viernes, 27 de febrero de 2009

Di que no

Parece que fue ayer, pero ya han pasado 20 años. Un buen puñado de la chavalería que hoy sobrepasa los 30 y los 40 años dio a finales de los 80 un ejemplo más que digno de cómo echar abajo uno de esos viejos reductos que daba la impresión que nunca iba a caer. Hoy se corea el Otro mundo es posible como entonces se gritaba el Intsumisioa o el MiliKK. Había que tener muchos bemoles para ir en contra del sacrosanto Ejército. Bueno, muchos bemoles, muchas ganas de lucha pacífica, mucho ingenio y mucho apoyo social de una sociedad que, en una amplia mayoría (al menos por estos lares), respaldó como pocas veces la causa de insumisos y objetores. Hoy resulta anacrónico recordar que el sistema te obligaba a perder un año de tu vida en un cuartel (y dos años o más en tiempos de Paquito). Con algo de suerte te tocaba un destino cerca de casa o te podías escaquear con la más inverosímil treta (había mil y también mucha leyenda urbana). Podías pedir también la socorrida prórroga de estudios (alguno enlazaba licenciatura, boda, niños y mili), objetar o decir que no. Que no tragabas con la mili. En España llegó a haber 25.000 insumisos, 12.000 de ellos vascos. Fue el triunfo de la desobediencia civil y pacífica contra una obligación que, paradojas de la vida, eliminó el PP. Nos queda el recuerdo y también la música, la canción que popularizó Kojón Prieto y los Huajolotes, con el añorado Eskroto y Toñín (luego reconvertido en Tonino Carotone y su Me cago en el amor). Di que no. Di que no. Que la mili no me gusta, y que a mí nadie me asusta, lo que yo quiero es vivir.

lunes, 16 de febrero de 2009

Una de retos


A cuenta del collage que publicamos el pasado viernes en la portada del especial sobre las elecciones, un amigo me propone un reto para cada candidato. Por si no lo recuerdan, cada uno de los aspirantes aparecía practicando su afición favorita (Ibarretxe en bici, López frente a un ordenador, Basagoiti en moto, Ziarreta con una guitarra eléctrica, Madrazo con una raqueta y Ezenarro con un libro). Dice mi amigo que el lehendakari alardea de que ha subido el Angliru, que ha completado la París-Brest (1.200 kilómetros de nada) y no sé cuántas cosas más. Ahí va el reto: subir el Mortirolo vasco. Tiene que ir a Zestoa y enlazar dos puertos: Endoia y Azurki (con rampas del 19%). López es un entusiasta de Internet pero mi amigo le vio el otro día en una fotografía tumbado en un sofá y con un saxofón en la mano. Seguro que mejora a Javier Clemente y sabe tocar My favorite things, de John Coltrane. A Basagoiti no le va a pedir que le lleve en moto, pero sí que recite de memoria la alineación del Athletic que ganó la Liga del año 34 del siglo pasado. Ziarreta gusta de tocar la guitarra eléctrica (que no española, también llamada estatal), así que le reta a que toque un solo de cualquier pieza de AC/DC. A Madrazo, tenista de pro, le plantea hacer seis aces seguidos aunque, si se observa cómo agarra la raqueta, parece que juega a paleta goma. Y a Aintzane Ezenarro, que por lo visto es una lectora empedernida, le pide que se lea de tirón el último libro de María Antonia Iglesias, un tocho de 1.300 páginas que ni la trilogía de El señor de los anillos.

lunes, 9 de febrero de 2009

Benidorm

Sabíamos que hay mucho paisano que, llegada la jubilación, toma la carretera de Teruel y se pira al Mediterráneo para huir de esta humedad que nos mata. Sabíamos que unos cuantos residían ocasional o habitualmente en eso que los folletos publicitarios llaman "destino de sol y playa". Sabíamos que en Benidorm se pide Insalus, se pasea por la mañana dando grandes zancadas y se saluda como se saluda por aquí, con ese leve gesto de levantar la cabeza y decir "iepa!". Lo que no sabíamos era que fueran tantos los que se mudan unos meses a la Costa Blanca. 5.000 en Benidorm. O sea, el equivalente a toda la población de Lazkao. 5.000 paisanos residen en Alicante al abrigo del tinto de verano, la sangría, María Jesús y sus pajaritos, y la ración de británicos con las espaldas llenas de rojeces. 5.000 vascos desperdigados en esa cuna del urbanismo vertical que tan bien retrató Bigas Luna en Huevos de oro (memorable la escena en la que Javier Bardem intrepreta en karaoke Por el amor de una mujer, de Julio Iglesias, vestido con un gayumbo-paquetón, una bata de leopardo y una barretina). Algo tendrá Benidorm cuando el tío Inaxio no perdona sus quince días de rigor en octubre. Años y años viviendo al pie de Larun, rodeado de ovejas y vacas, hasta que un buen día descubrió que hay lugares en los que el reuma no duele y el sol calienta hasta debajo de la ducha. Porque, amigos, aunque sea tachado de hortera, tan respetable es veranear en Benidorm como hacerlo en Espot, en el Pallars Sobirà, La Almunia de Doña Godina o Bollullos Par del Condado.

lunes, 2 de febrero de 2009

Ttipi Ttapa Telebista


Si es usted un lector guipuzcoano, quizás no ha oído hablar de Ttipi Ttapa Telebista. Si es usted un lector guipuzcoano, quizás ha visitado alguna vez las comarcas navarras de Baztán, Bortziriak, Malerreka y Bertizarana . Si es usted un lector guipuzcoano, quizás no sabe que Ttipi Ttapa Telebista era desde el 15 de junio de 1998 la tele local que daba cobertura a toda esta zona y que llegaba a 18.000 hogares. Si es usted un lector guipuzcoano, quizás no sabe que el pasado sábado los responsables de Ttipi Ttapa Telebista hicieron de tripas corazón, apretaron el botón de off y cerraron la tele. La crisis, pensará. La crisis, sí, y los de siempre, los políticos que se sacan normas de la chistera para repartir a su libre albedrío el dinero que ponemos todos a escote. Ttipi Tapa Telebista y otros cuarentaytantos medios que trabajan en euskera recibían hasta el año pasado un total de 310.000 euros de las arcas forales a repartir entre todos. Este año (la crisis, la crisis) recibirán 9.000. No, no haga cuentas. Ya se las hago yo. UPN, el PSN (qué papelón) y CDN han recortado la subvención en un 96% (a Ttipi Ttapa le correspondían 200 euros anuales). Y para rematar la faena, los mismos partidos decidieron en su día que ninguna de las cadenas del noroeste de Navarra recibiera una licencia para operar con la señal digital. Añádase que ETB-1 se dejará de ver en la comunidad foral cuando llegue el apagón analógico (ETB-3 no se ve), recuérdese la situación de Euskalerria Irratia, y háganse la composición de lugar. Es lo que pasa cuando los políticos vinculan euskera y nacionalismo. Y lo mismo me da que sean los políticos que gobiernan en el Palacio Foral de la calle Carlos III que los que llevan 25 años en Ajuria Enea.