viernes, 24 de junio de 2022

De 50 en 50

Cuando participas en una prueba larga, uno de los recursos mentales que utilizas es dividir el recorrido por tramos. Te vas marcando pequeños objetivos que superas como en esos juegos en los que ganas pequeños tesoros cuando pasas de pantalla (sigo anclado en las máquinas de comecocos, no he llegado aún a la Play). Por ejemplo, si haces, andando o corriendo, la ruta entre Donostia y Hondarribia por la costa, primero te propones llegar a Pasai San Pedro sin gastar demasiadas fuerzas; luego, alcanzar los torreones de Jaizkibel sin dejarte el higadillo en la cuesta que arranca en Kalaburtza tras dejar atrás Donibane; más tarde repasas mentalmente en qué kilómetro está la preciosa punta de Biosnar; casi al final oteas el faro de Hondarribia y sueñas con acabar en el puerto refugio. La misma táctica uso a la hora de echar gasolina desde que, siguiendo con los paralelismos, comprobé pasmado que llenar el depósito cada semana cuesta lo mismo que unas zapatillas de correr de gama alta. Ya no lleno el depósito sino que voy tirando con repostajes de 50 en 50 euros. Es una autoengañufla porque sigues pagando la gasofa a precio de angulas, pero mentalmente quieres pensar que gastas menos. Eso sí, vas más veces a la gasolinera. A mí los currelas ya me saludan por mi nombre.

martes, 21 de junio de 2022

Azterketak euskaraz

A este lado del Bidasoa, si un alumno estudia en euskera, los exámenes de selectividad son en euskera. Natural como la vida misma. Al otro lado del Bidasoa, si estudias en euskera, el Gobierno de Macron se encarga de ponerte mil trabas para que no puedas realizar en tu lengua materna la prueba de acceso a la universidad. Estudiantes, profesores y familias de las ikastolas agrupadas en Seaska llevan años peleando con la centralista Administración gala para que los alumnos puedan hacer la prueba de baxoa, la selectividad, en la lengua que reciben en clase desde que son niños de teta. Las dificultades han ido a más desde la llegada de Macron, que está haciendo lo imposible por esquinar lenguas minoritarias como el euskera, el bretón, el occitano, el corso o el alsaciano, y se ha convertido en guardián del francés, un idioma que, como todos sabrán, corre el riesgo de sobrevivir. El caso es que Euskararen Erakunde Publikoa, Seaska y el Ministerio de Educación acordaron en 2019 que los alumnos pudieran hacer algunos exámenes de baxoa en euskera. El Gobierno francés no solo se ha pasado el compromiso por el Arco del Triunfo sino que el miércoles envió a la Policía a reprimir una pacífica protesta de padres y profesores de Seaska ante la Inspección Académica de Baiona.

viernes, 10 de junio de 2022

Aliexpress

Gotzone Sagardui anunció el jueves que cada vez será más frecuente que para recibir atención médica nos tengamos que desplazar a un ambulatorio diferente al que acudimos habitualmente, y que para alguna especialidad incluso tendremos que viajar a otro territorio de esta nuestra comunidad. Lo de los desplazamientos para una consulta médica y para someterme a pruebas me pilla bien entrenado. Tengo un problema menor (nada importante) por el que hace unas semanas acudí a mi médica de cabecera. Me derivó a una consulta en el ambulatorio del centro de Irun. De ahí pasé a otra consulta en el ambulatorio de Gros y, para hacer las pruebas, conocí (nunca había estado) el centro de salud de Amara Berri. Me queda por realizar otra prueba la próxima semana en el Materno Infantil del Hospital Donostia y volver a la consulta del ambulatorio de Gros a finales de mes. No lo digo a modo de queja. En todos los sitios he recibido una atención estupenda. Que tengas que acudir a otro ambulatorio diferente al habitual puede tener un pase (los de pueblo estamos muy acostumbrados a desplazarnos para recibir atención médica), pero eso de que una enfermera realice la labor de un médico, como que no. Recuerda a esa frase que suele rondar por las redes sociales: "Cuando lo pides en Aliexpress vs cuando te llega a casa".

lunes, 6 de junio de 2022

Tenis de madrugada

El pasado 21 de febrero, el alemán Alexander Zverev y el estadounidense Jason Brooksby se enfrentaron en la primera ronda del Torneo de Acapulco de tenis. Como era el tercer partido de una jornada que arrancó a las 18.00 horas, el duelo empezó a la 1.30 horas y acabó a las 4.55 de la madrugada. Es uno de los récords (el de partido de tenis que termina más tarde) más absurdos de la historia del deporte. Que el Nadal-Djokovic del martes pasado finalizara a la 1.27 horas del miércoles parece pecata minuta comparado con el precedente de Acapulco. Las sesiones nocturnas son cada vez más frecuentes en el tenis (sesiones golfas, les llaman), pero uno no esperaba que Roland Garros, ergo Francia, cayera en semejante disparate. Francia es uno de esos países que se rige por horarios razonables. Los irracionales horarios en el tenis son de sobra conocidos en el fútbol. No hay deporte que desprecie más al aficionado que paga religiosamente su abono. Las televisiones y el maná de dinero que reparten a los clubes mandan por encima de todo. Lo peor es que esos horarios intempestivos ganan peso, sea el deporte que sea. El estreno de las semifinales de la ACB entre el Madrid y el Baskonia arrancó anoche a las 22.00 horas. Al menos, a diferencia del tenis, en el baloncesto sabes cuándo empieza el partido y cuándo acaba (si no hay prórroga).