viernes, 26 de enero de 2018

Prensa en papel para ESO

"¿Cómo os ha afectado a la prensa escrita la expansión de Internet y la digitalización de los medios? ¿Te gustaría ser corresponsal de guerra? ¿Se viaja mucho siendo periodista? ¿Qué noticia es la más rara que has cubierto? ¿Te llevas mucho trabajo a casa?" Dos grupos de alumnos de primero de ESO del instituto Toki Ona (bonito nombre para un centro educativo) me sometieron hace una semana a un cariñoso tercer grado. Ya sea ante una audiencia de chavales o frente a un grupo de adultos, no resulta sencillo relatar el día a día de esta bendita profesión, tan mitificada a veces. Ni antes era sencillo explicar nuestro trabajo, ni lo es ahora, en plena ebullición digital. Como no sabía si los chavales de primero de ESO (12-13 años) leen prensa (en papel, digital o al gusto del lector), me planté en el aula con quince periódicos bajo el brazo, todos diferentes: locales, regionales, españoles, vascos, deportivos, económicos, en euskera, en catalán... Toda una declaración de intenciones. Ante chavales que en el futuro seguramente leerán la prensa en tablet y móviles, no se me ocurrió otra cosa que llevarles un muestrario de periódicos. Prensa en formato papel. Nostálgico que es uno. Ah, y por si leen los alumnos estas líneas, la charla no caerá en el examen. Era vacile.

viernes, 19 de enero de 2018

No hay semana sin control. Generalmente, en la vuelta a casa después del trabajo. Suele ser rutinario. De dónde viene, adónde va. “Vengo de recoger 30 kilos de coca, señor agente. Comprúebelo usted mismo en el maletero”, digo para mis adentros. Si llevas bien puesta la pegatina de la ITV, tienes el salvoconducto. Hace unos meses batí mi propia marca. De regreso a casa, también después del trabajo, de una tacada y en menos de media hora pasé tres controles de tres cuerpos policiales distintos. Bingo. Suele decir un amigo que Euskadi es, de largo, el país en el que nunca se le ocurriría atracar un banco. “Cuando entres en la sucursal con tu capucha y tu pistola simulada, tendrás muchas probabilidades de que un agente de paisano esté sacando dinero en el cajero”, dice. Anteayer supimos que desde que ETA anunció en 2011 el cese de su actividad armada, el número de guardias civiles y policías nacionales ha descendido un 20% en la CAV. También ha bajado la cifra de militares. Si sumamos la Guardia Civil, la Policía Nacional, la Ertzaintza y las policías locales, hay unos 15.000 efectivos en total, casi siete agentes por cada mil habitantes, la tasa más alta de Europa. Siete años después del fin de la violencia, no se entiende que la presencia policial no se haya adecuado al nuevo contexto. Mucha Policía...

viernes, 12 de enero de 2018

El 'kit' completo

Muchas risas el miércoles con el tuit (luego borrado) que publicó la Dirección General de Tráfico en la que recomendaba llevar siempre en el coche un kit antinevadas. Aconsejaba portar hasta 18 artículos: cadenas, pinzas, una linterna, una pala, barritas energéticas, un silbato, una radio, un botiquín, un kit de herramientas, enganches para el remolque, un traje de agua, gorro, guantes, chaleco reflectante, un móvil y su correspondiente cargador, agua, una manta y, ya puestos, el historial médico y medicamentos que nos haya prescrito el doctor. Ante la cascada de chanzas, la DGT aclaró que se trataba de una propuesta orientativa. No sé qué lleva cada cual en su coche. En el mío no suelen faltar el gorro, dos pares de guantes, una gorra, las cadenas, el chaleco, un botiquín (gentileza del concesionario en el que compré el coche), el móvil (que hace a su vez de linterna), el cargador del móvil, una manta, un paraguas, una toalla, los triángulos y, a falta de un historial médico, hay una prueba de esfuerzo que suele estar dando vueltas en el maletero. Tampoco faltan nunca un periódico viejo y algún libro. Y antiguamente, hasta el obligatorio recambio para los juegos de luces. Así que en nada compraré el resto: la pala, el silbato, las herramientas, las pinzas y el enganche para el remolque. Equipo completo, equipo Comansi.

viernes, 5 de enero de 2018

Tres paradojas, tres

El otro día me preguntaron si la camiseta de la Real se puede comprar en Women’secret. Como es lo más parecido a un pijama de rayas... Se da la paradoja de que la Real ha decidido que el próximo domingo en Leganés no lucirá en su horrenda elástica la publicidad de su patrocinador chino, pero sigue vendiendo la prenda en sus tiendas... con el dichoso logo en la pechera. Pocas veces resulta tan apropiado hablar de la mancha publicitaria. Segunda paradoja. La Fundación Kirolgi, presidida por el diputado foral de Cultura y Deportes, firmó hace un mes un convenio de colaboración con una casa de apuestas, nuevo mecenas de esta entidad que apoya al deporte de elite guipuzcoano. Hay quien considera que la ludopatía es comparable a la adicción al tabaco, el alcohol o las drogas. Si la publicidad de alcohol y tabaco esta erradicada del deporte, ¿es lógico que se mantenga la de las apuestas deportivas? Ahí lo dejo. Tercera y última paradoja, propia de sinvergüenzas. Días antes de que el Banco Santander comprara el Banco Popular, 68 grandes empresas e instituciones públicas (con información privilegiada) retiraron fondos por valor de más de 4.000 millones. El Gobierno llamaba a la calma y pedía tranquilidad a los clientes particulares. Primos, que somos unos primos.