ha servido para desarrollar luego la profesión que soñaban. Porque hay mucho desencantado. Porque abundan los casos en los que el deseo y la realidad no casan. Hago cuentas con un colega y recordamos a biólogos metidos a camareros, periodistas que ejercen de barrenderos, diplomados en Turismo especializados en tornos y fresadoras, químicos en cadenas de montaje de fábricas, filólogos que hacen de visitadores médicos, titulados en mecánica en mostradores de tiendas e ingenieros industriales como reponedores en hipermercados. Trabajar en el oficio para el que estudiaste parece hasta una suerte, aunque a veces te preguntes por qué te metiste en este fregado. Y más hoy, con una fila de cuatro millones de parados.

miércoles, 29 de abril de 2009

Salud

Hay lectores de periódicos que compran determinado diario para leer a determinado columnista. Cierto es que lo único interesante de un periódico no suele ser sólo el articulista en cuestión, sobre todo desde que los diarios se venden a peso, con una, a veces, sobreabundancia de informaciones, entrevistas y reportajes imposibles de leer con tantas prisas y tan poco tiempo libre. Los articulistas brillantes logran que abras el periódico por su página, con perdón de ese aluvión de lectores que comienzan a pasar páginas desde la contraportada. Para gustos están los colores, pero en una relación de columnistas que se precie no pueden faltar Quim Monzó, Maruja Torres, John Carlin, Carlos Toro, Enric González o Juan Carlos Escudier, por citar varios habituales de la prensa. Javier Ortiz era de aquellos que te obligan a abrir un periódico por su página. Un tipo contracorriente, capaz de llevarse la contraria a sí mismo. Daba en el clavo y ponía negro sobre blanco lo que tú pensabas y no sabías cómo expresar. Irónico, fino, puntilloso, sus columnas eran sencillas, muy bien estructuradas, con un lenguaje ágil y una capacidad como pocos para hilar frases con sentido. Era de los que opinaba con argumentos, no de oídas, como acostumbran algunos tertulianos y políticos que pontifican sin ni siquiera leer una línea del asunto al que se refieren. Con el humor negro del que hacía gala Ortiz en conversaciones y escritos, diremos aquello de "salud, camarada". Ha sido un placer.

jueves, 16 de abril de 2009

Hoy me gustaría bucear en el túnel del tiempo, quitarme unos cuantos años y convertirme como por arte de magia en un niño de Ataun. Sí, de Ataun, y no de otro sitio. Hoy parte la Vuelta al País Vasco de Ataun. Hace un tiempo, los chavales de nuestro pueblo disfrutábamos todos los años de la salida de la Vuelta. Era el acontecimiento del año. Entonces no existían el pomposo village départ, ni los autobuses con las lunas tintadas en los que los profesionales se recluyen o les recluyen hoy del mundanal ruido. Te plantabas junto a los coches de los equipos, dabas la pelmada para que te soltaran una gorra o un botellín guardé como oro en paño un bidón que Pello Ruiz Cabestany lanzó a una cuneta en su etapa de aficionados y pedías autógrafos a todo el que se meneara con un culotte y un maillot. Primero pedías la firma y luego mirabas el dorsal porque, la verdad, más de la mitad del pelotón pasa desapercibido para el común de los seguidores. Si les digo que hoy estarán en Ataun Yukiya Arashivo, Rein Taaramae y Mickäel Buffaz, pueden pensar que voy de vacilón. Pues sí, estarán. Seguro que algún chaval les pedirá un autógrafo, apuntará su dorsal y se quedará alucinado por la poca cosa que son (casi todos los ciclistas siguen el mismo patrón: finísimos, sin un gramo de grasa y ninguno tiene barba, je, je). Luego, al cabo de unas horas, los chavales tendrán la ocasión de verles en la llegada (la etapa acaba también en Ataun), pero ya no será lo mismo porque pasan como locomotoras. No hay nada como la salida, a pesar de que se te quede un poso de tristeza cuando la caravana abandona tu pueblo.

martes, 14 de abril de 2009

Acojona lo del oso

Acojona lo del oso. Si durante estos días han estado por ahí afuera, sin ver Teleberris, ni Telediarios ni Youtube, ni nada de nada, chupando lluvia y reactivando la economía a base de caña y pintxo, igual no lo han visto. Y, la verdad, impacta. El vídeo, de apenas un minuto de duración, muestra a una mujer que se tira al foso en el que se encuentran tres osos polares del zoológico de Berlín. No se sabe muy bien si la susodicha confunde el foso con una piscina. Lo cierto es que los testigos relatan que, antes de zambullirse en el agua, la chica se descalza, atraviesa una valla de seguridad y, en un inequívoco gesto del ser humano, se tapa la nariz, como muchos seres humanos hacen cuando se tiran en una pileta al estilo bomba. Las imágenes muestran cómo intentan rescatar a la mujer con un salvavidas mientras las criaturitas blancas asisten atónitas a la escena. Como en las películas de suspense, el salvavidas se rompe y la chica sufre una dentellada en el trasero de uno de los animales. Cuando ya piensas que se la van a zampar, a duras penas logra escalar el muro de dos metros y ponerse a salvo. Cuentan las crónicas que la tarde de autos en Berlín se estaban achicharrando a 25 grados y que pudo ser un calentón de la buena mujer. El caso es que no es la primera vez que sucede un hecho similar en el mismo zoológico: hace nueve años un tipo hizo lo mismo porque "quería jugar con los ositos". Si se lo han perdido, lo pueden ver en esta dirección de Internet en versión original (es decir, con comentarios y testimonios de testigos en alemán): http://www.youtube.com/watch?v=z0m9JQUFvtg


lunes, 6 de abril de 2009

Túnel del tiempo

Hoy me gustaría bucear en el túnel del tiempo, quitarme unos cuantos años y convertirme como por arte de magia en un niño de Ataun. Sí, de Ataun, y no de otro sitio. Hoy parte la Vuelta al País Vasco de Ataun. Hace un tiempo, los chavales de nuestro pueblo disfrutábamos todos los años de la salida de la Vuelta. Era el acontecimiento del año. Entonces no existían el pomposo village départ, ni los autobuses con las lunas tintadas en los que los profesionales se recluyen o les recluyen hoy del mundanal ruido. Te plantabas junto a los coches de los equipos, dabas la pelmada para que te soltaran una gorra o un botellín guardé como oro en paño un bidón que Pello Ruiz Cabestany lanzó a una cuneta en su etapa de aficionados y pedías autógrafos a todo el que se meneara con un culotte y un maillot. Primero pedías la firma y luego mirabas el dorsal porque, la verdad, más de la mitad del pelotón pasa desapercibido para el común de los seguidores. Si les digo que hoy estarán en Ataun Yukiya Arashivo, Rein Taaramae y Mickäel Buffaz, pueden pensar que voy de vacilón. Pues sí, estarán. Seguro que algún chaval les pedirá un autógrafo, apuntará su dorsal y se quedará alucinado por la poca cosa que son (casi todos los ciclistas siguen el mismo patrón: finísimos, sin un gramo de grasa y ninguno tiene barba, je, je). Luego, al cabo de unas horas, los chavales tendrán la ocasión de verles en la llegada (la etapa acaba también en Ataun), pero ya no será lo mismo porque pasan como locomotoras. No hay nada como la salida, a pesar de que se te quede un poso de tristeza cuando la caravana abandona tu pueblo.

lunes, 23 de marzo de 2009

Atléticos guipuzcoanos

Dicen que si viajas a Pekín tienes un 99% de probabilidades de encontrarte con alguien de Aranaz, de Larraga... o de Gipuzkoa. Ancho es el mundo y caprichosas son las casualidades. No sé si hay tantas posibilidades de toparte con un paisano en la plaza de Tiananmen. Pero sí sé que siempre te encontrarás a un guipuzcoano en toda prueba deportiva (competitiva o no) que se precie. Todos tenemos un tío cura y todos tenemos a algún familiar, amigo, conocido o vecino que ha hecho un trekking por el Himalaya. Todos conocemos a alguien que ha corrido la Behobia y no pocos son los que participan en la Quebrantahuesos, la clásica cicloturista de Sabiñánigo. Pero tiren del hilo y encontrarán guipuzcoanos en la Extreme Bardenas de Arguedas, en la Camille Extreme de Isaba, en el el Ultramaratón del Montblanc, en la Vuelta Cicloturista a Ibiza, en la Gothia Cup de Gotemburgo, en el maratón de Amsterdam, en la París-Roubaix de aficionados o en la Transgrancanaria. Más que una cultura de culto al cuerpo (tan de moda), hay una formidable cultura de culto al deporte. No hacen falta campañas institucionales que llamen a mover el esqueleto porque se mueve sólo. Y no hace falta irse a la otra punta de planeta para disfrutar del deporte. Aquí mismo hay marchas y pruebas que agotan los dorsales. Si ayer pasearon a primera hora por La Concha, vieron pasar a 1.000 entusiastas del atletismo. Se corría la Carrera de Primavera, una de las pruebas que mejor refleja el espíritu popular del deporte. Los dorsales se acabaron hace tiempo. Y, sí, no lo pregunte, la mayoría eran guipuzcoanos.

lunes, 16 de marzo de 2009

Prótesis

Un tipo llamado Jerry Jalava (tiene nombre de humorista finlandés) ha tenido la ocurrencia de implantarse una memoria USB en su dedo anular izquierdo. El chaval (finlandés) perdió parte de su dedo en un accidente (su moto chocó contra un ciervo) y, una vez en el hospital, cuando pidió que le fabricaran una prótesis, uno de los médicos le propuso introducir un lápiz de memoria. Donde va Jerry, va la memoria USB, de dos gigas de capacidad, por cierto, con sus archivos informáticos, sus canciones y sus pelis almacenadas. Si se aburre, pues se quita el dedo (osease la memoria), lo coloca en el ordenata y se enchufa un documental. De aquí a nada el bueno de Jerry podrá ver uno de los documentales de Rob Spence, un director canadiense que ha tenido otra idea que ni la TIA, el cuartel general de Mortadelo y Filemón. Spence perdió un ojo a los 13 años (ahora tiene 36) por el disparo fortuito de un arma. Ahora, ayudado por un grupo de ingenieros y oculistas, se le ha ocurrido instalar una minicámara en el ojo que no ve para grabar todo lo que ve. Dice el buen hombre que utilizará las imágenes para realizar un documental para denunciar "la fragilidad de nuestro derecho a la privacidad". Vistos ambos ejemplos, llamo a un amigo que perdió tres dedos en una serrería por si acaso quiere dar uso a sus muñones. Pero va a ser que no. Puestos a pedir prótesis, el chaval dice que quiere un aparato como el de Nacho Vidal (ése que dicen que no cabía en un vaso de tubo; el aparato, no Nacho). Y que ya se encargará de filmar un documental y guardarlo en una memoria USB.

viernes, 27 de febrero de 2009

Di que no

Parece que fue ayer, pero ya han pasado 20 años. Un buen puñado de la chavalería que hoy sobrepasa los 30 y los 40 años dio a finales de los 80 un ejemplo más que digno de cómo echar abajo uno de esos viejos reductos que daba la impresión que nunca iba a caer. Hoy se corea el Otro mundo es posible como entonces se gritaba el Intsumisioa o el MiliKK. Había que tener muchos bemoles para ir en contra del sacrosanto Ejército. Bueno, muchos bemoles, muchas ganas de lucha pacífica, mucho ingenio y mucho apoyo social de una sociedad que, en una amplia mayoría (al menos por estos lares), respaldó como pocas veces la causa de insumisos y objetores. Hoy resulta anacrónico recordar que el sistema te obligaba a perder un año de tu vida en un cuartel (y dos años o más en tiempos de Paquito). Con algo de suerte te tocaba un destino cerca de casa o te podías escaquear con la más inverosímil treta (había mil y también mucha leyenda urbana). Podías pedir también la socorrida prórroga de estudios (alguno enlazaba licenciatura, boda, niños y mili), objetar o decir que no. Que no tragabas con la mili. En España llegó a haber 25.000 insumisos, 12.000 de ellos vascos. Fue el triunfo de la desobediencia civil y pacífica contra una obligación que, paradojas de la vida, eliminó el PP. Nos queda el recuerdo y también la música, la canción que popularizó Kojón Prieto y los Huajolotes, con el añorado Eskroto y Toñín (luego reconvertido en Tonino Carotone y su Me cago en el amor). Di que no. Di que no. Que la mili no me gusta, y que a mí nadie me asusta, lo que yo quiero es vivir.

lunes, 16 de febrero de 2009

Una de retos


A cuenta del collage que publicamos el pasado viernes en la portada del especial sobre las elecciones, un amigo me propone un reto para cada candidato. Por si no lo recuerdan, cada uno de los aspirantes aparecía practicando su afición favorita (Ibarretxe en bici, López frente a un ordenador, Basagoiti en moto, Ziarreta con una guitarra eléctrica, Madrazo con una raqueta y Ezenarro con un libro). Dice mi amigo que el lehendakari alardea de que ha subido el Angliru, que ha completado la París-Brest (1.200 kilómetros de nada) y no sé cuántas cosas más. Ahí va el reto: subir el Mortirolo vasco. Tiene que ir a Zestoa y enlazar dos puertos: Endoia y Azurki (con rampas del 19%). López es un entusiasta de Internet pero mi amigo le vio el otro día en una fotografía tumbado en un sofá y con un saxofón en la mano. Seguro que mejora a Javier Clemente y sabe tocar My favorite things, de John Coltrane. A Basagoiti no le va a pedir que le lleve en moto, pero sí que recite de memoria la alineación del Athletic que ganó la Liga del año 34 del siglo pasado. Ziarreta gusta de tocar la guitarra eléctrica (que no española, también llamada estatal), así que le reta a que toque un solo de cualquier pieza de AC/DC. A Madrazo, tenista de pro, le plantea hacer seis aces seguidos aunque, si se observa cómo agarra la raqueta, parece que juega a paleta goma. Y a Aintzane Ezenarro, que por lo visto es una lectora empedernida, le pide que se lea de tirón el último libro de María Antonia Iglesias, un tocho de 1.300 páginas que ni la trilogía de El señor de los anillos.

lunes, 9 de febrero de 2009

Benidorm

Sabíamos que hay mucho paisano que, llegada la jubilación, toma la carretera de Teruel y se pira al Mediterráneo para huir de esta humedad que nos mata. Sabíamos que unos cuantos residían ocasional o habitualmente en eso que los folletos publicitarios llaman "destino de sol y playa". Sabíamos que en Benidorm se pide Insalus, se pasea por la mañana dando grandes zancadas y se saluda como se saluda por aquí, con ese leve gesto de levantar la cabeza y decir "iepa!". Lo que no sabíamos era que fueran tantos los que se mudan unos meses a la Costa Blanca. 5.000 en Benidorm. O sea, el equivalente a toda la población de Lazkao. 5.000 paisanos residen en Alicante al abrigo del tinto de verano, la sangría, María Jesús y sus pajaritos, y la ración de británicos con las espaldas llenas de rojeces. 5.000 vascos desperdigados en esa cuna del urbanismo vertical que tan bien retrató Bigas Luna en Huevos de oro (memorable la escena en la que Javier Bardem intrepreta en karaoke Por el amor de una mujer, de Julio Iglesias, vestido con un gayumbo-paquetón, una bata de leopardo y una barretina). Algo tendrá Benidorm cuando el tío Inaxio no perdona sus quince días de rigor en octubre. Años y años viviendo al pie de Larun, rodeado de ovejas y vacas, hasta que un buen día descubrió que hay lugares en los que el reuma no duele y el sol calienta hasta debajo de la ducha. Porque, amigos, aunque sea tachado de hortera, tan respetable es veranear en Benidorm como hacerlo en Espot, en el Pallars Sobirà, La Almunia de Doña Godina o Bollullos Par del Condado.

lunes, 2 de febrero de 2009

Ttipi Ttapa Telebista


Si es usted un lector guipuzcoano, quizás no ha oído hablar de Ttipi Ttapa Telebista. Si es usted un lector guipuzcoano, quizás ha visitado alguna vez las comarcas navarras de Baztán, Bortziriak, Malerreka y Bertizarana . Si es usted un lector guipuzcoano, quizás no sabe que Ttipi Ttapa Telebista era desde el 15 de junio de 1998 la tele local que daba cobertura a toda esta zona y que llegaba a 18.000 hogares. Si es usted un lector guipuzcoano, quizás no sabe que el pasado sábado los responsables de Ttipi Ttapa Telebista hicieron de tripas corazón, apretaron el botón de off y cerraron la tele. La crisis, pensará. La crisis, sí, y los de siempre, los políticos que se sacan normas de la chistera para repartir a su libre albedrío el dinero que ponemos todos a escote. Ttipi Tapa Telebista y otros cuarentaytantos medios que trabajan en euskera recibían hasta el año pasado un total de 310.000 euros de las arcas forales a repartir entre todos. Este año (la crisis, la crisis) recibirán 9.000. No, no haga cuentas. Ya se las hago yo. UPN, el PSN (qué papelón) y CDN han recortado la subvención en un 96% (a Ttipi Ttapa le correspondían 200 euros anuales). Y para rematar la faena, los mismos partidos decidieron en su día que ninguna de las cadenas del noroeste de Navarra recibiera una licencia para operar con la señal digital. Añádase que ETB-1 se dejará de ver en la comunidad foral cuando llegue el apagón analógico (ETB-3 no se ve), recuérdese la situación de Euskalerria Irratia, y háganse la composición de lugar. Es lo que pasa cuando los políticos vinculan euskera y nacionalismo. Y lo mismo me da que sean los políticos que gobiernan en el Palacio Foral de la calle Carlos III que los que llevan 25 años en Ajuria Enea.

lunes, 26 de enero de 2009

El "negro" de Obama


Barack Obama tiene un negro que es blanco. Para los profanos en la materia, un negro, sea literario o periodístico, es aquél que hace el trabajo sucio (da igual un discurso que un libro) para un político, un periodista o un escritor. Los hay incluso que escriben libros para que otros le pongan la firma. De negros (literarios) sabe mucho Ana Rosa Quintana y otros tantos que no lo confiesan porque quedarían mal. Bueno, Juancar, el Rey, no confiesa que tiene un negro pero hasta los niños de teta saben que lo de "Me llena de orgullo y satisfacción" se lo escriben (me dicen por aquí que el habitual discurso de Nochebuena se puede leer en tiempo real subtitulado en el Teletexto). El negro de Obama (en EEUU no se les llama negros sino ghosts, fantasmas) es un blanco de 27 añitos que se llama Jon Favreau. Un portento capaz de enderezar hasta las palabras de Maleni Álvarez. En su ingenuidad, uno pensaba que Favreau escribía y Obama daba rienda suelta a su extraordinaria oratoria. Pero no. Aunque en la tele no lo parezca, Obama (y muchísimos políticos) leen en un aparatito que ni usted ni yo logramos percibir. Pensaba uno que Obama memorizaba un discurso de 20 minutos (equivalente a dos páginas enteras de periódicos), pero no. Al día siguiente de la toma de posesión tuvo que repetir, esta vez en privado, la jura de su cargo porque la víspera se había confundido. En realidad, como bien apuntaba Quim Monzó en La Vanguardia, no se confundió el nuevo comandante en jefe sino el presi del Supremo de EEUU, que alteró el orden de la frase. Obama se la había aprendido de memoria.

domingo, 25 de enero de 2009

La 'ciclogénesis explosiva' acojona

La ciclogénesis explosiva acojona (con perdón). No sé si el fenómeno que entre el viernes y el sábado ha atravesado estos lares era un ciclón, un huracán, un tifón, un tornado o una tormenta tropical, pero acojona. Por aquello de abreviar, los periodistas le hemos denominado ciclón, que no es otra cosa que una poderosa borrasca, como señalaba ayer en estas páginas ese pozo de sabiduría científica llamado Eduardo Cifuentes. Pero es que escuchas la palabra ciclón y te pones a temblar. Y ya de paso, piensas en las gentes que residen en el Caribe, el Atlántico y el Golfo de México, que todos los años se comen un abecedario entero de huracanes. De la A a la W (ya están decididos los nombres de los próximos cinco años). Te dicen que va a llegar un ciclón y te acuerdas de la película Twister, de la vaca volando y el trailer por las nubes. Sales de trabajar de noche, cuentan por la radio que faltan unas horas para que llegue la bestia y notas que sopla un viento rarito, como que quiere y no quiere. Y miras el termómetro, y a las 23.30 horas del viernes (recuerde que estamos en enero y hace nada nos congelábamos bajo cero) marca una temperatura de 16,5 grados. Como decía un tertuliano, sólo faltaba a esa hora que se fuera la luz y se apagara el petaco. Y te metes en la piltra después de cerrar hasta esa contraventana que siempre dejas abierta, y duermes como un lirón hasta que el ciclón (una pena no bautizarlo) barre tu barrio. Te despiertas, y para cuando quieres hacer balance de daños, te das cuenta de cuán importante es la electricidad, el café caliente, las tostadas (maldices a tu vitrocerámica) y tener a mano una linterna. Y pones la radio a pilas y compruebas que pocas veces ha estado mejor empleado el viejo axioma de mejor prevenir que lamentar.

miércoles, 21 de enero de 2009

Cuestión de elegir

¿Negro o blanco? ¿Carne o pescado? ¿Monte o playa? ¿Soltero o casado? ¿Coca Cola o Pepsi Cola? ¿Facebook o Tuenti? ¿Fernando Alonso o Lewis Hamilton? ¿Solo o con leche? ¿Ceremonia civil o religiosa? ¿Coche o moto? ¿Nintendo DS o PSP? ¿Los Rolling o los Beatles? ¿Real o Athletic? ¿Ciencias o Letras? ¿Agua o vino? ¿República o monarquía? ¿PC o Mac? ¿Aimar Olaizola o Juan Martínez de Irujo? ¿Diésel o gasolina? ¿Chapata o baguette? ¿Arantzatzu o Loiola? ¿El Mundo o El País? ¿Olentzero o Reyes? ¿Avión o tren? ¿Roger Federer o Rafa Nadal? ¿Kas naranja o Kas limón? ¿Londres o París? ¿Vaya semanita o Wazemank? ¿Pedro Almodóvar o José Luis Garci? ¿Txindoki o Gorbea? ¿Play o Xbox? ¿Jesús Loroño o Federico Martín Bahamontes? ¿Nike o Adidas? ¿Andreu Buenafuente o Javier Sardá? ¿La cocina de Karlos Arguiñano o la de Pedro Subijana? ¿Tinto o clarete? ¿Barack Obama o Tamborrada Infantil? Todos los días tenemos que elegir en la redacción una foto para ilustrar la portada. Todos los días hay que escoger entre dos o más opciones. Hoy (ayer para el lector) tenemos (teníamos) dos alternativas: la Tamborrada Infantil y la toma de posesión de Obama. Difícil elección. Así que decidimos que hoy abra usted el periódico de par en par para poder observar dos acontecimientos tan antagónicos de un vistazo. A la derecha, los niños tocando el tambor; a la izquierda, la mano del hombre con más poder del mundo. Dos fotos llenas de ilusión y esperanza para envolver un día inolvidable.

lunes, 12 de enero de 2009

La TDT

Para quienes en nuestra infancia sólo conocimos la primera cadena, la segunda (UHF) y las tres francesas, la Televisión Digital Terrestre (TDT) es como un maná de canales, una sobreoferta que no sabemos cómo digerir. Hay tantas cadenas y tantos programas (otra cosa es la calidad) que pasas el tiempo en tu sillon ball zapeando hasta dar con algo interesante. La TDT dicen que es el futuro, pero en algunos programas es como volver a un pasado retrógrado. No hay más que echar un vistazo a El gato al agua, una tertulia de una cadena que dice llamarse Intereconomía pero que está todas las noches dando la tabarra con la política. Con alguna que otra excepción, la nómina de tertulianos da para completar varios programas radiofónicos del Cocidito madrileño. Le dan unos palos a ZP que ni Jiménez Losantos. Y aportan una novedad al mundo de la tertulia: junto al micro no tienen un vaso de agua sino una copa de vino. Si uno sigue zapeando por la programación de la TDT, se encontrará con canales que se llaman Hogar 10 pero que hablan de todo menos de bricolaje doméstico, descubrirá que su hija no le quita ojo a una tal Hannah Montana, se hinchará a ver deporte como no hacía desde sus años mozos y comprobará que los pseudo concursos mediante llamadas telefónicas se han apoderado de la pequeña pantalla durante la madrugada. Por descubrir, también descubrirá que un puñado de cadenas de la TDT ofrecen películas eróticas en las que siempre verá los pechos de la hembra, pero nunca el miembro viril del macho. El argumento es lo que importa.