Tengo amigos que se
descojonan cuando les confieso que me gustan a rabiar las canciones de
Frank Sinatra. Cuando ya descubren que incluso tengo discos de La Voz en casa, directamente se parten la caja. Aibadios, para gustos están los colores. My way, que no es de Franki sino una canción popular francesa (Comme d’habitude)
adaptada al inglés por Paul Anka, debería ser considerada un himno
mundial. No solo por el tono, por cómo suena interpretada por Sinatra o
por la melodía, que te engancha. También por la letra. “He amado, he
reído y llorado. Tuve malas experiencias, me tocó perder. Y ahora que
las lágrimas ceden, encuentro tan divertido pensar que hice todo eso. Y
permítanme decir, sin timidez, oh, no, oh, no, a mí no, yo sí lo hice a
mi manera”. Pena que la última visita de Sinatra a Madrid me
pillara en mala edad. Fue en septiembre de 1986. Cantó en el Santiago
Bernabéu en una noche exitosa para La Voz pero difícil de
olvidar para los promotores del concierto, que esperaban reunir a 60.000
espectadores y apenas alcanzaron los 30.000 después de regalar cerca de
16.000 entradas. 150 millones de pesetas palmaron los organizadores. Mañana se cumplen 100 años del nacimiento de Sinatra. Un buen día para que suene My way.
No hay comentarios:
Publicar un comentario