sábado, 30 de marzo de 2019

¿Donostia o Sestao?

En los dos últimos meses no sé si vengo a trabajar a Donostia o al Sestao de los altos hornos de los 80. Lo digo por lo de la contaminación, que debe ser un fenómeno muy sibilino porque ver, lo que se dice ver, no se ve por ningún lado en esta ciudad de postal. Hace un mes se dispararon las alarmas después de que no cayera una gota de agua durante tres semanas. A punto estuvimos de ir por la calle con mascarillas, como en Tokio. El Ayuntamiento incluso aconsejó, con más voluntad que éxito, no utilizar el vehículo particular en las horas punta de tráfico. Sin ánimo de restar importancia al asunto, en este indicador de calidad de vida hemos ido para atrás porque, si se consulta la hemeroteca, resulta que Donostia era hace nada, en 2007, una de las cuatro ciudades del Estado con menor contaminación del aire, según un estudio del Ministerio de Medio Ambiente. Así que se ha pasado de rozar el podio a que nos recomienden que eso de correr al aire libre por las mañanas, mejor evitarlo. Que a esas horas se registra el nivel de polución más alto del día. Nos aconsejan que entre semana corramos por el Paseo de Miraconcha a última hora de la tarde y los festivos, al mediodía. A esas horas, contaminación no sé si habrá, pero gente paseando por el mismo lugar que corremos, eso suele haber a patadas.

El padre de Griezmann

Netflix estrenó hace unos días el documental Antoine Griezmann. Campeón del mundo, que repasa la trayectoria del exjugador de la Real desde sus inicios en el fútbol hasta coronarse el pasado verano en Rusia. Con algunas lagunas, la cinta se deja ver. De entre todas las vertientes de la vida de Griezmann que se reflejan en el documental, merece la pena quedarse con el retrato que se hace de su padre. Todos hemos conocido a padres que quieren a toda costa que su hijo triunfe en el fútbol, que es algo tan probable como que te toque el Euromillón. Alain Griezmann recibió decenas de negativas de clubes por la débil constitución física de su hijo y recorrió miles de kilómetros hasta que dio con la Real. El resto ya es historia. Salvando las distancias, en el mundo del atletismo se vive un fenómeno parecido de padre que quiere sí o sí que sus hijos triunfen en el deporte. Es Gjert Ingebrigtsen, padre y entrenador de tres hermanos (Henrik, Filip y Jakob) que han sido campeones de Europa de 1.500 metros. Ingebrigtsen ha ido realizando ensayos de prueba-error, ha exprimido la competitividad entre sus vástagos, busca los límites del sufrimiento en cada entrenamiento y ha ido mejorando las prestaciones de hijo a hijo. Un controvertido método que ha convertido a Jakob, el menor, en la nueva estrella del atletismo mundial.

lunes, 25 de marzo de 2019

'Brexit', de salida, no

El adiós de Gran Bretaña a la UE se ha convertido en un laberinto de tal magnitud que cuesta encontrar la salida. Se ha convertido en un enrevesado culebrón, no ya de verano sino de las cuatro estaciones enteras. El próximo viernes 29 de marzo a medianoche (23.00 horas en Londres) es el día y la hora fijada para el bye bye. Pero a día de hoy (el guion cambia casi a cada minuto) nadie se atreve a pronosticar el final. El miércoles Theresa May se someterá a una nueva reválida, la votación en el Parlamento por tercera vez de su plan de salida de la UE. Eso si se lo permite John Bercow, el muy honorable speaker de la Cámara de los Comunes que, de momento, no está por la labor. La solución también puede llegar antes, el lunes, que es cuando la premier acudirá al Parlamento para dar cuenta de sus reuniones de esta semana con los líderes europeos. Si May logra el lunes el respaldo a su plan, aquí paz y después gloria. Pero si algo es consustancial al brexit
 es que depara sobresaltos continuos. Entre medias, asoman en el horizonte unas elecciones europeas que a dos meses vista no se sabe si serán con 27 países y 705 escaños, o con 28 países y 750 escaños. Y a todo esto, hoy se espera que en Londres se manifiesten más de 700.000 personas para pedir un segundo referéndum. ¿Algún experto en la sala?

viernes, 22 de marzo de 2019

Peatones-anuncio

Una empresa con sede en Madrid ha importado desde Estados Unidos un soporte publicitario que convierte a hombres y mujeres en anuncios andantes. Es el hombre-anuncio del Compro oro, pero en versión cool y millennial. Los impulsores de esta iniciativa no quieren oír hablar de comparaciones con el hombre-anuncio, una práctica prohibida en muchas ciudades por vejatoria y degradante, pero las semejanzas son inevitables. Eso sí, donde unos muestran cartón-piedra, aquí se recurre a tecnología. El negocio de esta empresa consiste en instalar en la parte trasera de una mochila una tablet que va proyectando anuncios. La mochila es transportada por personas, en su mayoría jóvenes, de camino al trabajo o a la universidad, de modo que en sus trayectos emiten publicidad de variopintas marcas vía tablet. Los peatones-anuncio, llamados hiker,reciben por su trabajo unos 100 o 150 euros al mes o descuentos de las marcas que publicitan. De contratos nada se sabe porque si algo distingue a estas empresas y otras del mismo pelo (léase Deliveroo, Glovo o Uber Eats, la Uber de la comida a domicilio que acaba de aterrizar en Bilbao) es que, cuando se menta su relación laboral con los trabajadores, miran hacia otro lado. Transparentes por fuera y opacas por dentro.

sábado, 16 de marzo de 2019

De Moro a Honnold (y II)

Pocas veces, por no decir nunca, un documental sobre escalada ha tenido la repercusión de Free solo, la cinta que narra la ascensión de Alex Honnold a El Capitán, una imponente pared de 915 metros de longitud, una de las más famosas del mundo, en el Parque Nacional de Yosemite, en California. Los dos premios a mejor documental que National Geographic logró en los Bafta y los Óscar han terminado de catapultar al éxito una historia que tiene la virtud de que te engancha aunque no sepas ni papade escalada. No hace falta conocer el complicado argot de esta especialidad que los profanos siempre asociamos con el peligro. El asunto es muy simple. Honnold escala la pared sin ninguna cuerda ni equipo de seguridad. A pelo. Y escalar a pelo supone que el mínimo error te cuesta la vida. Un resbalón y caes al vacío. Dos manos, dos pies, magnesio y una dosis ingente de fuerza física y mental son el único asidero de Honnold. El documental no se centra solo en la histórica ascensión que completó el 3 de junio de 2017 en menos de cuatro horas, sino que se completa con un retrato de su vida, de su austero estilo de vida (vive en una furgoneta). Un documental de una factura impecable que incluye hasta una historia de amor. Puro vértigo.

De Moro a Honnold (I)

Simone Moro, alpinista italiano que cuenta con cuatro primeras ascensiones a ochomiles  en invierno, estos días le pitan los oídos. Ha recibido un alud de críticas por afirmar que la muerte en el Nanga Parbat de su compatriota Daniele Nardi y del estadounidense Tom Ballard ha sido de todo menos casual. En un arranque de sinceridad, Moro ha declarado que los dos montañeros conocían el máximo riesgo que entraña ascender este ochomilpor la ruta del espolón Mummery (nunca se ha logrado), más aún en invierno, cuando se suceden las avalanchas de nieve y hielo: “Es como jugar a la ruleta rusa, una forma de suicidio”. Moro no se ha refugiado en el corporativismo y entiende que debe alertar a las futuras generaciones de la diferencia que hay entre dificultad y peligrosidad, dos términos fronterizos, que no similares. Entiende que la dificultad de una ruta es un reto, una motivación para un alpinista, pero que siempre se debe medir el peligro extremo que entraña, por ejemplo, una vía nunca escalada. Vamos, que no merece la pena dejarse la vida en el intento. Nardi, padre de un niño de seis meses, y Ballard, que también perdió a su madre en el Himalaya, no vivirán para contarlo. Alex Honnold vive y lo cuenta en el documental Free solo, otra historia en la que la muerte ronda cada minuto. Pero eso lo dejo para mañana.

viernes, 8 de marzo de 2019

4.200 agresiones

Hace una semana escribí un mensaje a Iñaki, un amigo que trabaja de taxista. Como me da su permiso para reproducirlo, ahí va: “Iñaki, si no es mucha molestia, el sábado, cuando traigas a Eider y sus amigas de carnavales de Lesaka, déjale en la puerta de casa”. Como siempre, Iñaki cumplió. Hace años, nuestras madres y padres (ellas más que ellos) pasaban la noche en vela cuando salíamos los sábados de farra porque eran más o menos frecuentes los accidentes de tráfico con jóvenes involucrados. Si no tenías coche y querías ir al Bordatxo, te las apañabas para ir y venir con algún conocido. Hoy las madres siguen pasando las noches en vela, no ya por los accidentes de tráfico, sino por los malnacidos que agreden, violan y humillan a las mujeres. Sí, ya sé que hoy no es el día contra la violencia de género (se celebra cada 25 de noviembre), pero, de entre todas las lacras y desigualdades que sufren las mujeres y que hoy sonarán con más fuerza que nunca, los crímenes machistas, los maltratos y las agresiones sexuales están en el vértice de la pirámide. Solo en 2018 hubo más de 4.200 en Euskadi.

viernes, 1 de marzo de 2019

España-Kosovo en Suiza

El PP, Ciudadanos y Vox llevan ya una semanas compitiendo por ver quién tiene la bandera (española) más grande. “España es una gran nación y los españoles muy españoles y mucho españoles son”, que diría Rajoy. El caso es que hay otra competición, esta deportiva, en la que hacen equipo los tres partidos más el PSOE. Se trata de que la bandera de Kosovo no ondee en España ni en pintura. Kosovo se declaró Estado independiente en 2008, pero España es uno de los países que no reconoce su soberanía. Casi 120 países de todo el mundo, entre ellos Francia, Italia, Alemania, Reino Unido, Japón y EEUU, consideran que Kosovo es una nación de hecho y derecho. España, no. Kosovo tampoco es reconocida por Brasil, China, Cuba, Rusia, Venezuela o Vietnam. A nadie se le escapa que la negativa de España a reconocer la soberanía de Kosovo se debe a que abriría las puertas a que Euskadi o Catalunya reclamaran idéntico status. Así que el Gobierno español, antes del PP y ahora del PSOE, se aplica a fondo para ningunear a los deportistas kosovares. En noviembre impidió que en el Mundial de kárate de Madrid Kosovo compitiera con su bandera y ahora la Federación Española de Fútbol ha renunciado a acoger el 28 de marzo el España-Kosovo, clasificatorio para la Eurocopa sub’17. El partido se jugará en Nyon (Suiza). Recuerda a otros tiempos.