viernes, 30 de diciembre de 2011

De Donostia a Tarifa.. y vuelta

Imaginen que se embarcan en una aventura a pie desde Donostia a Tarifa... y vuelta a Donostia. 2.200 kilómetros de nada. Ahora sumen una carga de material a acarrear (ropa y víveres) de 160 kilos por cabeza, una superficie helada que pica hacia arriba y está llena de trampas, y una temperatura veraniega que rara vez baja de los 25 grados bajo cero en un lugar inhóspito en el que durante esta época del año nunca se pone el sol.
A grandes rasgos, así se ha dibujado la larga (44 días) y exitosa marcha que ha llevado a Alberto Iñurrategi, Mikel Zabalza y Juan Vallejo desde la base rusa de Novolazarevskaya, a donde llegaron desde Ciudad del Cabo, hasta el Polo Sur, a la latitud en la que convergen todos los meridianos.
Si ya eran originales a la hora de plantear sus expediciones verticales (entre los tres suman casi una treintena de ochomiles), no lo han sido menos al embarcarse en esta expedición horizontal que tuvo su precedente hace unos meses con la travesía de 2.300 kilómetros y 32 días que realizaron en la también superficie helada, aunque menos fría, de Groenlandia. Solo desde una capacidad de sufrimiento casi sin límites se puede entender la gesta del trío, que ha soportado temperaturas de hasta 45 grados bajo cero y ha tenido también que echar mano de su santa paciencia durante los días en los que no soplaba el viento y no podían avanzar un metro con sus trineos tirados por cometas.
Iñurrategi, Vallejo y Zabalza han caminado en mitad de ese vacío blanco que representa la Antártida, una meseta de casi 3.000 metros de altura en la que la insignificancia del ser humano se expresa como en ningún otro sitio. Para hacerse una idea de qué representa el Polo Sur, basta decir que el país más cercano (Chile) se encuentra a 3.700 kilómetros, y la ciudad más próxima es Ushuaia, en Argentina, a 3.900 kilómetros de distancia. El mérito de los expedicionarios, amén de llegar al Polo Sur, es haberlo hecho en total autonomía, es decir, sin ningún apoyo externo. No son los primeros vascos en alcanzar el punto más al sur de la Tierra (el vizcaino José Carlos Tamayo lo hizo en diciembre de 1994 con el programa de TVE Al filo de lo imposible, y su paisano Willy Bañales lo consiguió en 2003), pero sí son los primeros que intentan cruzar la Antártida de costa a costa, previo paso por el Polo Sur.
Y es que la segunda parte de esta travesía les llevará ahora de nuevo al litoral, a Bahía Hércules, después de otra ración de cientos de kilómetros y aproximadamente 30 días más de andadura.
Hasta la fecha, solo ocho personas en el mundo han conseguido atravesar la enorme masa helada de mar a mar en total autonomía. Vallejo, Iñurrategi y Zabalza están ahora 2.200 kilómetros más cerca de su objetivo (la travesía total tiene 3.700 kilómetros). Como cuando descienden al Campo Base tras hollar un ochomil, sólo cuando lleguen a Punta Arenas, en Chile, podrán decir aquello de que han puesto el lazo a la expedición. Mientras, que les aproveche el turrón y el champán que portan en sus trineos.

* Artículo publicado en la sección de Deportes de NOTICIAS DE GIPUZKOA

'Estrobo'

El pasado domingo murió Xabier Lauzirika, Estrobo. Para quienes no sigan las competiciones de remo, su nombre no les dirá nada. Para quienes se asoman habitualmente al mundo arraunlari, era una enciclopedia de este deporte, un apasionado de las traineras, capaz de archivar hasta el más desconocido dato sobre este club o aquella regata. Estrobo procesaba y, sobre todo, compartía el inmenso volumen de estadísticas e historias que había acumulado durante años y años viviendo el día a día del remo. A la hora de compartir su tesoro de datos, no distinguía entre un becario y un veterano del oficio. Le daba igual que le planteara una duda un recién llegado de tierra adentro, que hasta que le enviaron a cubrir una bandera, lo más parecido a una trainera que había visto en su vida era la barca de Chanquete y que no diferenciaba proa y popa; que atender una cuestión de un periodista curtido en mil regatas. Era de esas personas con las que basta entablar una conversación de cinco minutos para congeniar. Un hombre bueno. Un tipo al que recurrías cuando, tras la primera jornada de La Concha, tal bote había sacado tres segundos de ventaja al segundo. Descolgabas el teléfono y llamabas a Estrobo, que siempre te sacaba de dudas y te recitaba casi de memoria la cuadrilla que poseía el récord que tú eras incapaz de encontrado. Estrobo era un veterano (murió a los 82 años), una especie que, dicen, desgraciadamente se está extinguiendo en las redacciones de los medios de comunicación. Y la veteranía, amigos, siempre es un grado.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Talos y bollos XXL

Comieron tantos talos cuando no se nadaba en la abundancia ("Cuando no había otra cosa para comer", suelen decir con resignación), que ahora los aborrecen. Por más intentos que hagas, no conseguirás que la amatxi ni la amona coman un talo. A lo sumo, echan un bocado para catarlo y dar el aprobado o el suspenso. Así que no extraña su alucine cuando en las ferias ven las colas que guarda el gentío para comerse la harina con agua al nada módico precio de cinco euros la pieza. Digo yo que si se vendieran talos en los supermercados, rara vez los compraríamos, aunque lo mismo dijimos en su día de la tortilla de patata precocinada, y a ver quién es el guapo que nunca ha metido un paquetito en el carro del súper. Con un talo, nunca lo haríamos. Si no, que se lo digan a la buena gente de Leitza que hace años fundó una empresa de talos y tuvo que cerrar al poco tiempo. Tal vez habrían encontrado mercado en Iparralde, donde a la hora de la krakada (del francés cracade, pronúnciese con la r fuerte francesa), hay quien se mete hasta tres entre pecho y espalda. Para talos, dicen, los de Segura, y para bollería, la que se vendía en los soportales de La Bretxa hace años, antes de que remodelaran el edificio y construyeran el actual mamotreto. Era venir a Donostia y, después de visitar templos sagrados como el Mendaur, el Erniope y el Sariketa, zamparte tan a gusto un xuxo XXL o un croissant de tamaño sideral. Echaron abajo La Bretxa y nunca más se supo de los bollos gigantes. Siempre nos quedará el talo.

martes, 13 de diciembre de 2011

De leyendas y viajes

Cuenta la leyenda urbana que tres amigos (cazadores ellos) dijeron un día a sus respectivas (esposas y novias) que se marchaban una semana entera a Toledo a practicar su afición favorita. A los días, alguien vio su coche en el parking del aeropuerto de Barajas y se descubrió el pastel: las escopetas estaban en el maletero y los pájaros habían volado a Cuba para practicar otro tipo de caza. O sea, el mito del cazador cazado, que cambia según quién cuente la historia. Otra leyenda que, como tal, nunca ha podido ser científicamente demostrada habla de tres amigos que, en una sobremesa de barra de bar, se arrancan con un "a que no hay huevos de...", y se apuestan a que cogen un avión, se plantan en Madrid, toman tres txikitos y a las tres horas están de vuelta. Viajes hay para todos los gustos y colores. Sabido es que Patxi López en sus vacaciones gusta de viajar en coche sin ruta planificada y sin atar ni comidas ni hoteles. A lo que salga. Conozco una pareja especialista en otro tipo de rutas. Consiste en desplazarse a un destino ya previsto y luego cambiar de plan sobre la marcha. Un año, en agosto, decidieron viajar a Galicia pero, como era 1992 y todo quisqui iba a Sevilla, acabaron cruzando Portugal hasta llegar a la Expo'92. En otra ocasión fueron a visitar en julio el sur de Francia y terminaron viendo el final del Tour con Indurain en el podio de París. La última ha sido viajar a Sos del Rey Católico previo paso por Obanos y Lerín, seguir luego hasta Sort (había que comprar lotería) y acabar cruzando hasta Andorra por aquello de comprar tabaco para las cuñadas y darse un baño en Caldea.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Geyperman

Uno nunca sabe si estos textos se leen en horario infantil, así que seré políticamente correcto. Allá vamos. En la década de los 70, cuando los Reyes Magos eran los Reyes Magos y Olentzero era un carbonero que bajaba del monte el día de Nochebuena, hacíamos la selección de juguetes que íbamos a pedir mirando con fascinación los escaparates de las tiendas y los anuncios de las dos cadenas de televisión que existían en la época. Hoy los regalos se eligen por catálogo. Tengo entre mis manos un tocho de 183 páginas a todo color con cientos de juguetes, muñecas, peluches, coches, camiones, excavadoras (siempre fueron mi debilidad), futbolines, cocinas (creo que les llaman cocinitas, como los chefs, que a toda palabra le ponen un diminutivo), guitarras, teclados, puzles y las muy vanguardistas Wii, Play, Xbox y todo esos artilugios del demonio. Cuatro décadas después, compruebo que hay juguetes imperecederos como la Magia Borrás, las Nancys y Barbies, el Monopoly (desconozco si las nuevas versiones incluyen a los mercados) y el Playmobil. Pero por más que paso y repaso las hojas del catálogo, no encuentro el Geyperman. En una esquina, escondidita, veo otra reliquia, el Cinexin, pero adapatado al siglo XXI, es decir, vinculado a una célebre película de animación de Disney. Y es que buena parte del muestrario de juguetes está relacionado con los filmes y series que inundan la pequeña y la gran pantalla. Seguramente lo más anacrónico, y a la vez fantástico, de pedir regalos es que, en estos tiempos de iPads, iPods e iPhones, todavía entregamos las cartas en papel y en mano.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Los Reyes, en lunes

Siempre he tenido cierta querencia por adelantarme a los calendarios. Ahora mismo, mientras tecleo estas letras, no tengo necesidad de recurrir a almanaque alguno para saber que el próximo 29 de enero cae en domingo, que la Semana Santa será la primera semana de abril, que la festividad de San Fermín será en sábado, que la Behobia de 2012 se celebrará el 11 de noviembre y que el próximo año es bisiesto. La patronal y su matraca de pasar todos los festivos al lunes para eliminar puentes, acueductos y similares me va a facilitar esa impagable labor de saber cuándo cae cada celebración de santos, santas y vírgenes que abundan en el Estado laico consagrado por la Constitución (en el artículo 16, por concretar). Aseguran los jefes de los empresarios, valga la redundancia, que semanas como esta que nos ocupa, nunca mejor dicho, suponen una pérdida de competitividad. Que no es de recibo trabajar un día sí y otro no o, como es el caso de algunas empresas, cerrar, recién iniciado diciembre, durante toda la semana. La patronal excluye de su propuesta los días de Navidad, Año Nuevo, Viernes Santo y la Pilarica. Así que prepárense para celebrar el día de Reyes en lunes, el 1 de Mayo en lunes, el Día de Todos los Santos en lunes, y así todas las festividades. Prepárense para esto y más porque se empieza por el calendario laboral y se sigue con el horario de comidas (comer a las tres o cuatro de la tarde es muy poco europeo), la cervecita fuera del bar y la siesta, costumbres todas con los días contados. Que hace 20 años que semos europeos, oiga, y todavía no nos hemos enterado.

viernes, 2 de diciembre de 2011

Rubén Beloki

Aseguraba hace unos días un periodista que Rubén Beloki hace gala de un sentido común que es poco común. Detrás de ese juego de palabras se esconde una acertada definición que, por qué no, también se podría aplicar a otro Beloki, Joseba, el exciclista, otro modelo de sensatez en un mundo como el del deporte, en el que a veces solo afloran muestras de frivolidad y mal gusto. Desde la distancia que da leer una entrevista en un periódico, escuchar unas declaraciones en una radio o ver un partido de pelota por televisión, Beloki, el pelotari, siempre me ha parecido un buen tipo por lo que hace y dice dentro y fuera de las canchas. Un tío al que le puedes comprar un coche de segunda mano sin temer a que se te rompa la junta de la culata a las primeras de cambio. Beloki es el yerno que toda suegra querría para sí, con permiso de Xabi Alonso, el paradigma de deportista que destaca por sus valores dentro y fuera de los campos de fútbol. Dicen quienes conocen a Beloki que tiene una calidad humana fuera de lo normal. Siempre me ha parecido un pelotari distinto, y no solo porque en el frontón pegara con clase unos zurriagazos terribles o porque no levantara la voz cuando le emparejaban con delanteros de menos nivel para equilibrar los torneos. En su quehacer diario también ha sido diferente. Hace ya muchos años, en un gesto poco usual en un deportista, se declaró objetor de conciencia y, en lugar de perder el tiempo en la mili, cada día llevaba en una furgoneta de la Cruz Roja a personas discapacitadas que trabajaban en distintos puntos de la comarca de Pamplona. En eso también fue un ejemplo.

viernes, 25 de noviembre de 2011

El color de la OTA azul

Desde que el ínclito Odón Elorza instauró el régimen de la OTA en todas las zonas de aparcamiento que rodean a esta santa casa, cada día somos dos euros más pobres, cada semana somos diez euros más pobres, cada mes somos 40 euros más pobres y cada año somos 400 euros más pobres. La OTA nos empobrece (no sé si como personas). Desde que en abril pusieron la cosa, este barrio es el paraíso del aparcamiento. Qué digo el paraíso, si aquí no aparca ni Dios. Es un páramo, un lugar inhóspito en el que hay plazas de parking como setas en la Ultzama. En su origen, la OTA se puso en el centro de las ciudades para favorecer la rotación de los aparcamientos. En este barrio rotar, lo que se dice rotar, no se rota. La zona azul está semivacía, salvo (¡oh casualidad!) los sábados y domingos, que está a tope porque no hay que pasar por caja. Es un misterio sin resolver dónde están entre semana todos esos coches que aparecen los fines de semana. La OTA es azul pero no entiende de colores políticos. Como cantaba el gran Rodolfo Chikilicuatre, se instala (lo baila) con Bildu, se instala (lo baila) con el PP, se instala (lo baila) con el PNV y se instala (lo baila) con el PSE. La OTA es para toda la vida. La OTA, si trabajas en ciudades como Donostia, te va persiguiendo y te va echando desde el centro a la periferia. Las multas también. Las multas, aunque pagues religiosamente, también te persiguen hasta que llegan hasta el buzón de tu casa. Hasta hace unos meses, había aquí al lado una vieja autocaravana que en un costado lucía el lema Free camping, it's not a crime. Free parking tampoco es un crimen, digo yo.

viernes, 18 de noviembre de 2011

Ni corrupción ni ETA

hACE unos días, un periódico español de los de mayor difusión publicó una extensa entrevista con Mariano Rajoy. En las cuatro páginas largas de preguntas y respuestas, los dos periodistas no le planteaban ni una sola cuestión relacionada con la corrupción ni con ETA. Tres cuartos de lo mismo se puede decir del cacareado debate entre Rajoy y Alfredo Pérez Rubalcaba que ofrecieron algunas televisiones hace semana y media. Ni Pamplona. Líbreme Alá de juzgar cómo deben hacer su trabajo otros colegas de profesión. Aquí, como en todo, cada maestrillo tiene su librillo... y sus intereses. Pero llama la atención que en semejante peñazo de campaña electoral apenas se le haya hincado el diente al monotema y se pase de puntillas por las corruptelas políticas. ¿Pacto de silencio? Puede ser. Durante los últimos cuatro años hemos desayunado a diario con escándalos de corrupción a tutiplén, la mayoría protagonizados por cargos públicos del PP y PSOE, aunque en esta materia, con honrosas excepciones, es casi hasta justo generalizar. De norte a sur y de este a oeste, los casos se han multiplicado como los goles de un carrusel radiofónico. Que levante el dedo el partido que no se ha visto salpicado por algún escándalo de mordidas. Pero ahora tocaba hablar de crisis, que diría al otro. Entre la prima del exportero de la Real (hoy en Osasuna), y los mercados, nos tienen agarrados por los mismísimos. Le da a uno la impresión de que llega el fin del mundo. Feísima se está poniendo la cosa de la economía, feísima.

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Cuando la marca se convierte en una obligación

Cuando corres la Behobia, rara vez te pregunta alguien si has terminado la carrera, si has completado las 20.000 zancadas más célebres entre la república independiente de Irun y el Bule. Se presupone que la has acabado y se supone que, si sales, tienes que llegar. Algunos (pocos) te preguntan acerca de si has disfrutado. Pero, y por este orden, quieren saber: a) Cuánto tiempo has tardado en cubrir esos 20 kilómetros. b) Cuánto has sufrido. Parafraseando un famoso dicho, en la Behobia sufrir es (casi) inevitable, pero batir tu propio registro es opcional. La Behobia se ha convertido para muchos participantes en la dictadura del cronómetro. Tanto tardas en correr la carrera, tanto vales. La obsesión por mejorar la marca personal o superar la del año anterior está muy extendida entre el pelotón de populares. El problema es cuando esa obsesión pasa a ser un fracaso personal si no se consigue el objetivo. Lo que no debería ser más que una nimiedad (no lograr la marca pretendida) se convierte en un bajón de autoestima. Porque casos como estos, haberlos, haylos.
Con 22 Behobias consecutivas en las piernas, yo también sucumbí durante años a esa obligación del cronómetro hasta que me di cuenta de que desde la salida a la meta no despegaba la mirada del asfalto de lo jodido (con perdón) que corría para alcanzar la marca soñada. Ha sido correr como acompañante (liebre) de debutantes y descubrir que se puede disfrutar de otra Behobia sin la autopresión (si se me permite el palabro) y sin mirar al reloj. Con el reloj me pasa ahora como a los exfumadores con el tabaco: me he convertido en un activo defensor de disputar la Behobia sin perder el tiempo en tiempos. Es imposible saber cuántos de los 400 corredores que necesitaron asistencia sanitaria lo hicieron porque forzaron la máquina en exceso para alcanzar el registro que se habían marcado. En jornadas como la del pasado domingo, con un viento sur que te resecaba la boca cada segundo, lo que aconsejaba la cabeza (y sobre todo el cuerpo) era tomártelo con mucha calma. En carreras que superan los 15 kilómetros, seguramente solo la alta humedad es un enemigo comparable al viento sur. Te va debilitando sin que casi te des cuenta y te deja fundido, sin fuerzas, casi siempre cuando te restan cinco o seis kilómetros para pisar la meta. Si a eso le añades que la Behobia es un continuo sube y baja... Nunca había visto tantos corredores atendidos al borde de la carretera. No diré que me encontré un par de atletas tirados en cada kilómetro, pero sí tuve algo más que la sensación de que la alta temperatura y el ambiente caluroso (apenas sopló el viento) estaba causando estragos. Ni las continuas advertencias del Fortuna para que los corredores nos hidratáramos adecuadamente antes y durante la carrera (también después), ni el hecho de que cada año sea más patente que los participantes se preparan más y mejor, han evitado que se haya vivido la carrera más accidentada de los últimos 32 años. Al Fortuna le ha pasado este año como al himalayismo con los accidentes: se ha hablado más del aparatoso desenlace de la carrera que del éxito de la trama.

* Artículo publicado en la sección de Deportes de NOTICIAS DE GUIPUZKOA

viernes, 11 de noviembre de 2011

El 'set list' de la Behobia

Es como un concierto de rock, pero con el público uniformado con pantalón corto, camiseta y zapatillas. La salida desde la república independiente de Behobia se ha convertido con el paso de los años en un espectáculo de música, sonido e imágenes en mitad de un hervidero de gentes y nervios.

Durante algo más de dos horas, el barrio irundarra es una bombonera al mando de Joseina Etxeberria y Mikel Apaolaza, los dos presentadores de Gaztea que en la Behobia hacen las veces de disc jockeys. Desde hace cuatro años, ambos ponen orden por megafonía a la salida de los corredores (van llamando a cada grupo de color de uno a uno) y pinchan música para todos los gustos. El atrezzo del punto de partida de la carrera se completa con una retransmisión en directo, que incluye entrevistas con algunos de los participantes, que se muestra en pantallas gigantes. Pero dado que a más de uno y más de dos atletas les motiva escuchar su tema preferido antes de empezar a correr para ponerse a tono, la Behobia tiene su propio set list, o lo que es lo mismo, el repertorio de canciones que un grupo musical toca en un concierto.
Sarri, sarri, de Kortatu; Go West, de Hermes House Band (la carrera va de este a oeste), Lucifer, de Alan Parsons, London calling, de The Clash, y One step beyond, de Madness, son temas ya tradicionales de la prueba. También Carros de fuego, de Vangelis, que siempre se ha utilizado para dar el pistoletazo de salida a los atletas discapacitados, que salen hacia Donostia media hora antes que los populares.
A nadie se le escapa que música y atletismo van de la mano. Las nuevas tecnologías y los artilugios que se han creado para que el corredor pueda practicar su afición mientras escucha a sus grupos favoritos vía móvil, Ipod o mp3 (por citar tres de los aparatos más utilizados) han contribuido incluso a que se destierre aquello tan mentado de que correr es aburrido.

MÚSICA EN DIRECTO
Lezo, Pasaia, Trintxerpe...

Los organizadores de la Behobia no son ajenos a esta moda y dan cada vez más protagonismo a la música. Al igual que se sucede en las grandes carreras populares del mundo, diferentes puntos del recorrido están salpicados por grupos que animan el paso de los corredores con sus instrumentos.
Hay clásicos de toda la vida (los txistularis de Trintxerpe), y otros de nuevo cuño como los dj's del puerto de Pasaia, el grupo Ácido C, que tocará este año en Lezo, el presentador de Gaztea Ohian Vega, que pinchará discos en el Boulevard, o la txaranga Pasaia, que estará en el Kursaal. Pero, sobre todo, sonará música en la salida. Behobia se asemeja cada segundo domingo de noviembre a un estadio, aunque donde hay gradas y césped, aquí hay comercios por los que transita la clientela francesa en busca de alcohol y tabaco, tres gasolineras (que cierran por unas horas), y asfalto cubierto de atletas. A vista de pájaro, cualquiera diría que en tan pequeño y estrecho espacio puede entrar un pelotón de más de 23.000 atletas pero, como en el chiste de los navarros y el seiscientos, entra.
A los hits de la Behobia arriba mencionados se suman este año las aportaciones que los propios corredores han hecho en el foro de Internet de la carrera (www.behobia-sansebastian.com). Para gustos están las canciones, así que la lista de temas es extensa. Legs, de ZZ TOP, Sweet child o'Mine, de los Guns n'Roses, Where the streets have no name, de U2, Chocolate molinillo, una popular canción infantil, Lovers in Japan, de Coldplay, Whisky in the jar, de Metallica, Corren, de Gossos, Run to the hills (versión Iron Maiden o versión Gary Moore), Paquito el chocolatero; Negua joan da ta, de Zea Mays, Ecuador, de Sash, Fiesta, de The Pogues, Born to run, de Bruce Springsteen, Egunero, de Hertzainak, la banda sonora de Piratas del Caribe, Start me up, de los Rolling; Hurricane, de Bob Dylan, The Bongo Song, de Safri Duo, y hasta Nessun dorma, de Luciano Pavarotti, componen la relación de temas propuestos por los participantes.
Tal es la pasión de algunos corredores por la música que hace tres años Chema Martínez tomó el micrófono de Etxeberria y se arrancó con El ritmo del garaje, de Loquillo, solo unos minutos antes de salir rumbo a su cuarto triunfo en el Boulevard.

* Artículo publicado en la sección de Deportes de NOTICIAS DE GIPUZKOA

Controles

Debo tener cara de sospechoso, o cierto parecido con algún criminal albano-kosovar en busca y captura, porque soy carne de cañón en los controles policiales. No hay semana en la que el agente de turno no detenga mi vehículo unos segundos, a veces varios minutos, y me pida la documentación, que le abra el maletero o que le diga dónde trabajo. Suelen ser paradas de puro trámite -"¿De dónde viene? ¿A dónde va?"-, salvo cuando te ponen mirando al río. Es lo que denomino la pena de los conductores que te miran desde su coche cómo estás retenido mientras hacen cola en un control, en analogía con la famosa pena del Telediario. El caso es que tiene uno la sensación de que se han incrementado los controles en los últimos meses. Di go yo que será por la crisis. Yo tengo hasta mi propio ranking: de más a menos, la Policía Nacional se lleva la palma en número de controles, por delante de la Policía Foral, la Guardia Civil, la Ertzaintza y las policías municipales. Esta semana, en un control de un cuerpo que omitiré (no sea que el agente lea este texto y se mosquee), un agente me hizo un par de preguntas que nunca me habían hecho en tantos años de registros policiales. Tras entregarle el DNI, el agente me pidió permiso para inspeccionar mi coche (era la primera vez que me lo pedía un policía) y, a continuación, me soltó: "¿Lleva estupefacientes o algún arma encima?". "Dos Colt 45 y quince gramos de maría", estuve a punto de contestar, por aquello de relajar el ambiente. Con todo, solo hay una cosa que me molesta: que se dirijan a mí llamándome "caballero". Caballero es la persona que monta a caballo, por Dios.

viernes, 4 de noviembre de 2011

Truco y trato

Sucummbí al happy meal del McDonald's, sucumbí a los cromos de las Winx, a los sobres sorpresa, a las gomas de silicona con forma de animales y a las silly bandz, logo bandz y mama bandz; sucumbí a la Barbie y toda su corte, a la Nancy fashion, al monopatín de toda la vida y al de palo tentetieso; sucumbí a las calcamonías, a Disney Channel (hasta que aprendí a caparlo con el mando a distancia), a Hannah Montana, a Patito feo con sus Divinas y sus Populares, a Bob Esponja, Patricio, Calamardo, e incluso a Pocoyó; sucumbí a los juegos de diseña tus collares y tus pulseras, sucumbí a las chucherías de los domingos por la tarde, a los mostos del mediodía, a los helados de chocolate del verano y al chocolate con churros del invierno; caí en la tentación del viaje a Eurodisney, y a la visita a Port Aventura -"ya que estamos, habrá que entrar"-. Sucumbí a todo esto, hasta que llegó Halloween. Y por ahí no paso. "Truco o trato", me soltaron el otro día vestidas de zíngaras desde su metrotreinta de estatura. "¿Truco o qué?". "Halloween", dijeron ante la cara de tontaina de quien no sabe de qué le están hablando. "Galletas y chocolatinas", exigieron. El culto a la muerte siempre me ha dado yuyu y no digo ya las películas de terror, que me obligan a cambiar de canal cada vez que se asoma una escena de las de cuchillo y motosierra. Donde esté el suspense, que se quite el terror con sus zombis, vampiros y momias. Así que con esta fiesta importada de Norteamérica que, al parecer, se está expandiendo como una mancha de aceite, como que no hay trato.

lunes, 31 de octubre de 2011

Fórmula 1

Un colega de profesión afirmaba hace ya unos cuantos años, cuando casi nadie sabía qué era un pit-lane y creíamos que alerón era una zona de nuestro cuerpo que se asomaba por los sobacos, que la Fórmula 1 no era un deporte. "Si eso es deporte", acostumbraba a decir, "lo mismo se puede decir del ajedrez". Como discutir sobre qué es y qué no es deporte nos puede llevar a escribir varias Mesas de redacción, lo dejaremos para otra ocasión. No diré tanto como aquel compañero, pero sí, al menos, que la Fórmula 1 es un tostonazo. Hace tiempo que ni entretiene ni tiene un mínimo de emoción, dos ingredientes imprescindibles para atrapar a un espectador como un servidor, capaz de ver por televisión hasta la Champions de las canicas. Y no hablo solo de esta temporada que está a punto de bajar la persiana. Por más vueltas que Bernie Ecclestone le da al circo, no acaba de dar ni con la fórmula. Creo que no soy el único espectador que solo presencia la salida de los grandes premios por si se monta un pifostio de mil pares en la primera curva. Y creo que tampoco soy el único que se queda perplejo cuando una carrera se decide porque unos tipos de buzo tardan media milésima de segundo más que sus colegas en cambiar cuatro neumáticos. Entre esa salida y las paradas en boxes, habitualmente todo lo que hay es el vacío y, si me apuras, un par de adelantamientos... a los doblados. Si a este espectáculo le sumas los comentarios de un tipo que defiende al piloto patrio lo haga bien o lo haga mal, apaga y vámonos... a jugar al ajedrez.

jueves, 27 de octubre de 2011

Banda sonora

He aquí un texto coral, escrito por una persona pero elaborado con las aportaciones de varias voces. Hace unos días propuse a amigos y lectores que eligieran una canción para componer la banda sonora del nuevo tiempo que se alumbró en este país hace poco más de una semana. ¿Qué tema os gustaría escuchar de fondo mientras leéis los periódicos del 21-0, con un café con leche y un croisán sobre la mesa? De esa propuesta nace esta mesa. Jon, que confiesa ser un poco rarito, elige el grupo corso I Muvrini y el tema Goioia (Alegría) porque "no podemos estar sino felices y contentos". Mari, y Bea y Raúl, que dicen sentirse melancólicos, se decantan por Oi ama eskual herri, de Benito Lertxundi, aunque no le hacen ascos ni a Baldorba ni a Herribehera. El mismo cantante escogen Ana y Mari Carmen, que eligen la preciosa Oi kanta berri del bardo de Orio. Ainara, más cañera, apuesta por Pakean utzi arte, de Hertzainak, "no tanto por su significado sino para ser conscientes de lo que éramos, lo que somos y lo que podremos lograr por otros caminos". Alberto se decanta por Itxaropena, de Su ta gar, porque "hay esperanza de que esto salga bien", y Peio y Amaia prefieren Txoria txori, de Mikel Laboa, "una canción que ha marcado una época". Felipe y Mariyou traspasan fronteras y escucharían de fondo Imagine, de John Lennon, un clásico, y Erika y Xabi vuelven al euskera con Izarren hautsa, escrita por Lete y cantada antes por Laboa y ahora por Ken Zazpi. Proponen incluso un extracto del poema: Gu sortu ginen enbor beretik sortu dira besteak, burruka hortan iraunen duten zuhaitz-ardaska gazteak.

viernes, 21 de octubre de 2011

Paz

Recordaba hace unos días un veterano periodista que el fin de ETA político-militar se escenificó en una multitudinaria rueda de prensa en Biarritz con la comparecencia de sus dirigentes a cara descubierta. Corría 1982. Por entonces uno era lo que hoy se llama preadolescente y seguramente estaba más preocupado por los títulos de la Real que por la violencia. Casi 30 años después, el fin de ETA militar ha llegado vía Internet. Recordaremos para siempre dónde estábamos el 20 de octubre de 2011 cuando, a las 19.00 horas, conocimos el comunicado que más hemos esperado en nuestras vidas. La paz es el legado más valioso que podemos dejar a nuestros hijos como herencia. Como dice un colega de profesión, las generaciones que nos suceden crecerán en un ambiente respirable. Crecerán en paz, en la tan ansiada paz.

sábado, 15 de octubre de 2011

Txistorra para todos

Se supone que cuando creas un blog, partes de la nada para darle contenido. Vamos, que es como levantar una casa. Primero los cimientos, luego las plantas y, al final, el tejado. Si habláramos de un blog, seguramente primero escribiríamos una entrada y luego le añadiríamos fotos, vídeos, comentarios, enlaces… No es el caso. Este blog viene ya con empacho. Completo. En lugar de ir alimentándolo día a día, semana a semana, durante meses he ido recuperando todos los artículos que he escrito desde que en noviembre de 2005 nació NOTICIAS DE GIPUZKOA. Artículos cortos, la mayoría mesas de redacción publicadas en la página 3 del periódico, y algún que otro reportaje. En total, 285 (los he contado).
Aunque mis habilidades informáticas son más bien escasas, el blog me lo he fabricado yo solito con mis dedos índices (por si alguien no lo sabe, para escribir en el teclado solo utilizo los dedos índices). He tenido  algún que otro asesoramiento de Jurdan Arretxe y Juan G. Andrés (gracias), dos expertos en estas redes sociales que nos tienen atrapados. Así que, nada, quedáis todos invitados al estreno (se servirá txistorra de Bera).

viernes, 14 de octubre de 2011

Bidegorris de Irun

"Si tienes que hacer una crítica en el periódico, habla de los bidegorris de Irun", me dice un familiar que reside en el País del Bidasoa. Cojo el guante. Si José Antonio Santano me permite la comparación, no sé si exagerada, Irun es a Donostia en los bidegorris, lo que la selección inglesa a la española en el baloncesto. Circular en bici por Irun puede convertirse en un deporte de alto riesgo si se hace en convivencia con coches, motos y camiones. En realidad, la red de bidegorris de Irun, si es que se puede llamar así, deja bastante que desear. Es un quiero y no puedo, o no me atrevo. Abundan las vías en la periferia y en las nuevas zonas residenciales, pero prácticamente no existen en el centro de la ciudad. La ambiciosa y participativa reforma del paseo Colón no contempló la construcción de un bidegorri (a cambio hay las aceras más anchas de Gipuzkoa) y ahora se ha pintado en el asfalto (literal) un ¿carril-bici? en la calle más transitada por vehículos de la ciudad. Puede alegar el Ayuntamiento que Irun no tiene la orografía de Donostia (aunque tampoco es San Francisco) y que hay terrenos en los que tienen algo que decir hasta cuatro administraciones, pero resulta llamativo que no muestre más sensibilidad por los bidegorris. No hay enlace ni con Hondarribia ni con Behobia ni con Hendaia. Que tres municipios que han dado muy buenos ejemplos en mancomunar sus servicios no dispongan de un bidegorri que los conecte solo se entiende desde la falta de voluntad. Lo que daría uno por ir en bici de la playa de Hondarribia a la de Hendaia por el viejo puente de Santiago sin tener que pelearse con los conductores.

viernes, 7 de octubre de 2011

Juanito

Un habitual de Twitter escribió lo siguiente tras conocerse el pasado miércoles que Juanito Oiarzabal había coronado el Manaslu: "Tras llevar al altar a la duquesa, Alfonso Díez ayudará a Juanito Oiarzabal a descender del Manaslu". Las penurias que está sufriendo el alpinista vitoriano en las bajadas de sus últimos éxitos en los ochomiles están acabando en puro pitorreo para el común de los mortales. Se diría que le cuesta más bajar que subir, lo cual, a simple vista, parece un contrasentido. Y con tantos problemas que está padeciendo en sus descensos, corre el riesgo de que quien conoce el mundo del himalayismo por lo que lee, ve o escucha, tienda a infravalorar el mérito que tiene cada una de sus ascensiones a un ochomil. Subir 26 ochomiles tienen su aquel, está al alcance de un puñado de alpinistas, por más que Oiarzabal no haya destacado, sobre todo en sus últimas expediciones, por aportar un plus de originalidad, ya sea en el estilo o en la ruta. Seguramente su mérito tiene más que ver con la determinación (llámenle cabezonería) con la que afronta el reto de ser el primer ser humano que completa dos veces el álbum de las catorce montañas más altas del planeta. Erre que erre, se ha empeñado en ser el primero, y nadie ni nada se lo va a impedir. Juanito es así. Sin embargo, parece que su proverbial aclimatación a la altura (no hay más que ver el programa El conquistador del Aconcagua para comprobar que se mueve como pez en el agua cuanto más metros asciende) se ha encontrado con un rival difícil superar: la resistencia física.



viernes, 30 de septiembre de 2011

Maya del Baztán

Digo yo que si Rodolfo Ares no sabía durante las conversaciones de Loiola dónde estaba Elizondo, tampoco será capaz de situar en el mapa la localidad de Amaiur. Le podríamos dar las coordenadas del GPS, pero resultaría muy facilón. Así que ahí van unos cuantos trazos de esa localidad que todavía hay quien denomina Maya del Baztán. Amaiur, como Elizondo, está en el valle de Baztan, y valle de Baztan solo hay uno. Pese a la creencia popular, y el empeño de algunos, ni Lesaka ni Bera ni Doneztebe ni Zugarramurdi ni Urdazubi forman parte de Baztan. Amaiur está en el cogollico del valle, al norte, justo en el inicio del puerto de Otsondo en dirección a Dantxarinea, y al abrigo de Izpegi. Y, además de ser el último fortín de la independencia de los navarros, tiene otros tantos emblemas de los que se siente orgulloso: son los putos amos, que diría Pep Guardiola, en sokatira (arrasaban en los años 80 y 90), disfrutan de unas buenas fiestas en agosto, con su reconocido concurso de perros de pastor incluido, tienen un molino rehabilitado como casa rural, un entorno envidiable para perderse del mundanal ruido y un precioso arco de entrada a la kale Nagusia, cuya réplica puede verse en el poble espanyol de Barcelona. Un arco que fue reconstruido hace unos años después de que un camión se lo llevara por delante en 1995. ¿Que adónde quería llegar yo? Pues a que somos capaces de situar en el mapa la capital de Laponia porque hemos viajado en el último verano, pero nos cuesta saber dónde diablos está Leintz Gatzaga.

viernes, 23 de septiembre de 2011

Mil 'colorao'

Confieso que cuando leí la noticia, lo primero que hice fue mirar el calendario. Y no, no era 28 de diciembre. "El Consejo de Administración de RTVE decide controlar los contenidos de los informativos", rezaba el titular. Si la maniobra no fuera tan burda, sonaría a broma. Por fin algunos partidos políticos (y sindicatos) se quitan la careta y ponen negro sobre blanco lo que hacen, o intentan hacer, a la chita callando, pensé. Para entendernos, el acuerdo de los miembros del Consejo de Administración aprobado el miércoles, y revocado solo unas horas después, les hubiera permitido acceder al sistema de producción de los informativos, es decir, a los ordenadores que utilizan unos 400 profesionales de RTVE para elaborar sus informaciones. Desde la escaleta de los Telediarios a las preguntas de la presentadora de 59 segundos, hubieran podido controlar (al fin y al cabo ese es su objetivo) todos los contenidos. Suena tan irracional que nos retrotrae a tiempos que creíamos olvidados. En el fondo, sin embargo, subyace la eterna ambición de los partidos por teledirigir los medios de comunicación públicos. Durante los dos próximos meses Rajoy y Rubalcaba repetirán hasta la saciedad aquello de la neutralidad, la objetividad y la autonomía e independencia de los profesionales de RTVE, pero no es más que palabrería hueca. Por lo bajini, su única ambición es gobernar la mastodóntica casa. Y, si no, no hay más que dar tiempo al tiempo. Mil colorao a que cuando el PP llegue al poder, hace una limpia de profesionales en RTVE. ¿Les suena Ana Pastor?

lunes, 19 de septiembre de 2011

'Esencia de cocidito'

Javier Vizcaíno y su equipo del programa Gabon de Onda Vasca acaban de sacar de los fogones una especie de remake de aquel exitoso El cocidito madrileño. La nueva versión se llama Esencia de cocidito y, aunque de momento solo se han servido dos entregas, ingredientes no le van a faltar. Si el original Cocidito madrileño dio para una obra de teatro también exitosa y recibió un premio Ondas, Esencia de cocidito tiene el campo abonado. Los mismos tertulianos de entonces siguen poblando las tertulias de las radios del poronpompero, y su efecto se ha multiplicado con la expansión de la TDT que, en el caso de algunas cadenas (no hace falta nombrarlas), son una tertulia constante y repetitiva sobre dos asuntos: zumbar a Zapatero y hablar del siempre rentable monotema vasco. En los últimos días se ha paseado de plató en plató y de estudio en estudio un tal Francis Franco, nieto del innombrable. El susodicho da para varios cociditos, unas cuantas fabadas y hasta pulpo a la gallega. Francis Franco ha gozado de la libertad de expresión que negó su abuelillo a millones de personas para soltar una sarta de sandeces que han hecho la boca agua a la derecha más cavernícola. Ahí va una ración, a modo de Cocidito: "Mi abuelo no firmó ninguna sentencia de muerte", "No se consideraba un político. La política no era una cosa que le gustase", "Mi abuelo no era autoritario". Para rematar la afena, otro nietísimo, Jaime Martínez-Bordiú, no se ha andado con zarandajas: "Mi abuelito eran un gran tío, una buena persona. Era divino y muy familiar". Sé dictador y ten nietos para esto.

viernes, 16 de septiembre de 2011

Rolebis

-"BUENAS.
-Buenas.
-Usted dirá.
- Tengo un problema, doctor.
-Cuente, cuente.
- De chaval, veía todo el deporte que echaban en la tele: fútbol, baloncesto, ciclismo, billar americano, doma clásica, ajedrez, kárate, bobsleigh, saltos de esquí, campeonatos de pala corta, badminton, natación sincronizada, lucha libre...
- Pare, pare. De por sí, ver deporte por televisión no es perjudicial para la salud.
- Ya. Además, con el paso de los años me quité de casi todo. Empecé a ver menos deporte por la tele. ¿Y? Ahora veo el fútbol de los sábados, algún partido de la Champions, todo el ciclismo que puedo, algo de basket, un poquito de pelota... Pero en pequeñas dosis.
- Vale. ¿Y cuál es el problema?
- Pues que a veces no me creo lo que veo por la tele. No sé si el ciclista, el futbolista, el jinete, el nadador o el atleta van limpios. Usted me entiende. No sé si a los días o semanas me vendrán con un solomillo de Irun, un EPO, unos corticoides...
- Hala, le voy a recetar Rolebis. Tome uno antes de desayunar y otros dos antes de comer y de dormir.
- Me deja usted más tranquilo. Adiós, y gracias.
- Vaya usted con Dios".

sábado, 10 de septiembre de 2011

González Pons

Ganas me han entrado de hacer una recolecta en la redacción para echarle unos eurillos al más perroflauta de los diputados y senadores: Esteban González Pons, parlamentario por Valencia y vicesecretario general de Comunicación del PP. Según la declaración de bienes y rentas de sus señorías que hizo pública el pasado viernes la web de la Cámara Baja, este buen hombre no tiene ni coche ni piso. Las cuentas, los depósitos y los activos financieros le han reportado 139,08 miserables euros y debe 8.365 euros a Hacienda después de solicitar un aplazamiento de pago al fisco. Destina 28.116,36 euros de los 75.797 que gana al año a abonar la pensión a su exmujer, así que ya me dirán. Digo yo que María Dolores de Cospedal (que declara unos ingresos anuales de 223.598 euros) tendrá calderilla para sacar del apuro a su compañero de escaño. La lectura de los ingresos que declaran algunos de los diputados y senadores provoca la risa floja, pero deja conclusiones a tener en cuenta. De media, los diputados poseen dos viviendas y 163.000 euros. Asegura un compañero, con un carga pequeñita de maldad, que será por eso que los políticos se niegan a gravar con más impuestos las segundas viviendas. Y comenta otro colega que si trabajaran en la empresa privada ganarían más dinero. Puede ser. Algunos ganarían más dinero, pero no cabe duda de que otros (y no digo nada de quienes falsean sus curriculums para hincharlos de méritos) estarían guardando cola en las oficinas del paro.

viernes, 9 de septiembre de 2011

Aquel verano de 2011

Nunca te acostarás sin saber una cosa más, y nunca acabarás el verano sin flipar un poquito más en las playas y las piscinas. Estos son algunos apuntes recogidos a pie de toalla en esta estación que, como dice la canción, llega a su final.

- En la piscina descubrí que la chavalería lleva calzoncillos debajo del bañador. Gayumbos grandes, pero no los Abanderado de toda la vida. Gayumbos de marca, con enormes letras, para que se vean bien, y a poder ser con las bermudas caídas. No quiero ni pensar el rebozado de arena que se tiene que montar vestido de esa guisa en la playa.

- Descubrí también que un camarero de un chiringuito te puede meter una estocada en forma de cuenta sin mover un músculo de la cara, y tú a callar, que estamos en crisis y la cosa está muy mala.

-Descubrí el veranito vasco. 21 días sin parar de llover en julio, con todo Dios a remojo. Y no descubrí, porque es un clásico, que en estas tierras, después de un día malo, puede llegar otro peor.

- También descubrí que si a un par de postales no les pones la dirección, no llegan a su destino. Es lo que tiene relajarte en las vacaciones. No estás habituado a ir al buzón de Correos, y para una vez que vas, mandas las cartas al limbo.

- Y descubrí que los hombres que están cubiertos por una mata de pelo son una especie en extinción en las playas. Se llevan los cuerpos depilados y el músculo prieto (ellos), y las gafas grandes (ellas), tipo Pepe Gafez.

viernes, 2 de septiembre de 2011

Ricachones

Un ciudadano español, del que se desconoce su identidad, va a pagar (si no ha pagado ya) 2,5 millones de euros a Christina Aguilera por un concierto privado. Lo leí hace unos días en la contraportada de este periódico y patidifuso que me quedé. Para los que aún no se aclaren con los números grandes expresados en euros, el tipo pagará 104 millones de pesetas (625.000 euros) por cada una de las cuatro canciones que interpretará la diva estadounidense para él solito. Al margen de que el sujeto haya contratado a Aguilera o a Rita la pollera, que sobre gustos no hay nada escrito, el dinero que abonará por su caprichito resulta obsceno y viene al pelo para hincarle el diente al debate sobre si hay que aumentar los impuestos a quienes más ganan. ¿A un tipo que se gasta esta pasta gansa, que demuestra que está podrido de dinero, no se le pueden subir los impuestos? Según los datos de Hacienda, en España hay más de 70.000 contribuyentes que declaran unos ingresos de entre uno y 2,5 millones de euros. Si día tras día el Estado y las entidades financieras (que ahora suben a la chita callando las comisiones) están sangrando al ciudadano medio, ¿a qué se espera para que quienes más ganan, más aporten? En Francia los propios millonarios han pedido a Sarkozy que les suba los impuestos y, en Portugal, el Ejecutivo gravará un 2,5% más a todos los ciudadanos que perciban más de 150.000 euros al año. Digo yo que Zapatero estará esperando a que se lo ordene Frau Merkel, no vaya a ser que estropee el concierto al ricachón.

viernes, 29 de julio de 2011

Dadaab

Cada seis minutos muere un niño en Somalia por el hambre y la sequía que asola a este país africano. Cada seis minutos un gilipollas descorcha una botella de Moët Chandon (a 200 euros la pieza) en el local más pijo de Marbella para rociársela a las chicas que bailan a ritmo del dj alrededor de la piscina. La estupidez humana es insuperable, amigo Sancho. Unos se mueren mientras a otros les importa dos pimientos la tragedia que se vive en el Cuerno de África. Se suele decir que uno no es consciente de un problema hasta que no lo vive en sus propias carnes. No es el caso. Basta ver las imágenes o escuchar los testimonios que llegan desde el campo de refugiados de Dadaab, en Kenia, para hacernos a la idea del drama que sufren cientos de miles de personas, la mayoría mujeres y niños, debido a la peor sequía en los 60 últimos años y a la guerra, siempre las guerras. Ayer, Lourdes Collado, de Save the Children, relataba en la Ser que cada día llegan al campamento 1.200 personas, la mitad de ellas niños esqueléticos. "Trabajamos para que vivan. Hay algunos que llegan con lo puesto, después de estar más de 20 días caminando", decía la cooperante. En Dadaab, un campo construido en 1991 para acoger a 91.000 refugiados, se hacinan hoy más de 450.000. La hambruna en Somalia es desgraciadamente un capítulo, otro, de un continente tan olvidado como desconocido. Por no saber, no sabemos ni poner Somalia en el mapa o, como decía ayer un tuitero: "Hemos creado un mundo demasiado grande para enviar alimentos de un país a otro, pero muy pequeño cuando se trata de lanzar bombas".

miércoles, 27 de julio de 2011

Zikiro

Se llama Joxeluis Altzugarai, pero todos le conocen (conocemos) con el nombre de Zikiro. Es uno de tantos entrenadores que todos los fines de semana se sientan en los banquillos de fútbol de las categorías inferiores de Gipuzkoa. Con una particularidad: en 23 años de carrera no ha visto ni una sola tarjeta, ni amarilla, ni roja. Lo cuenta él mismo en el último número de la revista Ttipi-ttapa: "El secreto está en respetar la labor del árbitro". Lesakarra de pro, exfutbolista del Beti Gazte y Real Unión, y expalista profesional en el Deportivo de Bilbao, Zikiro fue uno de los precursores del fútbol femenino en Gipuzkoa y Navarra. Fue dos veces campeón de Liga con el Añorga y ha entrenado, entre otros clubes, al Beti Gazte, Gure Txokoa y Mariño, todos de chicas, e incluso el Athletic femenino le tentó para ficharle. Sus equipos casi siempre ganan el premio al juego limpio que se concede a los conjuntos que ven menos amonestaciones. En la última temporada ha ascendido a División de Honor con los cadetes del Beti Gazte, que han recibido dos tarjetas en todo el campeonato. "Según cómo sea el entrenador, así es su equipo", asegura el bueno de Zikiro en la revista. En estos tiempos de continuas tormentas dialécticas en todos los ámbitos del deporte, no estaría de más resaltar el trabajo de los Zikiros. Urge uno en el remo después de que, como afirma un compañero de la redacción, Urdaibai y Kaiku hayan convertido su rivalidad en un Barça-Madrid en versión arraunlari. Uno no adivina quién es Guardiola y quién es Mourinho, pero sobra decir que hace falta un Zikiro.

viernes, 22 de julio de 2011

Amador y Ten Dam

La leyenda del Tour se ha ido construyendo con las grandes historias de vencedores y vencidos, y las miserias de los modestos que luchan por llegar a la meta de París. Andrey Amador (conocido en el mundillo ciclista vasco porque se hinchó a ganar carreras en su etapa amateur y porque reside en Orkoien, en la Cuenca de Pamplona) está escribiendo una de esas pequeñas gestas que hacen grande a la Grande Boucle. Es el primer ciclista de Costa Rica que disputa el Tour y desde la salida en el Paso de Gois, hace ya casi tres semanas, está viviendo un calvario. En esa primera etapa sufrió una caída que le provocó un esguince de tobillo de grado dos. El médico de turno suele prescribir una inmovilización de entre diez y quince días para curar esta lesión. Pero Amador no se ha quedado tumbado en el sofá como lo hubiera hecho el común de los mortales. Sigue pedaleando con el único objetivo de alcanzar la meta y convertirse en el primer corredor tico que consigue el carné ciclista. Ayer llegó a la cima del Galibier a 35 minutos de Andy Schleck, en el autobús, y es penúltimo en la clasificación general, acosado por Fabio Sabatini. Laurens Ten Dam protagoniza otra de esas intrahistorias del Tour que conmueven. Desde el pasado sábado corre con la boca hecha trizas. Se cayó bajando el col de Agnès y recibió ocho puntos de sutura. Impresiona ver la fotografía del día de su accidente, con una venda ensangrentada cubriéndole la cara y el labio hinchado. Por supuesto, no solo no se ha retirado sino que camina en una más que meritoria 61ª posición.

miércoles, 20 de julio de 2011

Puntualidad

Leo en un blog que "la puntualidad es la virtud que representa el respeto hacia uno mismo y hacia los demás". Qué tremendos se ponen algunos cuando les da por reflexionar en Internet. Yo soy un tipo moderadamente puntual. O sea, unas veces llego a la hora, y otras no. Y no me pongo exquisito cuando alguien con el que he quedado se demora porque suele ser la horma de mi zapato. Las personas puntuales se comportan con las impuntuales como los exfumadores con los fumadores. Hay personas puntuales, impuntuales (un político que no nombraré lidera el ranking) y luego están los que llegan a las citas con media hora de antelación. Son los del "por si acaso". Los mismos que te miran con cara de mala leche cuando llegas un minuto antes de tu cita y pasas a la consulta casi sin esperar. Por último, están los auténticos expertos en entrar en todo tipo de comercios (mayormente quioscos y panaderías) un minuto antes de que bajen la persiana. Estos últimos días he descubierto otro tipo de puntualidad, la asimétrica, que se practica en Osakidetza: tú tienes que estar a la hora, pero la persona que te recibe puede tomarse ciertas licencias. Por un despiste (confundí una cita con otra), acudí a una consulta con ocho minutos de retraso. Resultado: me tuve que comer toda la espera. Pasaron por delante de mí algo así como seis personas hasta que la médico me hizo un hueco en su apretada agenda. Dos semanas después fue a la inversa: el médico me atendió media hora después del horario previsto en la cita que me facilitó Osakidetza. Hasta un visitador médico se coló en la consulta. Por algo les llaman salas de espera.

viernes, 15 de julio de 2011

Jubilarse

Hoy, como todos los días, se levantará, se aseará y, después de tomar el desayuno, recorrerá los apenas 500 metros que separan su casa del trabajo. Se desplazará en la vieja bicicleta Peugeot, que dejará aparcada (sin candarla, no hace falta) en la puerta de la oficina. A eso de las ocho entrará en la sucursal, realizará mil tareas, atenderá unas cuantas llamadas y a otros tantos clientes y, a eso de las tres de la tarde, regresará a casa. La rutina que ha seguido durante 40 años llega hoy a su etapa final. Hoy es su particular París ciclista. Hoy se jubila. Con la poca perspectiva que da que a uno le falten unos 30 años para alcanzar la edad de jubilación, no aciertas a calibrar cómo debe ser el cambio de vida que supone. Hoy trabajas y el lunes te puedes quedar en casa haciendo macramé mientras ves un documental de la BBC. Digo yo que es una etapa más de la vida, como aquellos años en los que pasamos del COU a la universidad, o cuando dejamos la casa familiar y nos independizamos. Y digo yo que al jubilarse también se necesita un periodo de adaptación. Porque uno se jubila del lugar del trabajo, pero a veces no de trabajar. Tenemos las calles repletas de abuelos-canguro semiesclavos a los que exprimimos como una naranja. Y, como me apunta irónicamente un compañero, hay otra buena ración de jubilados que se encargan de vigilar las obras públicas. Pero, si la salud lo permite y no abundan las obligaciones, digo yo que jubilarse debe ser una bendición. Que te vaya bonito y que lo disfrutes.

viernes, 8 de julio de 2011

La mano derecha

"El tamaño del pene está en los dedos de la mano". Leí el titular de la información de corrido, como quien no quiere la cosa, e, instintivamente, miré mi mano derecha (uno es diestro) antes de seguir leyendo. Resulta que, según un sesudo estudio científico de un grupo de urólogos de Seúl (Corea del Sur), se puede establecer una relación entre el tamaño de los dedos y el ídem del pene. A saber. Cuanto más parecida sea la altura de los dedos anular e índice de la mano derecha, más largo es el fistro, que diría el bueno de Chiquito. Aseguran los expertos que la investigación se hizo con hombres (penes) asiáticos, que la tienen más pequeña (eso no lo digo yo, lo dice una tal Denise Brooks, bióloga del Skidmore College de Nueva York), así que se desconoce si el resultado se puede aplicar en Europa. Puesto a llevar la teoría a la práctica, según terminé de leer el texto, lo primero que hice fue mirar los dedos anular e índice de mi mano derecha para calcular el calibre... y hasta aquí puedo leer. Pene y sexo. Hablar de sexo es la mejor herramienta para aliviar tensiones cuando en una tertulia de amigos se empieza a discutir de política. Pongamos que un amigo comenta lo dura que se ha puesto la cosa con cuatro partidos distintos gobernando en cuatro instituciones. Cuando la conversación alcanza el estadio de gallinero, en el que normalmente nadie escucha a nadie y todos se escuchan a sí mismos, introduces cualquier comentario banal sobre sexo y tiene un efecto desengrasante que ni el mítico 3 en1. Pruebe y verá. Escuche a su mano derecha.

lunes, 27 de junio de 2011

Alberto se nos casa

El tío Alberto se nos casa el viernes y sábado con la nadadora. Bazen garaia, gizona! No es que se le haya pasado el arroz, es que ya es socarrat. 52 añitos (y dos hijos) tiene el bendito. Y no yerro cuando digo que se casa el viernes y el sábado. Hoy por lo civil y mañana por la santa madre Iglesia. Como en casa somos muy de los Grimaldi, el cuñao Julen ha organizado para el sábado un sarao. Dice que tenemos que ir vestidos en plan fiesta ibicenca-hippie. Él pone la bebida, que siempre suele ser abundante, y el menú, todo de barbacoa y cocina fina: morcilla, beicon, longaniza y txistorra. Está pensando en sacar la tele a la terraza para ver la boda en plan pantalla gigante, para que luego podamos puntuar a las mejor y peor vestidas. A mí lo que me jode es la hora. Alberto, las cinco de la tarde no es una hora para casarse, y menos si tenemos el prólogo del Tour. Esas cosas se planifican, hombre de Dios. O boda, o Tour. Ansiosos estamos ya por ver la semana que viene las fotos de la segunda boda del siglo de este semestre. A la Carolina, la Estefanía, ese crack del Hannover que se bebe hasta el agua de los floreros (irá, ¿no?) y toda la tropa de chavales. A mí, lo que más me gusta de las revistas del colorín no son ni los textos (¿conocen a alguien que los lea?) ni las fotos. Me encantan los pies de foto. Ahí van unos ejemplos reales como la vida misma de hace un par de semanas: "Luis Medina llegó con su habitual estilo", "La hermana de la duquesa de Cambridge ya es todo un icono de la moda" y "El embarazo de la modelo les ha llenado de felicidad".

viernes, 24 de junio de 2011

110 km/h

El Gobierno decidirá hoy si prorroga la decisión de limitar la velocidad máxima en autovías y autopistas a 110 km/h. Por si no lo recuerdan, porque parece que han pasado un par de siglos, hasta el 6 de marzo se podía circular a 120 km/h. Bueno, en realidad, ahora también es posible conducir a 120 km/h y a 160 km/h si no se cruza uno con una patrulla policial o un radar escondido detrás de un contenedor. No sé si la medida ha contribuido a que se consuma menos energía, se importe menos petróleo y el gabinete de ZP se ahorre una pasta. A mí me ha servido para conocer más a fondo a los enculadores, con perdón. Por enculadores se entiende a aquellos conductores, sean de moto, coche, camión o autobús, que se te pegan a la chepa de tu vehículo, habitualmente para adelantarte. Hay dos tipos de enculadores: los que se colocan a un metro de tu coche y te hacen un pressing sin mover la ceja, y los que también se colocan a un metro de tu parachoques pero gesticulan, se acuerdan de toda tu parentela, tocan el claxon y te dan las luces. Con la medida de limitar la velocidad, a los enculadores se les ve más el plumero. No fallan.Te pones a adelantar al vehículo que te precede respetando el límite de velocidad y aparece de repente el típico bicho que circula a 150 km/h. Hay una táctica infalible para enfurecer aún más a la fiera: adelantar respetando la norma y, si al pasar sigue lanzado improperios, saludarle educadamente. Como debe ser.

viernes, 17 de junio de 2011

Selectividad

Es probablemente el examen más absurdo de toda tu vida de estudiante y es, también probablemente, el que más te pone de los nervios. Cambian las generaciones, los modelos educativos, los profesores y los alumnos, pero la prueba de Selectividad se mantiene inamovible desde 1975. Hubo un tiempo en el que incluso se montó una campaña para tumbar la última barrera que separa a un estudiante del acceso a la universidad, pero no fue más allá del debate en los medios y las protesta en las calles de la chavalería que tenía que examinarse. Uno siempre ha pensado que lo más lógico sería establecer al final del Bachillerato una nota media que recoja la trayectoria del alumno durante esta etapa y, a partir de ahí, establecer los baremos de entrada a la universidad. Retrocediendo a la época de mi generación (me lío con el actual sistema educativo), lo más natural hubiera sido que, para acceder a la uni, te tuvieran en cuenta los resultados de los tres cursos de BUP y el último de COU. Pero no. Había que superar la sacrosanta Selectividad que, por cierto, la aprueba casi todo el alumnado. Más difícil es acertar con la carrera que se elige. Que seguro que conocen a ingenieros, arquitectos, profesores o diplomados de Turismo que no han ejercido nunca. Y más difícil es aún afrontar situaciones que no te enseñaron en la facultad. Por ejemplo que, por tu condición de periodista, te enteres antes que nadie de un fallecimiento y se lo tengas que comunicar a un amigo. Eso no hay prueba de Selectividad que lo supere.

viernes, 10 de junio de 2011

Renuncias

Odón Elorza dejará de ser mañana alcalde de Donostia tras 20 años en el cargo. A eso de la diez de la mañana (el Pleno se celebra a la nueve), el Apocalipsis estará ya acechando a esta gloriosa ciudad. Las siete plagas llegarán a la Casa Consistorial con un Lucifer de gafas y txapela. Por lo escuchado y leído desde la noche del 22-M a la oposición, mayormente a los socialistas y el PP, se deduce que de lo poco que Bildu va a dejar en pie es el marco incomparable. Ni los 100 días de rigor se le han concedido a la coalición que gobernará Donostia los cuatro próximos años. El berrinche de Elorza después de su derrota electoral y las andanadas contra Bildu suenan más a desahogo por el lamentable trato que ha recibido de su mismo partido que a otra cosa. Elorza, un precursor de la geometría variable de Zapatero (ha gobernado con PNV, PP, EA, IU, Alternatiba y Aralar), será recordado más por lo que hizo que por lo que deja sin hacer. Se marcha por la puerta de atrás y ve cómo su compañero de partido Ernesto Gasco coge la pértiga para dar un salto hasta la primera plaza de la candidatura que ni Serguei Bubka. Que esa es otra. La imagen que está ofreciendo el PSE con las renuncias de sus hasta hace quince días primeros espadas en Bizkaia y Gipuzkoa o con la designación como alcaldable de alguien que no ha sido elegido en las urnas, roza el esperpento, por no decir que es una falta de respeto a sus votantes. José Antonio Pastor dijo ayer que antes de las elecciones ya había decidido que renunciaría a su acta de juntero. Entonces, ¿para qué se presentó? Hay quien no ha entendido nada del movimiento 15-M.

viernes, 3 de junio de 2011

Aires de polémica

Que soplen aires de polémica por la cordillera del Himalaya es más viejo que la pana. Que se lo digan a Reinhold Messner, el mejor alpinista de la historia, que durante años tuvo que soportar la pesada carga de haber abandonado a su suerte a su hermano Günther en las faldas del Nanga Parbat, allá por 1970. Sus compañeros de expedición le tildaron de soberbio y ególatra, y le señalaron como el culpable de la muerte de su hermano. Hace seis años supimos que Messner tenía razón y que Günther murió en una avalancha cuando descendía del Nanga Parbat. Razones tendrán también Juanito Oiarzabal y Edurne Pasaban para haberse enzarzado en una polémica absurda y nada edificante. Conocemos los argumentos de Juanito, pero no los de Edurne, así que se hace complicado enjuiciar una cuestión que el alavés convirtió anteayer en una de esas tertulias barriobajeras de Punto Pelota. La versión que ofreció el volcánico Juanito es perfectamente creíble, pero el lenguaje que utilizó le pierde. El fondo como contraposición a las formas. Lo peor para ambos es que este fuego cruzado desprestigia a un mundo que ha perdido hace tiempo su halo de romanticismo, aunque todavía hay casos y casos. Y aún peor es que espectáculos como el de esta semana solo contribuyen a que muchas personas ajenas al mundo del montañismo banalicen los éxitos de Pasaban y Oiarzabal. Como si subir un ochomil fuera un reto al alcance de cualquiera. Pena, penita, pena.

viernes, 27 de mayo de 2011

Sentido común

Hay gente con la que convives toda tu vida, pero a la que nunca llegas a conocer del todo. Sabes cuándo está de mala leche, pero te resulta imposible interpretar sus silencios. Hay otro tipo de personas con las que te bastan cinco minutos, media hora o tres cuartos de hora de conversación, no para conocerlas, pero sí para darte cuenta de si te caen simpáticas. No conozco a Martín Lasarte más allá de lo mucho que he leído, visto y oído en los dos últimos años, y más allá de la hora larga que me concedió para una entrevista para la revista On, el pasado mes de julio. La Real acababa de iniciar la pretemporada de la vuelta a Primera. En aquella conversación habló poco de fútbol y mucho de la vida, de sus recuerdos, de su forma de ser. Bastó una hora para comprobar que era un buen tipo y que en el fútbol y en la vida se guía por el sentido común. Jokin Aperribay, que también tiene cara de buen tipo, también se ha manejado con sentido común desde que accedió a la Presidencia de la Real. Por eso, a ojos del aficionado, resulta inexplicable la destitución de Lasarte. El entrenador ha cumplido los objetivos que le marcaron, ha jugado media Liga sin uno de los mejores jugadores de la plantilla, ha sacado chispas a la cantera y ha logrado la permanencia con una suma de puntos que en otros tiempos te ponía a las puertas de una competición europea. Y, sin embargo, está en la calle sin que a día de hoy sepamos las razones. Más que nada porque el club todavía no las ha ofrecido. Que te vaya bonito, Martín.

jueves, 19 de mayo de 2011

Campaña

En 2010 supimos que los políticos se habían convertido en el tercer problema para los ciudadanos (lo decían las encuestas del CIS). Un año después han consolidado su posición (otra vez según los mismos sondeos), y la campaña electoral no ha hecho sino confirmar que es complicado que, quien es un problema en sí mismo, nos vaya a arreglar nuestros quebraderos de cabeza. Hoy se cumplen catorce días desde que los partidos abrieron su escaparate para mostrarnos todo lo que nos ofrecen para los próximos cuatros años. Conclusión: las campañas se han convertido en un tostonazo. Son una especie de paréntesis en el frenesí político porque lo importante se juega antes y después. Los preliminares se calientan en los últimos tiempos en los tribunales (recurso va, fallo viene) y el pospartido se disputa en los despachos, negociando los pactos que nadie se atreve a acordar de antemano. Durante el partido hay mucho pase horizontal, poco ataque y sobredosis de catenaccio. La precampaña es tan pesadísima y dura tantos meses que los quince días oficiales de rigor no son más que un trámite que los partidos cumplen con viejos mandamientos y nuevas recetas. En las últimas campañas tratan de competir en originalidad, en una carrera por ver quién se tira antes en parapente o posa en bolas para el Interviú local. Hay mucho continente y poco contenido, o eso es al menos lo que uno ve a ojos de periodista. Será que estos días estamos hasta arriba y solo pensamos en cuándo acabará. Un caramelito, por favor.

viernes, 13 de mayo de 2011

Terremotos

Lo más cerca que he estado de vivir (que no sufrir) un terremoto fue a principios de los 90. No recuerdo el año, ni el grado del seísmo en la escala de Ritcher, pero sí me acuerdo de dónde estaba: tumbado en la cama del piso de estudiantes mientras repasaba unos apuntes. Será que había examen al día siguiente. Recuerdo que la lámpara del techo se movió como un demonio y que un buen número de vecinos salieron a la calle alarmados. El asunto no fue a más. Un par de sirenas por aquí, otro revuelo por allí, y se acabó. Un susto y vuelta a estudiar. Días después, algún avispado sacó un dinerillo vendiendo camisetas con el lema Yo también sobreviví al terremoto de Pamplona. Con las catástrofes naturales pasa como con los títulos de la Real: te acuerdas como si fuera hoy de dónde estabas en aquel momento. La gente de Lorca no olvidará en su vida que el miércoles 11 de mayo la tierra tembló bajo sus pies. Como algunos nunca hemos olvidado las inundaciones del 82, el fango que invadía los pisos del barrio y la impotencia de no saber cómo parar aquel enloquecido río que se desbordaba por todos lados. Situaciones dramáticas como la que se vive en Murcia siempre enseñan el lado más humano del ser ídem y, por desgracia también, la vertiente más esperpéntica. Esta vez ha sido Isabel San Sebastián. Y no, no, malpensados, no ha atribuido el terremoto a ETA. Ha dicho en Alto y claro (así se llama su programa en Telemadrid) que "a lo mejor así se reactiva el sector de la construcción".

miércoles, 4 de mayo de 2011

El azufre de EEUU

Confieso que hasta el 11 de septiembre de 2001 no tenía ni repajolera idea de quién era Osama Bin Laden. Lo desconocía todo sobre este hombre que a partir de ese día se convirtió en la encarnación del mal, en el azufre de EEUU, que diría Hugo Chávez. Pese a mi patológica afición por leer periódicos, ver informativos, hacer zaping en el dial de la radio y estar conectado a Internet, creo que nunca había oído hablar del tal Osama. Tampoco recuerdo si en alguna ocasión había leído, visto o escuchado algo acerca de Al Qaeda. Supongo que sabía tanto de Al Qaeda y Bin Laden como un periodista de Líbano acerca del laberinto vasco. De estudiante había materias más duras (filosofía y química, por ejemplo) que otras, y en esta profesión me pasa lo mismo con la macroeconomía y los conflictos internacionales. Me pierdo. Tengo que leer las informaciones varias veces y preguntar mil dudas. No sé distinguir a un chií de un suní y Oriente Próximo me resulta un galimatías. Hoy sé quién es (era) Bin Laden y hasta sé que tiene (tenía) 56 hermanos. En un guion propio de Hollywood, el vaquero bueno buenísimo se ha vengado del malo malísimo. Sin juicio previo ni zarandajas, que para asuntos como este los USA no se andan con chiquitas. Patapún p'arriba y a otra cosa, mariposa.
PD: Si no alcanzan a comprender por qué este hombre se había convertido en una obsesión para EEUU, lean en la web de El País el artículo La caza de la ballena blanca del siempre recomendable Enric González y entenderán las razones.

jueves, 28 de abril de 2011

Comprar ropa

El otro día, en plena desbandada general de Semana Santa, fui a comprar ropa. Acudí a una tienda que pertenece a una multinacional. Tardé exactamente 13 minutos y 45 segundos en entrar, elegir dos pantalones, una camisa y un niqui, quitarme la ropa que llevaba puesta, probarme la que había escogido, volverme a vestir, pagar las cuatro prendas y salir de la tienda. Para estos menesteres soy un tipo rápido y pragmático. Será por aquello de que me da una pereza terrible comprar ropa o, mejor dicho, tener que probármela y comprobar que coges dos pantalones de una misma talla y uno te entra y otro no, sin saber por qué. La desgana con la que acudo a renovar mi vestuario es proporcional al entusiasmo que observo en gentes que son capaces de salir de compras dos tardes enteras y volver a casa con las manos vacías. "No había nada para mí", suelen soltar ante tu incredulidad, ya sean pantalones o zapatos lo que buscaban. Que me disculpen ellas, pero creo que lo de ir de compras y no gastar un euro porque "no había nada que me gustara" es una afición más propia del género femenino. En mi visita relámpago comprobé también que hoy es posible comprar cuatro prendas sin que cruces media palabra con la dependienta. Entras, te pruebas, compras y te marchas. Y comprobé también que hay dependientas que se dedican a doblar la ropa que los clientes se han probado sin devolverla a la percha o a la estantería. Dobla que te dobla ropa. Da igual que la tienda sea de aquí o de Pernambuco. Globalización le llaman.

jueves, 21 de abril de 2011

Bildu

Tengo un amigo que tiene un tío que, a su vez, tiene un sobrino que está casado con una prima segunda de otro amigo que tiene una tía abuela que es viuda de un cuñado que es primo por parte de padre de un yerno de la madre de una nuera casada con un tío que es sobrino de la tatarabuela de una cuñada de una sobrina que se llama Izaskun, y que se ha presentado en las listas de Bildu de un municipio guipuzcoano. Conclusión: si Izaskun pertenece a Bildu, mi amigo es de la ETA. No lo digo yo, es el pienso luego existo que aplican los comentaristas (que no periodistas) de la caverna mediática en una asociación de siglas, nombres e ideas que ni tragándote tres raciones de setas alucinógenas. La lupa de Alfredo Pérez Rubalcaba debe ser de última generación porque los argumentos que se escuchan para pedir la ilegalización de Bildu (recuérdese que es una coalición de partidos) superan la paranoia. El último habla del grupo Su ta gar y de la canción que ha compuesto en apoyo a la coalición electoral. Si de trasfondo no hubiera una tragedia de violencia que dura ya demasiadas décadas, sería para hacer chistes y echar risas. Porque de chiste son algunas de las retorticeras razones que se esgrimen para amoldar la Justicia a la conveniencia de intereses partidistas. Se agita la coctelera mediática, se fuerza la legalidad al límite y se buscan afinidades ideológicas, familiares o de lo que sea para concluir que todo es ETA. Y aquí paz y después gloria. Amén.

viernes, 15 de abril de 2011

Copago

"Los políticos saben que el copago sanitario es inevitable". "Hacen falta más privatizaciones". "Hay que vender aeropuertos y que las últimas autovías que se han construido pasen a ser autopistas de pago". "Hay que ajustar los salarios a las condiciones del mercado laboral". Palabrita de Juan José Toribio, presidente de la Fundación Internacional IESE, que el pasado miércoles intervino (se supone que cobrando) en el Encuentro Empresarial de Elkargi. Como facultativo que ofrece recetas económicas contra la crisis, este buen hombre no tiene precio. No sé, un par de ideas más le propongo: implantar la semana laboral de 60 horas y pagar por respirar. El tal Toribio fue director ejecutivo del FMI, ese organismo que cada dos días nos lee la cartilla pero que no supo alertar de que se avecinaba una larga temporada de vacas flacas. Pero volvamos al copago, ya saben, esa otra receta que consiste en que si a usted le operan de la hernia, parte de la intervención se la costea la Administración y la otra ración se la paga de su bolsillo. Dicen que es lo próximo en llegar. En Catalunya ya se ha abierto el melón y hay un encendido debate sobre el asunto. Por si acaso, la Generalitat ya ha adelantado que este año recortará el gasto en la sanidad pública en 1.000 millones, un 10% respecto a 2010. Nada se sabe de si se van a aplicar recortes en las vergonzantes dietas que cobran algunos políticos por asistir a consejos de administración, ni de los escandalosos beneficios que obtienen las eléctricas y los bancos, ni de las exenciones fiscales de las que gozan las clases más acomodadas. Con eso no se juega, amigo.

viernes, 8 de abril de 2011

La ikastola de Hendaia

La ikastola de Hendaia celebró el pasado fin de semana su 40º aniversario con tres jornadas de actividades en el entorno del frontón Gaztelu Zahar. Uno de los actos consistió en completar los profesores, padres, alumnos, amigos y vecinos un recorrido por las calles de la localidad portando 40 simbólicas velas. Amets Arzallus (exestudiante del centro y autor de la canción del cumpleaños) dio la salida con un bertso. Al frente de la marcha estaba el alcalde, Jean-Baptiste Sallaberry, que luego leyó un discurso en euskera y francés. Acabado el protocolo, se encendieron las 40 velas en una tarta gigante confeccionada a base de corcho y, ¡oh sorpresa!, los trozos en los que se dividió el pastel de pega se transformaron en varios edificios. Fue la elegante manera que escogió la ikastola de reclamar al Ayuntamiento un edificio nuevo porque el actual no da más de sí. Ya va para cuatro años que demandaron al Consistorio la necesidad de ampliar las instalaciones, pero aún están esperando. La tarta simboliza de alguna forma la naturalidad con la que en Iparralde se manejan en asuntos como el euskera. Aquí es material inflamable. Escribía ayer José Antonio Pastor en El País que "el euskera no habría alcanzado su recuperación actual sin los socialistas". Hace años que la lingua navarrorum atraviesa una etapa delicada en Iparralde. Pastor puede contribuir también a su recuperación: solo tiene que revocar el acuerdo que adoptaron PSE, PP y UPyD en el Parlamento Vasco para suprimir las ayudas a Seaska a partir de 2012.

viernes, 25 de marzo de 2011

No pararán

Los dueños del fútbol de Primera amenazan con chapar el chiringuito con una mal llamada huelga que en realidad es un cierre patronal. El fin de semana del 2 y 3 de abril, sus muy bien pagados currelas quedarán exentos de acudir al tajo. En el país del disparate, he aquí el mundo al revés. Los clubes pretenden presionar al Gobierno para que elimine la obligatoriedad de que cada jornada se televise un partido en abierto. Quieren más pasta por las retransmisiones para alimentar la gallina de los huevos de oro. Que los presidentes del Barça y Madrid convoquen un paro es una bomberada, con todo el respeto para los bomberos. Con excepciones, que las hay, un buen número de dirigentes de la elite del fútbol han demostrado que son unos pésimos gestores, y no hay que ir muy lejos para encontrar ejemplos. Gastan más de lo que ingresan, prometen un dinero que no tienen y pagan unos sueldos injustificables, por muy excelentes que sean los jugadores. Resulta incomprensible que los grandes clubes paguen salarios estratosféricos (Cristiano Ronaldo cobra cerca de 35.000 euros diarios, y Messi otro tanto), mientras su deuda crece sin parar. Solo en la temporada 2008-2009, los veinte clubes de Primera acumulaban una deuda de más de 3.500 millones de euros, y a día de hoy deben 694 millones a Hacienda. Lo peor de todo es que, como si de un efecto contagio se tratara, el baloncesto y el balonmano viven una situación similar. ¿Huelga? Marearán la perdiz una semana más, y la desconvocarán tras ofrecer una imagen lamentable. Qué país, Martiarena.

viernes, 18 de marzo de 2011

Mili KK

Uno ha crecido pensando que Xalbadorren heriotzean era una canción de Erramun Martikorena, cuando en realidad fue escrita por Xabier Lete. Así que tampoco deberemos extrañarnos si dentro de un par de décadas la chavalería cree que Lau teilatu es obra de Mikel Erentxun y Amaia Montero, y no tenga ni repajolera idea ni de quién es su autor (Juan Carlos Pérez) ni qué era Itoiz. Siguiendo con las analogías, lo que ya no tiene un pase es que el PP se arrogue el título de Gobierno que acabó con la mili, o que JJNN, las juventudes de UPN, saquen pecho asegurando que contribuyeron a la supresión del servicio militar obligatorio, cuando no movieron ni medio dedo. Hombre, nos flaquea la memoria, pero no tanto, que solo han pasado diez años. El fin de la mili se lo debemos a insumisos y objetores, que hicieron bandera del pacifismo con las únicas armas de la palabra y la originalidad, y las miles de personas y decenas de colectivos que respaldaron su causa. Con ingenio y mucho sacrificio personal y colectivo (sobre todo los insumisos), jóvenes de distintas ideologías acabaron con un servicio caduco y anacrónico que ya entonces estaba marcado por su desprestigio social. Una lucha que fue extremadamente dura en Navarra, convertida en banco de pruebas contra todo lo que oliera a rebelión no violenta. Hubo 3.000 insumisos, de los que 600 fueron encarcelados, y más de un alcalde inhabilitado. El Gobierno de turno ya no podía frenar ese tsunami antimilitar y por eso claudicó. Aunque ahora lo vendan como un logro. Ver para creer.

viernes, 11 de marzo de 2011

Billetes de 500

Por segunda semana seguida he realizado un estudio demoscópico (léase encuesta) entre compañeros de la redacción. Como en el caso Mercadona (ver edición del viernes pasado), los resultados vuelven a ser contundentes: solo tres de los diez compañeros consultados han tenido alguna vez en su vida un billete de 500 euros en la mano. No diré quiénes son para no levantar sospechas, no sea que el fisco foral empiece a investigar sus bienes y rentas. No por nada. La posesión de billetes de 500 euros de momento no se castiga, pero tiempo al tiempo. En el Reino Unido desde esta semana ya no se pueden sacar del cajero. Los gerifaltes que mandan en la cosa del dinero han decidido que no se dispensen los billetes porque el 90% se emplean en actividades delictivas. Mayormente el blanqueo de dinero. Francia también trató de quitarlos de la circulación, pero se quedó en el intento. Servidor se incluye entre quienes nunca han tenido un billete de 500 en la mano. No sé ni de qué color son, ni si son más o menos grandes que los de 20. Solo sé que es el billete de más valor de los que circulan en el ancho mundo. Hablamos de 82.000 pelillas, céntimo arriba, céntimo abajo. Si en alguna ocasión tuviera en el bolsillo un billete de 500, supongo que me pasaría como cuando visito un zoo o un parque con animales salvajes: me paso media visita pensando qué pasaría si caigo en la jaula con el bicho dentro. O sea, que estaría pensando que nada más pisar la calle aparecería un tipo navaja en mano para atracarme. Paranoias mías.

viernes, 4 de marzo de 2011

Las cremas del Mercadona

HUBO un tiempo en el que cruzábamos la muga para comprar pantalones Levi"s y las hoy demodé cazadoras vaqueras. Luego descubrimos los lácteos, el aceite, la mantequilla, el camembert y el Caprice des Dieux. Hasta bien entrados los 80 del siglo pasado, hubo contrabando de todo: desde ovejas a cartuchos pasando (nunca mejor dicho) por lingotes de oro. Superados los 90, supimos que al otro lado del Bidasoa había ropa infantil buena, bonita y barata. Hasta que llegó la globalización, se construyeron super mega centros comerciales a diestro y siniestro, aquí y allá, y aquel ir y venir perdió su encanto. Con excepciones, hoy puedes comprar el mismo producto en Angelu y en Zarautz, así que lo que se lleva, lo más in, es el boca oreja. Descubrir ese producto barato y bueno que no lo puedes encontrar en las tierras de Aitor porque (fíjate tú) no hay supermercados de la marca en cuestión. Hablo, claro, de las cremas cosméticas del Mercadona que, por lo visto, causan furor entre el público femenino. 
He hecho un informe de prospección sociológica (o sea, una encuesta) en la redacción con resultados concluyentes: casi todas conocen las cremas. Hablaba el lunes un colega periodista de que parecen milagrosas. Será, será. No sé si rejuvenecen, si limpian, si tonifican, si reducen la celulitis o si hacen desaparecer las patas de gallo. Solo sé que si viajas a Catalunya, Aragón o Cantabria, visitas la Sagrada Familia, Jaca, las cuevas de Altamira... y el Mercadona. Que siempre hay que traer algún encargo para alguna amiga, oiga.

miércoles, 23 de febrero de 2011

El múltiplex

EL 3 de julio de 2009, Miguel Sanz y Patxi López firmaron en Pamplona un protocolo para "normalizar" las relaciones entre Navarra y la Comunidad Autónoma Vasca (CAV). Entre otros acuerdos, el Gobierno foral se comprometió a autorizar la difusión de ETB-1 y ETB-2 en su territorio a través de la TDT. Se suponía que aquella foto en la que Patxi y Miguel posaban todo simpaticones alumbraba un nuevo tiempo en las relaciones entre las dos comunidades. Un año y siete meses después, tras sucesivos cambios de mapas del tiempo, de símbolos y de identidades, ETB se sigue sin ver en Navarra. Por lo visto, la culpa es del múltiplex, un aparato que ni usted ni yo hemos visto en nuestra vida, pero que sirve para que la tele del txori se vea por TDT allende las fronteras vascongadas. Un artilugio que vale un millón de euros. En este país en el que hacemos alarde de nuestra generosidad en la barra del bar ya saben, esta ronda la pago yo, ni uno ni otro Gobierno están por la labor de costear el aparato de marras. Un millón de euros, o sea, el equivalente al 0,02% del presupuesto del Ejecutivo foral y el 0,009% de los dineros que gastará el Gobierno Vasco este año. Calderilla, vamos. Es curioso que tampoco se pueda ver por TDT Xaloa Telebista, radicada en Oronoz Mugaire, cerca de Elizondo, la capital de Baztán que Rodolfo Ares no sabe situar en un mapa, y la única televisión de Navarra que emite íntegramente en euskera. Bah, simples casualidades. Falta de voluntad política se llama. Hasta que llegue la final del Campeonato de pelota de Parejas.

viernes, 18 de febrero de 2011

Háblame en Cristiano

José Luis Mendilibar fue presentado el pasado martes como nuevo entrenador de Osasuna (no confundir con el Osasuna de Pamplona). Dedicó 27 minutos a responder en castellano (o español, lo mismo da) a las preguntas que le formularon los periodistas. Cuando intervino el redactor de Berria y Euskadi Irratia (Mendilibar es euskaldun), el presidente, Patxi Izco, hombre campechano por lo que se ve, le interrumpió con la expresión: "¿No nos podemos enterar todos?". El maleducado gesto del presidente de Osasuna, que luego se disculpó con el periodista a su manera, se produjo solo unos días después de otro incidente con una rueda de prensa y el fútbol compartiendo protagonismo. El entrenador del Girona, Raúl Agné, compareció el sábado después de ganar su equipo en Huesca. Iniciada la rueda de prensa, un periodista se dirigió al técnico en catalán y, como es lógico, éste comenzó a contestarle en el mismo idioma... hasta que fue interrumpido por varios periodistas oscenses que le recriminaron que no respondiera en castellano. Curiosamente, Agné es aragonés (natural de Mequinenza, una localidad zaragozana próxima a Lleida en la que se habla catalán con total naturalidad). Mientras técnicos, jugadores y periodistas bilingües aplican el sentido común, algunos colegas de profesión demuestran una falta de respeto y de educación que abochorna. Recuerdan a esa expresión ("Háblame en cristiano") que acuñaron aquellos que desprecian toda lengua que no sea la suya.

viernes, 4 de febrero de 2011

'Tuper' de reciclaje

En este país en el que somos campeones del blanco o negro, de tener que escoger entre A y B, a uno siempre le ha gustado la gama de grises. Uno de los debates más polémicos de los últimos años está relacionado con el tratamiento de los residuos sólidos urbanos, es decir, con lo que toda la vida hemos llamado basura. Ya saben. O estás a favor de la incineradora, o eres partidario del puerta a puerta. La verdad, ni uno ni otro sistema me convencen. No sé si una incineradora es una solución que con los años puede convertirse en un problema, y tengo dudas de que la recogida de casa en casa sea la panacea, mucho menos en los grandes núcleos de población. Mientras seguimos debatiendo (deporte olímpico en Gipuzkoa), me quedo con iniciativas como la de la pescadería en la que habitualmente hago la compra, que te ofrece la posibilidad de llevarte el producto a casa en un tuper que te facilita el propio comercio. Una excelente manera de reciclar (te ahorras la bolsa y el papel)... y sin que te huelan las manos a pescado. El tuper
incluye, además, un mensaje, este bertso que reproduzco:
Plastikozko hainbertze
poltsa ta papera
oharkabin itten da
zaborra sobera.
Elkarrekin murrizten
saiatuko al gera?
Honatx horretarako
arrainan tuperra.

viernes, 28 de enero de 2011

Banquillos

Siempre he sentido empatía por los deportistas que chupan banquillo. Y no me refiero precisamente a jugadores como Karim Benzema, ese suplente de lujo con el que los medios de comunicación, mayormente de Madrid, y mayormente deportivos, nos están dando una tabarra propia de aburreovejas. Cuando a final de mes te ingresan en tu cuenta 708.000 euros (el sueldo mensual del delantero francés, según la consultora portuguesa Futebol finance), estás tan podrido de dinero que ríete de ver los partidos al lado de Mou. Casi como que te da igual. Lo jodido es tener que vestir el chándal en un equipo de Tercera Regional con un frío siberiano y por amor al arte. Un servidor y su amigo Iñaki, allá por finales de los 80, nos chupamos 29 partidos consecutivos de Segunda Regional en el banquillo. Debíamos ser unos mantas de aúpa porque nos sobraba disciplina: no fallábamos a ningún entrenamiento. Entonces el reglamento solo permitía dos cambios (ahora se pueden hacer cinco), y en el banquillo nos sentábamos tres jugadores de campo y un portero. Uno de los tres jugadores, apodado Blokhin (en honor al delantero ucraniano), salía siempre en la segunda parte por aquello de que era bueno y zurdo. Los otros dos nos jugábamos la otra sustitución lanzando una moneda al aire. Casi siempre ganaba yo. El entrenador tuvo el detalle de alinearnos en el once titular en el último partido de Liga, dado que una semana antes habíamos conseguido el ascenso. Años más tarde, Iñaki triunfó como lateral. Yo decidí juntar letras.

viernes, 21 de enero de 2011

Donostiarras

Dicen que lo peor de París son los parisinos. Que una cosa es Francia y los franceses, y otra los parisinos y sus circunstancias. Supongo que están hasta el gorro de recibir cada año a más de 25 millones de turistas. Hace tiempo, el alcalde, Bertrand Delanoë, tuvo que pedir a sus paisanos que fueran más amables con los foráneos e incluso existe el síndrome de París que, aseguran, sufren algunos turistas japoneses que son maltratados por los camareros de la Ciudad de la Luz por no hablar francés. Supongo que hay un punto de exageración en ese borderismo parisino. Lo peor de Donosti no son ni los precios, ya sea el de un piso o el de un zurito, ni que la OTA te persiga de por vida, así vayas cambiando de lugar de trabajo. Y lo mejor de Donosti no son ni el marco incomparable, ni las vistas desde Igeldo, ni que en media hora puedas pasar de la cima de un monte a darte un chapuzón, ni sus modélicas casas de cultura, ni su amplia y variada oferta cultural, ni sus pintxos, ni unas instalaciones deportivas municipales que no distinguen entre locales y forasteros, ni la Real (que también). Para los que no somos de esta nuestra ciudad, para los que no somos donostiarras de cuna aunque hayamos nacido en la residencia Nuestra Señora de Aranzazu, lo mejor de Donosti son los donostiarras. Ya sé que decirlo así queda de lo más cursi, pero pueden comprobarlo cada día. Si son donostiarras, miren a su alrededor y verán a cuántos amigos y conocidos que llegaron desde otros puntos, esta ciudad les ha atrapado para siempre.